Kiko Martínez, a un combate de su segunda corona mundial
El boxeador alicantino disputará en California el campeonato mundial del peso pluma al imbatido Leo “Terremoto” Santa Cruz.
27 febrero, 2016 03:00Noticias relacionadas
Kiko Martínez tiene este sábado una nueva oportunidad de hacer historia en el boxeo español. El boxeador alicantino disputará en Anaheim, California, el campeonato mundial del peso pluma WBA en poder del imbatido mexicano Leo “Terremoto” Santa Cruz, combate que se podrá ver a través de Marca.com. En caso de conseguir el triunfo, Kiko Martínez se uniría a Javier Castillejo como los dos únicos púgiles españoles coronados campeones mundiales en dos categorías distintas.
Martínez ya fue campeón mundial en 2013, en el peso supergallo, cuando derrotó en seis vibrantes asaltos al colombiano Jhonatan Romero en Atlantic City. Fue el primer boxeador español que conseguía un título mundial en los Estados Unidos. En esta ocasión, el reto parece todavía mucho más complicado dada la gran categoría de su rival y el hecho de que Kiko afronta esta aventura en un peso superior. Las apuestas son claramente favorables al espigado campeón mexicano, considerado como uno de los boxeadores con mayor potencial y atractivo en la actualidad, y que tiene títulos mundiales en tres divisiones: gallo, supergallo y pluma. A sus 27 años, se encuentra en su mejor momento deportivo y viene de obtener la victoria más importante de su carrera al derrotar por puntos al tricampeón mundial Abner Mares, para conseguir el cinturón mundial que esta noche pondrá en juego ante el español.
Triunfos a domicilio
Kiko Martínez, con un récord profesional de 35-6 (26), ya ha sido campeón de Europa y campeón mundial en el supergallo, y ha conseguido muchos de sus más importantes triunfos boxeando fuera de casa. Este es su segundo combate en Estados Unidos y parece encontrarse especialmente a gusto cuando los pronósticos juegan en su contra. En esta ocasión tendrá que sobreponerse, además, al importante contratiempo de no poder contar en su rincón con su entrenador argentino Gaby Sarmiento, que no pudo finalmente viajar a California por problemas con su visado. El púgil de Torrellano estará dirigido en la esquina por otro entrenador de talla mundial, el excampeón mundial Robert García.
El campeón Santa Cruz se inició en el boxeo con tan solo ocho años y ya destacó en el campo amateur. Su hermano José Armando fue campeón mundial interino en el peso ligero. Otro hermano, Roberto, también fue profesional, pero vio su carrera truncada por el lupus, una enfermedad que afecta al sistema inmunológico contra la que sigue luchando, una circunstancia que siempre ha servido de motivación para Leo en sus combates. Su entrenador es su padre, José, un mexicano que emigró a Californa y que durante muchos años se ganó la vida como pintor hasta que decidió centrarse en la carrera profesional de sus hijos. Le ayuda en esa tarea Antonio, otro de los hermanos del púgil. Todo queda en casa.
Sin derrotas
Hasta el momento, la andadura en el boxeo rentado de Leo has sido inmaculada. Ha acumulado 31 victorias y no conoce la derrota. La única mácula, un nulo en su segundo combate profesional. Es campeón mundial en tres pesos y en su palmarés figuran victorias ante seis campeones mundiales: Jose Lopez, Eric Morel, Alexander Muñoz, Victor Terrazas, Cristian Mijares y Abner Mares. El de esta noche será su undécimo combate con un título del mundo en juego.
Santa Cruz, criado en Los Ángeles, es un boxeador espigado que destaca por su versatilidad y su capacidad de ser efectivo en las tres distancias. Posee un poderoso golpeo al cuerpo de sus rivales. Por el contrario, no es especialmente rápido y en ocasiones puede ser demasiado frontal y predecible. Pero destaca especialmente por su tremenda frecuencia de golpeo. Es un boxeador capaz de mantener un ritmo altísimo durante doce asaltos. En su último combate ante Abner Mares sacó la sobresaliente cantidad de 1057 golpes (según Compubox). El campeón, además, las toma y sabe sufrir.
La estrategia del español para este combate está clara y no la ha disimulado en ningún momento. Como ya hizo ante Jonathan Romero, ha anunciado que saldrá a realizar un boxeo de ataque. El español es eminentemente un boxeador de presión, muy poderoso en la media y en la corta distancia y con una considerable pegada. Tradicionalmente se le han dado bien los boxeadores altos y Santa Cruz le aventaja en seis centímetros, aunque el campeón es mucho más solvente en el cuerpo a cuerpo que otros rivales del alicantino, como Romero o el surafricano Mathebula. En este sentido, será el campeón el que, por su versatilidad, podría iniciar el combate boxeando por fuera e intentando aprovechar su mayor envergadura.
A sus 29 años, “La Sensación” Martínez vuelve a nadar contracorriente. Tras sus dos últimas derrotas ante los británicos Carl Frampton y Scott Quigg, que por cierto mañana se enfrentaran en Manchester, Kiko es consciente de que las grandes oportunidades pueden dejar de llegar si sale derrotado ante Santa Cruz. Para él es este un auténtico combate de encrucijada, el más complicado y comprometido de su carrera, prácticamente un todo o nada. Y enfrente va a tener a uno de los campeones más en forma del boxeo actual.
En Estados Unidos nadie da un duro por él e incluso alguna publicación ha calificado este duelo de 'mismatch' o combate desigual. No creemos que esto le importe al retador español, que si se ha caracterizado siempre por algo es por su entrega y su capacidad para superar situaciones adversas. Por su actitud y su trayectoria, Kiko Martínez se merece que alberguemos la esperanza de que sea capaz de dar la gran sorpresa, ser el primer boxeador que derrota a Santa Cruz y que se proclame campeón mundial en una segunda categoría. Difícil, muchísimo. Imposible, no.
En la misma velada, el boxeador canario Ceferino Rodríguez “Ferino V” hace su debú en Estados Unidos. Se enfrentará al veterano mexicano Edgar Riovalle.