Los jugadores de España celebran un gol ante Francia en la final de los JJOO.

Los jugadores de España celebran un gol ante Francia en la final de los JJOO. Reuters

Juegos Olímpicos FRANCIA 3-5 ESPAÑA

La Selección reedita el oro de Barcelona 92 tras ganar a Francia en la prórroga y acaba con el gafe de los equipos

El equipo de Santi Denia consigue una victoria histórica (3-5) tras remontar a la anfitriona gracias a los goles de Fermín, Álex Baena y Camello.

9 agosto, 2024 20:45

España ha tenido que esperar 32 años para volver a colgarse una medalla de oro en fútbol, ese deporte que muchos quieren desterrar de los Juegos Olímpicos. Y 28 para volver a saborear las mieles del éxito en un deporte por equipos. Ahora, la hazaña del equipo de Santi Denia, que con Fermín y Baena a los mandos ha conseguido derrotar a Francia por 3.5, permanecerá de manera perenne en los libros de historia. 

Solo unos minutos después del batacazo de la Selección femenina, que se quedó sin fuerzas en la lucha por el bronce ante Alemania, y en un día negro para la delegación nacional, la España de la nueva generación puso el fútbol y la luz. Y lo hizo con talento, pero también con heroica, ya que consiguió remontar en una primera parte estelar el gol anotado por Millot tal y como lo hizo más de una hora después en la prórroga.

Aquel tanto, que llegó tras un fallo estrepitoso de Arnau Tenas, espoleó al equipo español, guardameta incluido, hacia una machada épica. Fermín se consagró como el líder de esta Selección y como el MVP del torneo y con sus dos goles dio aire y alas a un equipo que saltó al Parque de los Príncipes convencido de su cometido. Después el tanto de Baena amplió una ventaja que recortó el gol de Akliouche.

Pero el choque se guardó toda su emoción para los minutos finales, cargados también de polémica. Francia empató el partido en el minuto 92 tras un dudoso penalti cometido por Miranda y anotado por Mateta. España, cuando ya pensaba en la prórroga, pudo abrazarse de nuevo al oro, pero el disparo de Turrientes desde la frontal se estrelló contra el larguero, rompiendo así una vez más el sueño del equipo de Santi Denia en un partido que se marchó a la prórroga.

España sufrió en la primera parte del tiempo extra, pero lo terminó con una sonrisa gracias al gol de Camello. Bernabé encontró al atacante de la Selección que picó la pelota por encima de Guillaume para llevar el delirio a la delegación nacional en un minuto 100 que selló un oro para la historia y que no llegaba desde los Juegos Olímpicos de Barcelona 92. El sufrimiento se alargó hasta que de nuevo Camello puso la sentencia con el definitivo quinto tanto previa asistencia de un pillo Arnau Tenas.

Inicio loco de partido

No fue un inicio de partido sencillo para España. A pesar de que los jugadores del equipo de Santi Denia intentaban conservar la posesión del balón y moverla de un lado a otro para generar espacios, la intensidad del equipo galo marcó esos primeros compases. Los choques en las disputas de balón fueron constantes y ahí el combinado de Thierry Henry tenía las de ganar debido a su mayor poderío físico. 

Tras unos minutos de tanteo entre ambos equipos, Francia encontró el premio del gol casi sin buscarlo. Una jugada por banda derecha sin mucho futuro terminó con un despeje muy defectuoso de Álex Baena. La pelota le cayó en los pies a Enzo Millot que disparó de primeras con la izquierda. A pesar de que el esférico no parecía llevar mucho peligro, Arnau Tenas no acertó a blocar bien el balón y terminó introduciéndoselo en su propia portería. Un fallo garrafal que puso contra las cuerdas a la Selección cuando tan solo era el minuto 12 de encuentro.

Este tanto invitaba a pensar en una final complicada para los de Santi Denia. Pero lo cierto es que la Selección supo rehacerse muy rápido del golpe. Igual que el conjunto galo, España cimentó su primer gol en un ataque sin aparente peligro. Balón controlado por Álex Baena en banda derecha y el centrocampista del Villarreal inventa para encontrar sólo en el área a Fermín. El jugador del Barça recibe y, de primeras, la cruza imposible para Guillaume Restes. Un tanto que llegó en el minuto 16 y que sirvió para tapar el fallo de Arnau con el que se abrió el marcador. 

