Sancionados por pegarse con el entrenador rival y abrazar al árbitro de su partido

Lo más probable es que Juan Manuel López y Earl Thomas no se conozcan entre sí. Sin embargo, ahora tienen algo en común: un momento 'random' que les perseguirá el resto de sus vidas. El boxeador puertorriqueño y el jugador de fútbol americano estadounidense dejaron dos imágenes más que anecdóticas en la jornada deportiva del domingo. El primero pegó al entrenador del rival contra el que peleó, mientras que el segundo celebró un 'touchdown' contra los New Orleans Saints abrazando al árbitro. López aún no ha sido sancionado por su acción (pero lo más probable es que lo sea); Thomas sí.

El deportista sudamericano tuvo sensaciones agridulces en su primera victoria en el ring desde hace dos años. Excampeón mundial en peso pluma, derrotó por KO técnico a otro antiguo rey de la categoría, su compatriota Wilfredo 'Papito' Vázquez Jr., en el undécimo asalto de su combate de este sábado. Las rencillas pasadas entre ambos boxeadores prometían un ambiente caldeado. Y así fue.

Cuando el árbitro de la pelea decidió detenerla y dar como ganador a López, un sector del público asistente a la velada (algo más de 8.000 espectadores in situ) empezó a lanzar objetos y vasos al cuadrilátero. López tuvo que apaciguar a las masas micrófono en mano, aunque poco antes él no había tenido el control que se encargó de exigir al respetable.

Nada más ser proclamado vencedor, se acercó al entrenador de su rival, Alberto Rivera, y empezó a propinarle golpes. El preparador no se achantó para nada, pagándole con la misma moneda. El hermano del mismo y el padre de su pupilo, Wilfredo Vázquez Sr., tuvieron que contenerle para que la disputa no fuese a mayores.

Aunque los ánimos acabaron calmándose, el presidente de la Comisión de Boxeo de Puerto Rico y su comisionado, Miguel Ortega, anunciaron que podría haber sanciones debido al incidente. "La Comisión analizará lo sucedido. Fue una situación que se salió de control y haremos las determinaciones que se tengan que hacer", declaró el segundo.

Una celebración que le salió cara

Horas después y a miles de kilómetros de distancia de San Juan de Puerto Rico, en Nueva Orleans, Earl Thomas, 'free safety' en la línea defensiva de los Seattle Seahawks, también fue merecedor de una sanción arbitral. Aunque la suya llegó por un motivo mucho más alegre para su equipo: la consecución de un 'touchdown' en el primer cuarto del encuentro de los suyos en la NFL ante los New Orleans Saints. Lo consiguió tras robarle un balón a Mark Ingram y culminar con éxito una carrera de 34 yardas.

Tanta felicidad le produjo el tanto al jugador de Orange (Texas) que regaló el balón a un aficionado y, en una reacción inaudita, corrió a abrazar al árbitro que dirigía el partido. La respuesta del colegiado ante tal gesto de cariño fue una tarjeta amarilla por conducta antideportiva.

A sus 27 años, esta es una "mancha" más que bendita en un palmarés que incluye una Superbowl (2014), cinco presencias en el Pro Bowl (el partido de las estrellas de la NFL) y cuatro apariciones en el primer equipo de la liga. Jugador de los Seahawks desde que llegó al football profesional en 2010 (número 14 del Draft), Thomas se lo pensará dos veces antes de volver a ser tan efusivo en una celebración.