Fernando Torres: así fue el mosaico del Metropolitano para homenajearlo
El Metropolitano rindió homenaje al delantero rojiblanco con una ovación y una pancarta nada más comenzar el partido entre Atlético y Eibar.
20 mayo, 2018 18:53Noticias relacionadas
- Fernando Torres y Andrés Iniesta, adiós a las leyendas de una época
- Santi Cazorla vuelve al fútbol: hará la pretemporada con el Villarreal
- Torres y Iniesta, adiós a las leyendas de una época
- Hazard salva la temporada del Chelsea con el título de la FA Cup
- Descubre la nueva camiseta del Barcelona para la temporada 2018-2019
- Jesús Vázquez: "No entiendo que haya gays que voten al PP"
- En Roma también hay una Bombonera
- Andrés Iniesta y su despedida más lacrimógena: "Esto es un paréntesis, volverá"
- Higuaín: "Estuve a punto de dejar de jugar, pero mi madre me dijo que siga"
- El Atlético de Madrid celebra la Europa League y la Liga Iberdrola: fiesta en Neptuno y en las calles de la capital
El Wanda Metropolitano no podía fallar. Y no lo hizo. Nada más comenzar, sacó una pancarta para homenajear a su capitán. “De Niño a Leyenda”, rezaba el mosaico, mientras el respetable aplaudía y Fernando Torres salía de los vestuarios para ofrecerle la Europa League para su afición. Precisamente, Simeone quiso también honrar a su capitán dándole la titularidad en el último partido de Liga frente al Eibar.
Así dice adiós el Metropolitano a Torres pic.twitter.com/5oamgVvhO7
— Deportes El Español (@podium_EE) 20 de mayo de 2018
Fernando Torres, tras 404 partidos con la rojiblanca, dirá adiós por segunda vez como quinto máximo goleador de la historia del club tras Luis Aragonés, Adrián Escudero, Francisco Campos y José Eulogio Gárate. Y, además, justo después de levantar su primer título con el Atlético de Madrid: la Europa League obtenida el pasado miércoles frente al Olympique de Marsella en Lyon.
Así, el ‘Niño’ cierra una etapa que comenzó con su debut en Segunda contra el Leganés. Allí, un chico de 17 años pecoso y rubito dio pistoletazo a su leyenda. Después vendría su primer tanto, contra el Albacete en el Carlos Belmonte; sus muchos tantos en el Camp Nou; su viaje de ida y vuelta a Liverpool en 2007 para conquistar Anfield; su paso fugaz por el Milan; su regreso en enero de 2015 para ser recibido por 50.000 espectadores; sus lágrimas en San Siro tras caer derrotado contra el Real Madrid en la final de la Champions; y este último día, junto a su afición, en su casa, en su hogar, el lugar al que siempre podrá volver. Donde nunca se le olvidará. Porque el Niño, ya mayorcito, se convirtió en leyenda.