El Rey Felipe VI acudió este jueves a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas para desear la mayor de las suertes y despedir a la selección española, que este mismo jueves viajará a Krasnodar para encarar la última fase de preparación para el Mundial de Rusia 2018, ya en territorio ruso.

Acompañado por el nuevo ministro de Cultura y Deportes, Máxim Huerta, el monarca llegó a la sede de la RFEF, donde le esperaban Luis Rubiales, presidente de esta institución, junto a otros dirigentes de la misma, Alejandro Blanco, presidente del COE, y plantilla y cuerpo técnico del equipo nacional.

Tras saludar a Rubiales y los dirigentes, el Rey y Huerta hicieron lo propio con Julen Lopetegui, técnico del equipo nacional, sus colaboradores y con los 25 jugadores que se trasladarán a Krasnodar, los 23 que oficialmente jugarán el Mundial más Jesús Vallejo y Rodri Hernández, que también trabajarán junto a sus compañeros.

"No quería dejar la ocasión antes de que estéis a punto embarcar y marcharos a Rusia de poder venir a daros un abrazo, saludaros y daros ánimos", dijo Felipe VI a los jugadores en el césped de uno de los campos de la Ciudad del Fútbol. "Sé que no hace falta que lo diga, pero que hagáis lo que sabéis hacer mejor, que lo hagáis con ganas, con ilusión. Durante todo este tiempo hasta, espero, el 15 de julio vais a llevar el corazón del país sobre vuestras espaldas", indicó.

Felipe VI apuntó que sabe que los internacionales saben "llevar muy bien" esta responsabilidad" y que "muchísimos millones de españoles van a estar muy pendientes". "Como os dije hace ocho años no solo millones de españoles, porque a medida que vais pasando barreras va a haber mucha más gente en el mundo animando a la selección española, porque lleváis a gala ser una selección que ha ganado un Mundial y dos Campeonatos de Europa, que lleva muchos galones", agregó.

"Pero dentro de esa experiencia", continuó, "también lleva mucha juventud y evidentemente mucha calidad", así como pidió a los futbolistas que se mantuvieran "muy unidos" para superar los momentos difíciles, "que los habrá", lo que a su juicio garantiza que estos pasen más rápido y se minimicen, con objeto de que "las oportunidades se amplíen y al final es cuestión de aprovechar" estas.

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Felipe VI también indicó a los internacionales que en un Mundial "no hay ningún equipo torpe, todos son buenos", pero que "todos temen enfrentarse a la selección española". "Eso evidentemente da mucha fuerza, pero si os mantenéis muy unidos tengo la garantía de que el entusiasmo va a ser desbordante y lleguéis donde lleguéis, tengo la esperanza y la confianza de que vais a llegar muy lejos", apostilló.

"No es fácil ganar un Mundial, qué voy a decir. Muy pocos lo logran hacer, pero ya sabéis cómo hacerlo. Algunos estuvieron allí y los demás tenéis calidad, ganas, ilusión y valores para hacerlo. Adelante. Comeros el Mundial, como os merecéis, y lo podamos celebrar todos juntos", concluyó el Rey.

Maxim Huerta: "Os admiro como superhéroes de verdad"

Sergio Ramos, capitán de la Roja, agradeció al monarca su visita en nombre de la plantilla y le refirió que hay un "equipo muy competitivo, ahora solo falta demostrarlo y volver con la Copa" para que nadie quede decepcionado. "Luego en fútbol pueden pasar muchas cosas, pero nosotros nos dejaremos todo lo que esté en nuestra mano", afirmó.

Màxim Huerta, ministro de Cultura y Deporte pidió a los jugadores que disfrutasen para que así todos en España puedan hacer lo propio y destacó que pone el "el corazón en vuestra humildad, en vuestro trabajo y vuestro esfuerzo". "Os admiro como superhéroes de verdad aunque solo sea porque mi familia ha sido mucho más futbolera que yo. Por respeto a mi familia estoy orgulloso de estar en este ministerio y mi apoyo lo vais a tener y mi corazón, espero estar aplaudiendo y disfrutando.", añadió.

El rey departió con los jugadores por espacio de varios minutos, preguntó a Dani Carvajal cómo iba de la lesión que sufrió en la final de la Liga de Campeones, se fotografió con la plantilla y recibió un brazalete de capitán de la selección de manos de Sergio Ramos, un balón firmado entregado por Andrés Iniesta y la camiseta con el dorsal Felipe VI.

Luis Rubiales pidió a los jugadores que todos sepan "reconocer el valor que siempre la corona le ha dado al fútbol y al deporte en general" y que su visita les hacía sentirse "orgullosos". La selección española llegará en la noche de este jueves a su cuartel general en Krasnodar, donde disputará su último amistoso el día 9 ante Túnez. Debutará el 15 de junio ante Portugal en Sochi.