Pablo Maffeo y Vinicius, en el partido de la Supercopa de España.

Pablo Maffeo y Vinicius, en el partido de la Supercopa de España. REUTERS

Fútbol

Vinicius, Maffeo y el pique de nunca acabar en el 'otro' partido de la Supercopa: "Eres malísimo y te vas a casa"

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Al margen del lío de Dani Olmo y su inscripción con el Barça tras la decisión del CSD, del otro asunto que más se había hablado en la previa de las semifinales de la Supercopa de España era del duelo que iban a servir una vez más Vinicius y Maffeo. El choque entre el Real Madrid y el RCD Mallorca ofrecía una de las disputas más calientes de los últimos tiempos en el fútbol español, y enseguida se vio que había cuentas pendientes.

Vinicius y Maffeo disputaron su propio partido aparte de la semifinal en la que sus equipos se jugaban el pase a la final. Ellos se repartían algo muy diferente, ver quién terminaba por encima del otro en el plano personal y cuál podría presumir se haber eliminado al otro del torneo.

El duelo dejó imágenes de todo tipo. Enfrentamientos dialécticos, simulaciones patéticas, cruce de declaraciones sacando pecho y gestos de todo tipo con el objetivo de sacar de quicio al otro. Curiosamente, Maffeo también terminó enganchado con Bellingham en el detonante de la lamentable tangana final del partido.

Desafío desde el inicio

Pronto se vio que había muchas cuentas pendientes entre Vinicius y Maffeo. Ambos sabían que tenían todos los focos puestos sobre ellos, pero pareció importarles poco en su particular riña. 

Fue Maffeo el que primero quiso calentar el partido y empezar a sacar de sus casillas a Vinicius. En los compases iniciales del choque, ambos se cruzaron en una acción normal del juego, y posteriormente intercambiaron un par de toques inofensivos ante el que el jugador del Mallorca reaccionó de manera desmesurada.

Vinicius le puso la mano en el pecho levemente a Maffeo y el futbolista del Mallorca se lanzó al suelo simulando haber recibido una agresión. Estuvo un largo tiempo tirado en el suelo, pero aquello no engañó a De Burgos Bengoetxea.

El colegiado fue rápidamente a por el futbolista del Mallorca y le reprendió por su actitud: "Toca pero no tanto, no hagamos chorradas, ¿vale?", le dijo el árbitro del encuentro, dejando ver que sabía perfectamente lo que había pasado.

A partir de ahí la intensidad fue subiendo poco a poco. En otro lance normal del partido, Vinicius y Maffeo pelearon por un balón dividido. El lateral terminó protegiendo el esférico y fue objeto de falta, aunque Vinicius insistió en la presión. Tanto, que terminó subido a lomos de Maffeo, agachado. El defensa, al ver que tenía al brasileño encima, se incorporó y lanzó al jugador del Madrid por los aires.

Aquello dio paso a una serie de intercambio de gestos y de palabras interminables. A veces con la mano delante de la boca para que no se les pudiera leer los labios, a veces a viva voz y sin censuras. Maffeo le mandó callar en varias ocasiones a Vinicius.

Sube la intensidad 

En la segunda mitad ni mucho menos el incendio se sofocó. El enfrentamiento siguió activo y el intercambio de declaraciones aumentó el tono cuando Bellingham anotó el primer gol que ponía por delante al Real Madrid.

"Te vas a casa. Eres malísimo y te vas a casa", le llegó a decir en varias ocasiones Vinicius a Maffeo estando ambos a escasos centímetros. Maffeo entró al trapo y le contestó señalándole y haciendo el gesto de un bebé en brazos. 

Carlo Ancelotti estuvo en todo momento pendiente de esta disputa entre Vinicius y Maffeo y quiso entrar a calmar los ánimos. En alguna ocasión llamó a su jugador a filas mientras el brasileño le decía que no había hecho nada. "Activo, activo, sigue así, sigue activo. Toca y mueve", le gritó en alguna ocasión tratando de que se centrara en el juego y se olvidara del futbolista del Mallorca.

Vinicius fue sustituido en los últimos instantes del choque y vio la tangana que se montó al final del partido desde la banda. Un toque de Bellingham a Maffeo en la cabeza desencadenó todo, y los jugadores e integrantes de los cuerpos técnicos de ambos equipos se enzarzaron en un tumulto.

Vinicius lo vio desde el banquillo, pero también quiso entrar al trapo. Eso sí, fue detenido por un par de miembros del staff madridista para que no se viera involucrado en la tangana. Todavía queda esta temporada un duelo más Vinicius-Maffeo en La Liga.