Con 36 años y 20 temporadas mundialistas a sus espaldas, ha realizado una temporada excepcional en la que ha sumado cuatro victorias y ha dominado la general desde la primera cita del curso. Una campaña en la que rozaba con las yemas de los dedos su décima corona, pero que dilapidó de una patada en Sepang, donde gozaba de su primer match ball para proclamarse campeón del mundo de MotoGP.
Durante la conferencia de prensa de Malasia y con una actitud absolutamente premeditada, acusó a Marc Márquez de beneficiar intencionadamente a Jorge Lorenzo ralentizando la carrera de Phillip Island, donde terminó cuarto después de que su compatriota Andrea Iannone le sacara del podio en la última vuelta. Después llegaría el incidente con Márquez en la prueba malasia y la sanción por tirarle, que le obligó a partir desde la última posición en Cheste cuando no consiguió el beneplácito del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
Después de remontar 22 posiciones en las primeras 13 vueltas y finalizar la carrera en la cuarta posición, Valentino Rossi fue recibido en el pit lane entre los aplausos de los miembros de diferentes equipos. A las puertas del box de Yamaha esperaba Carmelo Ezpeleta, CEO de Dorna, para felicitarle, pero cuando el piloto italiano le vio no se mordió la lengua: “¡Qué asco! ¿Qué te había dicho, Carmelo? ¿Te lo dije o no te lo dije el jueves?”, le soltó a bocajarro al máximo responsable del campeonato del mundo de MotoGP delante de las cámaras de la televisión transalpina mientras Ezpeleta trataba de calmarle.
En las dos últimas semanas, Il Dottore ha pasado de la patada de Sepang a la pataleta de Cheste, donde tras perder el título frente a Lorenzo disparó con bala contra todos y todo lo que pasaba por su mente: contra Márquez, contra su compañero de equipo, contra Honda y hasta contra el propio campeonato del mundo de MotoGP. Una actitud que recordó a la de Casey Stoner en su última temporada en la clase reina, aunque Rossi ha reiterado por activa y por pasiva que la próxima temporada cumplirá su contrato con Yamaha.
"Ha sido una vendetta personal"
“Es increíble que las Honda no superaran a Lorenzo. Honda ha dado vía libre para que ganara una Yamaha”, soltó acompañado de una carcajada sarcástica. “Márquez ha decidido que yo no debía ganar el campeonato y se ha convertido en el guardaespaldas de Lorenzo. No sé cómo calificar su comportamiento porque siempre ataca en la carrera y, sobre todo, en las últimas vueltas. Tiene un gran talento y es el futuro de MotoGP, pero dice que va a dar el máximo y luego en la carrera se comporta como uno que se pasa por el forro a todo el mundo. Estoy contento porque, al menos, la gente ha visto cuál era el plan de Márquez. Ha sido un amaño de bajo nivel y una vendetta personal de Márquez. Supongo que en los próximos meses entenderá lo que ha hecho. Ha sido un feo final del campeonato y una desilusión en pista”, argumentó el piloto italiano para explicar su teoría de la conspiración española.
Después fue a Lorenzo a quien le tocó recibir los "elogios" de su compañero de equipo. “Después de Sepang, Jorge perdió una gran oportunidad de estar callado y dejar de decir mentiras. Estoy enfadado con él. En la pista se ha ganado el título, pero fuera de ella podía haber sido más inteligente y dejar de decir cosas estúpidas”, lanzó Rossi contra el que, teóricamente, será su compañero de equipo la próxima temporada. Mucho trabajo tiene por delante Lin Jarvis para calmar las aguas…