La parálisis gubernamental en España también afecta al deporte. La Agencia Mundial Antidopaje declaró este fin de semana a España no conforme con el código mundial antidopaje, lo que supone que las federaciones españolas no podrán llevar a cabo sus propios controles.
Esto no imposibilita a los españoles a participar en los próximos eventos deportivos, como los Juegos Olímpicos de Río, pero los deportistas olímpicos y paralímpicos que logren su billete para Río no podrán pasar los controles antidopaje en las federaciones españolas, sino que tendrán que hacerlo en las internacionales.
En la reunión que se celebró en Colorado, se acordó suspender a España debido a que no cumplió los plazos para aplicar el código mundial antidopaje había incorporado y que entró en vigor el 1 de enero de 2015.
El motivo del problema en España es la ausencia de poder, que no tiene un gobierno que apruebe una ley para su aplicación. En su comunicado, la AMA reconoce que en el caso de España afecta la incertidumbre política. "Aunque la agencia nacional española sea declarada no conforme, comprendemos las dificultades a las que se enfrenta el país para resolver este enorme problema", reza el comunicado. Al tener España un gobierno en funciones, éste no puede elaborar leyes y por tanto, no aplicar esas actualizaciones del código antidopaje.
Los problemas vienen desde noviembre del pasado año, cuando la AMA señaló a seis países (Bélgica, Francia, Grecia, Brasil, México y España), ya que no habían cumplido con la normativa. Incluidos en una "lista de vigilancia", a todos se les dio hasta el 18 de marzo para aplicar las novedades compatibles con el Código Mundial Antidopaje. Cuatro de ellos resolvieron los problemas, pero México y España no.
La agencia española antidopaje ha emitido un comunicado en el que agradeció la comprensión de la AMA, garantizado a su vez que se cumplirán los controles de dopaje de los deportistas españoles.