El gol de Fermín dio un empaque diferente al equipo de Santi Denia, que adoptó una seriedad y una madurez que no había mostrado hasta el momento en la final. Francia se fue hacia arriba y España lo aprovechó para encontrar espacios a la espalda. Ruptura por banda izquierda de Juan Miranda y el lateral del Betis centró al primer palo. Ahí apareció Abel Ruiz, pero su remate tímido lo repelió el meta francés. Sin embargo, el equipo anfitrión no esperaba la aparición, una vez más, de Fermín. 

Fermín López marca el segundo gol de España en la final de los JJOO contra Francia.

Fermín López marca el segundo gol de España en la final de los JJOO contra Francia. Reuters

El centrocampista del Barça, demostrando su gran llegada, solo tuvo que empujarla para consumar la remontada en el minuto 25. El partido entró en una fase loca en la que España salió victoriosa. Tras el tanto de Fermín llegó la puntilla en la primera parte. Álex Baena, con un gol increíble de tiro libre directo, puso tierra de por medio solo tres minutos más tarde. Un golpeo perfecto desde el perfil izquierdo que hizo que el balón superase la barrera y se colase en la meta de Guillaume Restes para llevar la locura al combinado nacional.

Tras el arreón en cuatro de minutos de una España arrolladora, el partido entró en una fase de receso. Sin embargo, esta calma duró poco ya que España pudo hacer el cuarto, tanto que hubiera cerrado el choque. Internada por la banda izquierda de Juan Miranda que, una vez se había plantado ya delante de Guillaume, se encontró con la parada del meta. 

Con la ocasión de Miranda, el choque entró en la recta final de un primer tiempo en el que se añadieron 7 minutos. Tiempo suficiente para que Francia diera un gran susto y para la redención de Arnau Tenas. El conjunto galo inició un ataque por banda izquierda con un centro peligroso al área. Mateta, completamente solo, remató de cabeza a bocajarro, pero se encontró con una brutal estirada del portero del PSG. Arnau atacó el balón, acortó distancias, achicó espacios y voló hacia la escuadra de su palo corto para dejar una foto perfecta que retrató la desesperación gala justo antes del paso por vestuarios. Un gol que hubiera cambiado el choque. Al descanso, Francia 1-3 España. 

Francia se agarra al oro con polémica

Si el partido arrancó de manera intensa en la primera parte, no fue igual en la segunda. Los primeros diez minutos tras la reanudación se desarrollaron sin sobresaltos. Hubo que esperar hasta el minuto 57 para que llegara la primera ocasión y el primer susto para España. Balón colgado al área y aparición de Koné en el segundo palo para rematar al larguero de la portería de Arnau Tenas. El juego anárquico del equipo de Henry permitió aparecer al pivote defensivo en zonas adelantadas para sorprender a la defensa de España. 

Pero España no tardó en responder. Acto seguido, los dos laterales de la Selección cocinaron una acción de autor. Subida por banda derecha de Marc Pubill y sin mirar, centro al segundo palo para buscar al carrilero del costado contrario. Automatismo perfectamente asimilado de los chicos de Santi Denia que estuvo a punto de traer el cuarto, ya que la volea de Juan Miranda de primeras con la zurda se marchó desviada por poco. 

A pesar de un inicio un tanto dubitativo de ambos equipos, la segunda parte estuvo marcada por las alternancias en el dominio. El ímpetu físico de Francia provocó que el partido se rompiera por completo y que las ocasiones cayeran en ambos bandos. Aunque las más claras fueron para Francia. Koné dispuso de una nueva oportunidad con un disparo desde la frontal que se encontró con una mano providencial de Tenas. 

Acto seguido, tras el córner, Millot disparó alto con la zurda desde la banda izquierda. España no tardó en responder con una buena oportunidad a la contra. Abel Ruiz, que comandaba el ataque, abrió a banda derecha esperando la devolución de Pablo Barrios, pero el centrocampista del Atlético de Madrid hizo la guerra por su cuenta y disparó al palo corto sin encontrar puerta. Aviso para entrar en el último cuarto de hora del partido. 

Abel Ruiz dispara alto en una contra de España.

Abel Ruiz dispara alto en una contra de España. Reuters

Cuando España se preparaba para llegar a un final de partido tranquilo, llegaron los nervios. Olise lanzó una falta desde la banda izquierda y el esférico, que golpeó entre Akliouche y Juan Miranda, terminó colándose en la portería de Arnau tras un bote endiablado. Era el 2-3.

