La entrada en escena del nombre de Dani Pedrosa como posible recambio de Jorge Lorenzo en las filas de Yamaha la próxima temporada ha conseguido perturbar la aparente calma que Maverick Viñales se está tomando para decidir su futuro. Sobre la mesa tiene la oferta de la fábrica de los tres diapasones, que le convertiría en el compañero de su ídolo de la infancia en 2017, y la opción de continuar en Suzuki, fábrica con la que llegó la pasada temporada a MotoGP.
El piloto de Roses (Girona) no terminaba de decidirse pese a la premura de Yamaha, que al final ha consentido ampliar un par de semanas el plazo marcado –hasta Mugello- para recibir una respuesta suya. “No hay ninguna novedad. De momento, todo sigue igual”, asegura cada vez que se le interroga sobre su futuro. Y mientras espera una nueva oferta económica más sustanciosa por parte del británico Lin Jarvis, máximo responsable de Yamaha Motor Racing. Éste se ampara en su escaso currículum en la categoría reina porque su mejor resultado hasta la fecha ha sido la cuarta posición lograda en Austin en la presente campaña.
Para presionar a Maverick, en las últimas fechas se ha filtrado desde la prensa británica el nombre de Pedrosa como compañero de Valentino Rossi la próxima temporada. Una opción que el piloto italiano confirmó en la conferencia de prensa de Le Mans, aunque también habló del piloto de Suzuki porque Movistar, patrocinador principal de Yamaha, quiere a toda costa un español en el equipo.
Maverick Viñales, que concluyó en la séptima posición en la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Francia, reconoce que quiere solucionar su futuro cuanto antes porque todo este embrollo le está perturbando. “Me lo quiero quitar de encima pronto, porque quiero concentrarme en pilotar y en dar lo mejor de mí mismo. No me desconcentra, pero está claro que es un pensamiento que está ahí y que te quita tiempo para pensar en ir en moto”, razonó el piloto de Suzuki para después pasar a lanzar un recado a Pedrosa: “Dani lleva toda la vida en Honda y le convendría acabar su carrera allí”.
Una advertencia de la que se arrepintió cuando ya era demasiado tarde, por eso después quiso matizar sus declaraciones a través de Twitter: “Excusarme por las declaraciones de hoy hacia el futuro de Dani. Mi intención era decir que para Dani sería bonito acabar su carrera deportiva en el mismo equipo donde la empezó”, escribió a través de las redes sociales.