No pudo ser. Tras dos carreras muy buenas y tras una clasificación excelente este sábado, Carlos Sainz dio un paso atrás en su adaptación a Ferrari, a su nuevo equipo y a su nuevo coche. Al menos así lo dicen su resultado y sus sensaciones, que no fueron las mejores después de muchos días de alegrías.
En Portimao, Carlos Sainz ha vivido la otra cara del mundo del motor, la amarga, la que le hizo brillar el sábado y caer el domingo, algo que todos los pilotos detestan. Cuando se equivocan o cuando las cosas no salen como tienen pensado en clasificación, saben que tienen la bola de la carrera para salvar el partido, la que finalmente termina valiendo.
Esta vez no le salió esa mítica jugada a Carlos Sainz que vivió en Portugal un auténtico calvario en un circuito en el que Ferrari quería imponerse a McLaren. Al final no pudieron hacerlo ya que Norris consiguió terminar en quinta posición por delante de Leclerc y también del propio Carlos, que fue undécimo y se quedó fuera de los puntos. "No ha sido un buen día", decía Carlos tras la carrera en un ataque de sinceridad.
El piloto español tuvo problemas con sus neumáticos ya desde la salida. El hecho de tener que salir con los blandos condicionaba su carrera. En la puesta de partida no sufrió problemas e incluso adelantó a 'Checo' Pérez, pero tras el Safety Car por el accidente de Raikkonen sufrió de lo lindo en la relanzada y ahí comenzó su caída.
Después, de una mala estrategia de Ferrari en la entraron demasiado pronto a cambiar neumáticos para intentar adelantar a Lando Norris, Carlos se vio obligado a apretar demasiado en sus primeras vueltas en pista, lo que provocó una degradación excesiva en los neumáticos que se tradujo en una caída de su ritmo en las últimas vueltas de la prueba.
El análisis de Carlos
Así lo explicaba Carlos en los micrófonos de DAZN: "Sabíamos que la posibilidad de graining era alta y la verdad es que cuando he puesto el neumático medio he visto que no iba a durar mucho y que nos íbamos a ir para atrás. Ha sido poner el neumático medio para intentar hacer un undercut a Lando Norris, que para mí ha sido muy pronto porque todavía quedaba mucha carrera por delante".
"Me la he jugado a hacer ese undercut, he tirado mucho en esas primeras vueltas y a partir de ahí hemos abierto el graining y nos hemos ido para atrás. La verdad es que no ha sido un buen día. Todo ha salido bastante mal, así que hay que aprender de ello. Forma parte de la curva de aprendizaje".
Si Carlos hubiera podido adelantar a Lando Norris en esas primeras vueltas su carrera hubiera sido otra seguramente, porque hubiera reducido su desgaste y podría haber rodado por delante más vueltas para abrir diferencias con el grupo de detrás. Sin embargo no pudo, y todo el plan se vino abajo.
"Si hubiese salido el ‘undercut’ igual no estaríamos aquí ahora. Pero es verdad que quedaba mucha carrera por delante y que he tenido que empujar mucho para intentar hacer ese undercut a Lando, casi lo conseguimos. Pero esas vueltas al principio del stint empujando fuerte son las que han abierto el graining, así que, a aprender de ello y ver qué podemos hacer para que no vuelva a pasar".
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