Javier Pérez Polo, durante su combate en semifinales.

Javier Pérez Polo, durante su combate en semifinales. REUTERS.

Juegos Olímpicos

Javier Pérez Polo queda apeado de la pelea por el oro: cae en 'semis' y disputará el combate por el bronce

El taekwondista español no puede con un Ulugtbek Rashitov que se rehace de su dolencia en el pie, y queda relegado a la pelea por la medalla de bronce.

8 agosto, 2024 17:06

La clásica medalla olímpica del taekwondo español deberá esperar. Tras el amargo sabor de boca que dejaron Adriana Cerezo y Adrián Vicente, la presea podría llegar de la mano Javier Pérez Polo, que partía como quinto cabeza de serie, en -68 kilos masculinos.

Deberá ser de bronce después de caer en semifinales ante el uzbeko Ulugtbek Rashitov y quedar apeado de la pelea por el oro en la final. En cualquier caso la presea de bronce significaría el broche a un prolífico palmarés en el que figura una plata en el Mundial 2019 y tres medallas europeas.

Tendrá la oportunidad de extender una carrera deportiva que ha crecido silenciosamente, sin hacer mucho ruido, aunque no ha podido estampar su nombre en la final después de que le dejara en barrena un Rashitov que defendía el oro olímpico conseguido en Tokio.

Javier Pérez Polo, durante su combate en los JJOO de París.

Javier Pérez Polo, durante su combate en los JJOO de París. REUTERS.

El número uno del mundo comenzó llevando la iniciativa y llevándose el primer asalto en el que el español tuvo que esperar a una penalización para inaugurar su marcador. El uzbeko fue muy peligroso con la altura de su pierna derecha. El madrileño reseteó tras 3-7 y salió con energías renovadas para la segunda acometida. 

Presentó batalla, midió mejor las distancias e interpretó mejor los tiempos del combate. Logró igualar a falta de dos segundos para el final, pero la victoria fue para el uzbeko que lidió con una dolencia en su pie derecho. Sus aspavientos barruntaban una lesión segura, pero continuó peleando como si nada. 

A un paso de la medalla

"En Tokio entré un poco sobreexcitado. Me pudieron los nervios de querer hacer, hacer y hacer. En estos segundos Juegos quería tener más control del aquí y el ahora. Poco a poco, sin fijarme en el marcador", aseguraba el madrileño sobre un Grand Palais abarrotado.

"Quiero hacer mis rutinas y conseguir esa medalla que tanto ansío", añadía. La tiene a un puñado de golpes. El sueño de la medalla olímpica no se ha desvanecido, únicamente ha virado su dirección.