La España de Sergio Scariolo se juega el liderato del grupo de la muerte ante la Eslovenia de Luka Doncic. El equipo comandado por el jugador de Dallas Mavericks no ha hecho más que endosar palizas tanto a Argentina (118-100) como a Japón (116-81), pero busca consagrarse ante la Selección más favorita tras Estados Unidos. Porque la última campeona del mundo, pese a la edad de jugadores como los Gasol, sigue siendo un referente en el baloncesto internacional.
Ambas selecciones mantienen el casillero de derrotas a cero. Si Eslovenia se quitó de encima a Argentina y Japón sin demasiadas complicaciones, España siguió un camino similar frente a los mismos rivales. El debut de la Selección de baloncesto se produjo ante Japón y, pese al atasco inicial en estos Juegos, los de Scariolo acabaron despuntando para sumar un triunfo por 77-88. Y frente Argentina, gran examen para la cita olímpica, ni el espectáculo anotador de Laprovittola bastó (81-71).
Los balances son idénticos (2-0) y el liderato del grupo se decidirá en esta última jornada. Con horario algo extraño en España para un duelo de estas características (10:20 horas), el futuro en los Juegos Olímpicos se decidirá sobre el parqué. Doncic ya ha dejado claro que las polémicas como la de la fiesta en la Villa Olímpica no le afectan y España, con tres jugadores en semiaislamiento por un contacto con un positivo en la Covid-19, debe demostrar por qué su defensa es tan importante.
Quien gane de las dos pasará al bombo 1 del sorteo -que se realizará minutos después del encuentro-. Eso significará no cruzarse con Estados Unidos y sí con Italia o Alemania. En caso contrario, el que caiga derrotado y pase como segundo, tendrá que enfrentarse en un 50% de posibilidades a Estados Unidos, que como mejor segunda clasificada no puede jugar contra ningún tercero.
El recuerdo del Madrid
Tres jugadores de la actual selección española forman parte del Real Madrid. Y a todos ellos, aunque en diferente medida, los conoce Luka Doncic. El base esloveno compartió vestuario con Sergio Llull y Rudy Fernández y, tres años después de saltar a la NBA, se reencontrará con ellos en una pista de baloncesto. Igualmente, también conoce a un Garuba que, aunque de otra generación en la cantera, está siguiendo pasos similares a Luka.
Doncic posa con la réplica de la Euroliga en el WiZink Center
Doncic formó parte de esa familia que es la plantilla merengue desde el año 2015, cuando ya empezó a contar para Pablo Laso. El esloveno era el canterano, el más joven, la estrella que había que cuidar para que no se perdiera entre focos y posibles críticas. Con su corta edad, las bromas eran constantes, como también los consejos como si de padres o hermanos se tratara.
Su fichaje por Dallas en 2018 puso fin al vínculo deportivo, aunque no al sentimental. Y, tres años después, los dos veteranos de la Selección podrán volver a verse las caras con 'su' chaval en una pista durante los Juegos Olímpicos con mucho en juego. Más allá de esos reencuentros madridistas, Doncic también conoce a jugadores como Ricky o Marc (por su estancia en la NBA) o los hermanos Hernangómez (amigos del jugador).
España quiso ficharle
El vínculo de Luka Doncic con España es importante. Tanto que llegó a ser uno más, dominando el idioma y conociendo a la perfección las calles y costumbres de la capital. El esloveno pisó el territorio nacional con apenas 13 años sin manejar el castellano ni tener datos suficientes sobre el país. Abandonó su tierra con el objetivo de cumplir un sueño y, a ser posible, vestido de blanco. Y lo hizo.
La historia de Luka todo el mundo la conoce: creció en la cantera merengue, se ganó un puesto en el primer equipo de Pablo Laso, lideró tanto en Liga Endesa como en la Euroliga y acabó marchándose a la NBA para hacerse con los mandos de Dallas Mavericks, donde ahora es una estrella más junto a los LeBron James o James Harden.
Luka Doncic durante un partido de Eslovenia
Pero en ese periplo de éxitos donde estaba la cantera del Real Madrid y los rumores de la NBA también apareció la Selección. Luka Doncic podía ser nacionalizado y jugar con las categorías inferiores antes de dar el gran salto a la Absoluta. De hecho, corría algo de prisa atarle cuanto antes. La idea de ver a Doncic asistiendo a Pau Gasol o siguiendo a las órdenes de Sergio Scariolo sería digna de película.
Sin embargo, él siempre lo tuvo claro y Eslovenia era el equipo con el que defender una bandera. En 2016, después de un gesto de la Federación, Luka Doncic se pronunció para descartar rumores desde un principio. "Estoy muy agradecido con el Real Madrid, la ciudad de Madrid y España, pero mi elección siempre ha sido jugar en mi país de origen, Eslovenia". Así fue. Tras participar en el título del Eurobasket, liderar en el Preolímpico y arrasar en este inicio de los Juegos, Luka Doncic se reencuentra con la España que le vio crecer.
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