Primero fue jugador del Rayo, luego los ultras presionaron para que no llegara y, finalmente, antes de que se cerrara el mercado de fichajes, el jugador fue cedido al equipo de Vallecas. Pero este miércoles ambas partes han dado marcha atrás. El Betis, de mano de su director deportivo, Miguel Torrecilla, ha confirmado que Zozulya no será finalmente traspasado al club de Vallecas. ¿El motivo? Los ultras del conjunto madrileño, que le atribuían ideología ‘nazi’, han presionado para que el Rayo dé marcha atrás. Y así lo ha hecho la entidad.



Miguel Torrecilla lo ha confirmado después de comer: “El jugador está teniendo problemas con grupos radicales del Rayo. Nos han informado de ello y, por tanto, hemos hablado con el club para que vuelva a Sevilla. Tenemos la obligación de proteger a las personas. A partir de ahora los departamentos jurídicos de ambos equipos continuaran con el proceso”, confirmó el director deportivo.



INCIDENTES AL LLEGAR A LA CIUDAD DEPORTIVA



El jugador, tras confirmarse la operación en la noche del martes, llegó a la ciudad deportiva del Rayo Vallecano este miércoles por la mañana. Allí, un pequeño de ultras se acercaron y le insultaron cuando el jugador subía las escaleras. “Hijo de puta, ojalá y no fiches por el club”, le dice uno de ellos a Zozulya.

Zozulya, increpado e insultado al llegar a Vallecas



A esto hay que sumar que un grupo de ‘Bukaneros’, nombre con el que se conoce a los ultras del Rayo, han acudido al entrenamiento con una pancarta en la que dicen lo siguiente: "Vallekas no es lugar para 'Nazis'. Presa, para ti tampoco. Vete ya!". Apenas siete personas que se han situado en la grada, pero suficientes para echar por la borda el fichaje de Zozulya. 

NO PODRÁ JUGAR

El jugador, después del incidente, se quedará sin jugar lo que resta de temporada. "Hemos hablado con él y está muy afectado. No se lo esperaba. Escribió un texto a la afición del Rayo, pero parece que no ha llegado a determinados sectores", reconoció el director deportivo del Betis. 

Zozulya no podrá jugar, por tanto, de aquí a final de temporada. El motivo: no se puede jugar en tres equipos durante un mismo curso y él lo hizo en el Dnipro, después en el Betis y ahora lo iba a hacer en el Rayo. Sin embargo, la presión de los 'Bukaneros' ha hecho que tenga que volver a Sevilla, donde se entrenará, pero sin poder disputar partidos oficiales. 

CRONOLOGÍA DE LOS HECHOS



La polémica comenzó a las 19:00 horas. Entonces, según informaron fuentes del club a EL ESPAÑOL, los ‘Bukaneros’ habían frenado el fichaje de Zozulya por supuesta ideología ‘nazi’. De hecho, en su propio perfil de Twitter se mostraron contrarios a su contratación.



Sin embargo, el club, tras dudar y por “cabezonería” del presidente Raúl Martín Presa, llevó a cabo el fichaje del delantero porque era una petición expresa de Rubén Baraja, entrenador del primer equipo. Además, desde la presidencia también quisieron premiar la planificación deportiva sobre las presiones del grupo radical del Rayo Vallecano. De ahí que la entidad, en un primer momento, retrasara la oficialidad del fichaje y, a última hora, lo llevara a cabo.



Ante toda esta polémica, el club hizo oficial, a través de su cuenta oficial de Twitter, un documento en el que el jugador se retractaba de todo lo comentado.



Pero, a pesar de las explicaciones del jugador, los ‘Bukaneros’ y la Plataforma ADRV, que agrupa a peñas del Rayo, volvieron a mostrar su oposición con un comunicado titulado: “En Vallecas no cabe el fascismo”.

Comunicado de los ultras del Rayo.



Finalmente, el club decidió ficharlo. Se anunció a última hora de la noche, antes de que se cerrara el mercado de fichajes, y el jugador llegó a Madrid para firmar con la entidad. Sin embargo, por la mañana, volvió a recibir el rechazo de los radicales del conjunto madrileño y después de comer, el director deportivo del Betis, confirmaba la vuelta del delantero: “Tenemos el deber de proteger a los jugadores”.

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