Los Juegos Olímpicos ya están repartiendo sus primeras medallas. Ya son cuatros días de competición en el que las grandes potencias van colocándose entre los primeros puestos del medallero. Entre ellas no está España, que se mantiene con una presea en su haber, pero la confianza de la delegación española en los 383 deportistas que les están representando en París es total.
De momento, el único español que ha logrado colgarse una medalla al cuello ha sido Fran Garrigós. El judoca madrileño logró llevarse el bronce después de imponerse al georgiano Giorgi Sardalashvili. Una gran noticia no solo para estos Juegos, sino también para su disciplina que acumulaba 24 años sin ver una medalla en una cita olímpica.
La de Garrigós fue la primera y hasta ahora la única gran alegría del deporte español en estos Juegos Olímpicos. Su medalla entraba dentro de muchas quinielas y cerca estuvieron de llegar algunas más. Su compañera judoca Laura Martínez se quedó a las puertas de la medalla de bronce. Lo mismo ocurrió con el piragüista Miquel Travé, a quien una penalización por tocar una puerta le privó de una medalla de plata.
España podría sumar a estas alturas alguna medalla más. También podría haber caído la de Maialen Chorraut, pero esta vez la vasca no pudo subirse al podio por cuarta cita olímpica consecutiva. Quizá, el resultado de la piragüista española haya sido la mayor 'sorpresa' hasta ahora en la delegación española.
No puede cundir el pánico. Se están cumpliendo todos los pronósticos y la hoja de ruta para superar las medallas de Barcelona 1992 se mantiene firme. Incluso varios nombres que no contaban como favoritos están ganando puntos para colgarse una medalla. Es el caso de Mar Molné en tiro femenino, Rafael Lozano en boxeo o la dupla Aleix García-Rodrigo Conde en remo.
Los favoritos, con opciones
Mientras tanto, aquellos deportistas o disciplinas llamadas a dar las alegrías a España en estos Juegos siguen dando pasos hacia el éxito. Es el caso de la selección femenina y masculina de fútbol o figuras como Carolina Marín, Alcaraz en individual y en dobles con Nadal, Enmanuel Reyes...
También se mantiene firme el nadador Hugo González. De momento ha disputado la prueba de 100 metros espalda logrando un sexto puesto en la final. Gran resultado teniendo en cuenta que su fuerte llegará en los próximos días en los 200 metros espalda, disciplina donde es campeón del mundo.
En los deportes colectivos hay algunas sombras, como la selección femenina de balonmano, pero también hay equipos bien posicionados. Las selecciones de fútbol, llamadas a morder metal, ya están en los cuartos de final después de dejar una buena imagen. En baloncesto también hay opciones de seguir con vida, así como en waterpolo o balonmano.
Todas estas opciones son de los deportistas que ya han debutado en París, pero todavía son muchas las estrellas que todavía no se han estrenado en la capital gala. Lo mejor está por llegar, especialmente a partir del 1 de agosto.
Golpe de efecto
Este miércoles podrían llegar dos medallas en tiro femenino de la mano de Gálvez y Molné, pero muchas esperanzas están puestas con lo que pueda ocurrir a partir del jueves 1 de agosto.
En este primer día de mes España podría aspirar a ocho medallas. No será fácil, está claro, pero será una jornada trascendental para las aspiraciones a superar el récord de Barcelona 92. Desde Álvaro Martín y Laura García-Caro en 20 KM marcha, hasta Botín y Trittel en vela o Enmanuel Reyes en boxeo. Un día clave.
Está también por llegar la parte del atletismo. En ella Jordan Díaz y Ana Peleteiro. Tras la vuelta a la actividad superada su maternidad, la atleta gallega quiere mejorar su actual bronce en triple salto. Las opciones para conseguirlo se han multiplicado aún más tras confirmarse la baja por lesión de la legendaria Yulimar Rojas, y el reciente título de campeona de Europa respalda sus posibilidades.
En la misma prueba, el triple salto, pero en categoría favorita, el mayor candidato es español, Jordan Díaz, quien hace unas semanas se proclamó campeón de Europa, con un salto antológico de 18,18, el tercer más largo de todos los tiempos. Su gran es el rival portugués Pedro Pablo Pichardo, y detrás de ellos hay un abismo, por lo que la medalla debería caer.
Ambos son dos de los candidatos más claros para España. Todo lo que no sea subirse al podio sería una gran sorpresa. Mientras tanto, otros deportistas como Adriana Cerezo o Alberto Ginés buscarán revalidar el éxito de Tokio. No lo tendrán fácil, pero si tienen el día existen muchas posibilidades de que consigan una metal.