Mireia Belmonte apunta a medalla en la final del 1.500 del Mundial de Budapest
Consiguió el segundo mejor tiempo en las series de este lunes (16:05.27), sólo 18 segundos más lenta que la intratable Katie Ledecky.
24 julio, 2017 12:40Noticias relacionadas
Mireia Belmonte, la nadadora española con más opciones en este Mundial de Budapest, ha firmado el segundo mejor tiempo en las series de 1.500, por detrás de Katie Ledecky, mientras que Jimena Pérez se ha quedado a 48 centésimas de la final. La badalonesa se quitó un peso de encima después de su mal estreno, ya que quedó fuera a las primeras de cambio en las series de los 200 estilos y los 400 libre.
Este lunes ha nadado mucho más suelta, en una serie que compartió con Ledecky y con su compañera de entrenamiento, la madrileña Jimena Pérez. Belmonte ha firmado un crono de 16:05.27, casi 18 segundos más lenta que Ledecky, y apunta a medalla en una prueba en la que sus principales rivales para el podio -sin contar a Ledecky- son la china Hou Yawen y la italiana Simona Quadarella.
"He estado mejor que ayer (por el domingo), bien, contenta y ahora a pensar en la final de mañana (por el martes) y ya está", ha dicho la española, quien ha asegurado estar contenta también con la marca, que fue la mejor que ha logrado este año. "Estoy contenta con el día de hoy", ha enfatizado Belmonte. La badalonesa ha recordado que en un Mundial "siempre hay que ir rápido por las mañanas porque te juegas la final".
Belmonte ha comentado que como sabía que Ledecky nadaría sola, tenía que buscar otra referencia. "En este sentido la chilena (Kristel Kobrich) me ha ido muy bien, para tener un pique en la primera parte de la prueba, porque si se hubiera distanciado mucho más me habría costado más la primera parte", añadía.
Otra historia ha sido la carrera de Jimena Pérez, que se ha quedado a 48 centésimas de la clasificación, ya que ha nadado en 16:21.45 y ha sido novena del total. La octava, y última finalista, ha sido la húngara Ajna Kesely con 16:20.98. La madrileña se ha lamentado y ha recordado que si hubiera nadado en el registro que traía a Budapest (16:19.15) se hubiera clasificado para la final del martes.
"Ahora mismo estoy un poco fastidiada, porque si hubiese hecho mi tiempo, estaría en la final. Me he quedado fuera por nada, así que no tengo mucho más que añadir. Ha habido algún momento duro en el que pensaba que me estaba costando muchísimo. Ahora a pensar en el 800", ha indicado.