Bruno Hortelano se quedó sin poner la guinda de oro a su gran actuación en los Juegos Olímpicos de Río. Corre con una valentía y un desparpajo admirable en un mundo lleno de extraterrestres, donde los atletas de raza blanca apenas son capaces de asomar la cabeza. Pese a quedarse sin premio, sin meterse en la final, su nombre ya no suscita desconocimiento en la élite atlética mundial. Un futuro brillante le pertenece.
En la tercera semifinal de los 200 metros, el velocista español entró en cuarta posición con un tiempo de 20.16 segundos, su segunda mejor marca de siempre, pero insuficiente para acceder a la carrera donde se disputarán las medallas. Hortelano fue superado por el panameño Alonso Edward (20.07), el holandés Churandy Martina (20.10) y el estadounidense Justin Gatlin (20.13), que, sorprendentemente, también se quedó fuera de la final.
El discípulo de Adrian Durant, que había batido el récord de España en las series eliminatorias con 20.12 transmitiendo unas sensaciones buenísimas, se vio un poco crispado en los últimos metros de la carrera. Fue incapaz de conseguir uno de los dos primeros puestos que le hubieran coronado como el primer atleta español de la historia que se mete en una final de una prueba de velocidad en unos Juegos -nadie había logrado meterse anteriormente a una semifinal-.
Hortelano corrió la curva codo con codo con el temible Justin Gatlin, plata en los 100 metros, pero ambos fueron superados por un gran Alonso Edward, que realizó una carrera impoluta, aguantando la caída de la velocidad en los últimos metros a la perfección; y por el empuje final de Churandy Martina, que vio compensada de esta forma su descalificación en el Europeo de Ámsterdam, donde Hortelano fue oro. Para Gatlin, subcampeón del mundo del doble hectómetro, quedarse fuera de la final fue un auténtico fracaso. También fue eliminado Yohan Blake, plata olímpica en la distancia, con un discreto registro de 20.37.
"No esperaba menos de una semifinal olímpica. Ya tenía entendido lo que iba a ser antes de empezar. He ido a disfrutar, a hacer la mejor carrera que podía hacer y creo que he hecho justo eso", confesó el atleta español afincado en Estados Unidos. "Mi sueño olímpico se ha cumplido".
Otro paseo de Bolt
Hortelano se quedó con el 10º tiempo total de los semifinalistas, a sólo seis centésimas de alcanzar algo que se asemejaba imposible. El mejor registro, cómo no, lo marcó el jamaicano Usain Bolt con 19.78 segundos. El mejor atleta de todos los tiempos firmó la enésima exhibición sobre el tartán azul del Engenhao: corrió la curva al máximo y se dejó ir los últimos 60 metros, mirando a izquierda y derecha y con una sonrisa en la cara. El show de Bolt en Río todavía no se ha terminado.
El jamaicano estuvo bien secundado por el canadiense Andre De Grasse, el segundo más rápido con 19.80, que también cruzó la línea de meta de forma cómoda, pasándoselo en grande como escudero de Bolt. El cuatrocentista LaShawn Merritt (19.94) y el francés Christophe Lemaitre (20.01) también dejaron grandes sensaciones. El oro parece claro, pero la lucha por la plata y el bronce corresponde al resto de mortales.