Sin embargo, lo peor estaba por llegar. El partido llegó repleto de tensión hasta los últimos minutos y en una acción polémica todo saltó por los aires. Córner botado desde la banda izquierda del ataque francés, balón al segundo palo y desastre absoluto. Juan Miranda agarró a su marca y el árbitro, tras consultar el VAR, no lo dudó y decretó penalti. Mateta asumió la responsabilidad y no falló, anotando su quinto gol en el torneo. Y todo, en un minuto 92 de infausto recuerdo.

Aunque parecía que no había tiempo para más, la mala suerte hizo acto de presencia una vez más en contra de España. Y es que Turrientes tuvo el cuarto en sus botas con un disparo de la frontal que se topó con la parada salvadora de Guillaume y después con el larguero. Francia también tuvo la suya, ya en el minuto 98, con una llegada por banda izquierda que se encontró con una nueva mano providencial de Arnau Tenas. Y con esa intervención estelar, la contienda se marchó a la prórroga. 

España, a la heroica

La media hora extra llevó a España a una situación límite. Sin embargo, llegado a este punto, el equipo de Santi Denia no iba a tirar la toalla. Querían pelear por un oro que habían tenido en la mano durante más de una hora de partido a pesar de que el poderío físico del conjunto galo marcó la diferencia en los primeros minutos. Mateta fue un dolor para la defensa nacional en una primera parte que acabó, de nuevo, con emoción. 

Cuando peor lo estaba pasando España, se hizo la luz. Bernabé controló una pelota entre líneas, encaró y buscó el desmarque de Camello que esperaba en el corazón del área. El atacante de la Selección, con toda la frialdad del mundo, picó la pelota por encima de la salida de Guillaume para hacer el cuarto. El gol soñado. Y España volvió a creer. 

Sergio Camello marca gol ante Francia en la final de los JJOO.

Sergio Camello marca gol ante Francia en la final de los JJOO. Reuters

La segunda parte de la prórroga fue una batalla sin cuartel y sin oxígeno. Tras el tanto de Camello, los chicos de Santi Denia intentaron aguantar las acometidas del conjunto de Thierry Henry, que quemó todas sus naves sin éxito. Costó, y España tuvo que llamar a la heroica, pero el tercer oro ya era una realidad.

Y por si acaso había alguna duda, Camello a la contra terminó haciendo el quinto, el segundo en su espectacular prórroga, tras un saque de meta de un Arnau que pasó de villano a héroe. Una victoria sufrida. Un oro sufrido. Pero un oro que por fin es real y que agranda el medallero nacional en París. Barcelona 92 ya nunca más será la referencia para los niños que sueñan con ser futbolistas en nuestro país.

Francia 3-5 España

Francia: Guillaume Restes; Kilian Sildillia (Rayan Cherki, 110'), Loïc Badé, Castello Lukeba, Adrien Truffert (Bradley Locko, 91'); Enzo Millot (Desire Doue, 78'), Manu Koné (Soungoutou Magassa, 106'), Joris Chotard (Maghnes Akliouche, 52'); Michael Olise, Jean-Philippe Mateta y Alexandre Lacazette (Arnaud Kalimuendo, 52').

España: Arnau Tenas; Marc Pubill (Juanlu Sánchez, 73'), Eric García, Pau Cubarsí, Juan Miranda (Miguel Gutiérrez, 97'); Pablo Barrios, Fermín López (Adrián Bernabé, 73'), Álex Baena (Beñat Turrientes, 81'); Sergio Gómez, Aimar Oroz (Jon Pacheco, 88') y Abel Ruiz (Sergio Camello, 81').

Goles: 1-0: Enzo Millot, 12'. 1-1: Fermín López, 18'. 1-2: Fermín López, 25'. 1-3: Álex Baena, 28'. 2-3: Maghnes Akliouche, 79'. 3-3: Jean-Philippe Mateta, de penalti, 93'. 3-4: Sergio Camello, 100'. 3-5: Sergio Camello, 121'.

Árbitro: Ramón Abatti (Brasil). Amonestó a Manu Koné (36'), Loïc Badé (51'+), de Francia; y a Adrián Bernabé (77'), Álex Baena (79'), Juan Miranda (92'+) y Jon Pacheco (93'), de España.

Incidencias: final del torneo de fútbol de los Juegos Olímpicos de París disputada en el estadio del Parque de los Príncipes ante unos 48.000 espectadores.