McLaren no levanta cabeza. En el Gran Premio de Hungría, la escudería británica volverá a ver como sus dos pilotos saldrán desde posiciones muy retrasadas. El asturiano Fernando Alonso lo hará desde el undécimo puesto, mientras que el belga Stoffel Vandoorne desde el decimosexto.

El futuro de la escudería

McLaren sabe que la próxima temporada debe hacer cambios, y así mismo lo confirmó su jefe, Zak Brown, en declaraciones al diario AS: "Creo que la realidad es que tenemos dos asientos libres aquí mientras hablamos y es nuestro trabajo obtener la mejor situación posible para el equipo y eso requiere hablar con otros pilotos arriba y abajo del carril de boxes".

Hay un favorito por encima de todos: Carlos Sainz. El joven madrileño está siendo una de las revelaciones del año, y en Hungagoring saldrá quinto. Del piloto de Renault, Brown solo tiene buenas palabras: "Ya he dicho que considero a Carlos un gran piloto de carreras".

Stoffel Vandoorne

Sobre Vandoorne, de quien apenas hay esperanzas pese a la confianza de Alonso, Zak Brown afirma que les gustaría "verle batir a su compañero. No diría que estamos decepcionados porque sabemos que estamos en una situación muy difícil y este año no tenemos un coche bueno. Pero claro dado el talento y la experiencia de Fernando, puede adaptarse a situaciones que no son optimas".

Es por ello que el estadounidense le ofrece toda la ayuda posible: "Técnicamente le estamos dando apoyo, el equipo cambió el chasis a petición suya… Pero claro todos los pilotos en los que Fernando ha competido alguna vez han sido batidos por Alonso. Entonces, no hay nada de qué avergonzarse a todos les ha pasado".

Gran Premio de Hungría

En la carrera que tendrá lugar este domingo 29 de julio a las 15:10, Sainz parte con gran atención del público. El hijo del mítico piloto de rally dio una auténtica exhibición bajo la lluvia en la fase de clasificación, logrando el citado quinto puesto. Por otro lado, el futuro de Alonso está más en duda que nunca.

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