Bruno Hortelano regresó este domingo a su distancia predilecta, los 200 metros, con un segundo puesto en la reunión de Hengelo (Holanda) y un tiempo de 20.35 segundos que le sitúa tercero en el ránking europeo del año.
En su primer 200 desde el accidente de tráfico que sufrió en Madrid en septiembre de 2016, el plusmarquista español sólo ha cedido, y por una sola centésima, ante el sudafricano Luxolo Adams, que se impuso con 20.34 en una carrera con viento contrario de 0.9 metros por segundo.
Hortelano, campeón de Europa de 200 metros, se enfrentaba a Churandy Martina, de quien heredó el título continental el 8 de julio de 2016 en Amsterdam por descalificación del holandés, pero mientras el español respondió con creces a las expectativas, su rival nunca estuvo en la brega por la victoria.
Por la calle seis, con la mano derecha (la "catastrófica" que le dejó el accidente) protegida por un guante negro, Hortelano hizo una carrera perfecta, recortando diferencias con Adams en la recta hasta poner en serio peligro la victoria del sudafricano, mientras Martina, que corría justo a la derecha de Bruno, llegaba sexto con 20.85.
Era la tercera carrera de Hortelano desde su reaparición y la primera de 200 metros desde el 17 de agosto de 2016, cuando corrió la tercera semifinal olímpica en Río. Martina fue segundo aquél día con 20.10 y pasó a la final, mientras el español -cuarto con 20.16, crono que valió un bronce en la final- quedaba eliminado igual que el estadounidense Justin Gatlin, que le precedió con 20.13.
Aquella fue la última vez que Bruno y Churandy compitieron sobre la pista, pero el destino quiso que también fuera la última carrera del español en veintiún meses. Tres semanas después, el 5 de septiembre, Hortelano estuvo a punto de perder la vida en un accidente de tráfico. De sus graves heridas en la mano derecha ha tardado veinte meses en recuperarse.
Pero ha vuelto tan fuerte como reiteradamente había anunciado. Lo hizo el pasado 19 de mayo en Tenerife en un 400 sin compromiso, frente a corredores modestos, pero mejoró su marca personal con 45.96. Una semana después, en Oordegem (Bélgica), volvió a rebajar su récord (45.67).
El otro español que competía en Helgelo, el subcampeón olímpico de 110 m vallas Orlando Ortega, obtuvo el mismo puesto que Bruno: segundo, con un registro de 13.38. Sólo cedió ante el campeón mundial ruso Sergey Shubenkov, que se impuso con 13.23.
La soriana Marta Pérez se situó cuarta en el ránking español de todos los tiempos de la milla (1.609 metros) con una marca de 4:28.25 -la mejor de España en los diez últimos años- que le dio el octavo puesto en la carrera, que ganó la estadounidense Jenny Simpson con 4:25.71.
Pérez, siempre en el centro del grupo y pegada a la cuerda, aguantó el ritmo hasta el final. La liebre fue muy por delante del resto y sólo Simpson y la etíope Besu se jugaron el triunfo en el esprint.
Organizados desde este año por el poderoso mánager Jos Hermens, los Fanny Blankers-Koen Games de Hengelo, la reunión atlética más importante de Holanda, ofreció un formato innovador, más concentrado, con menos pruebas (11, sin fondo ni lanzamientos), con atención personalizada a los atletas, música en directo, liebres luminosas y más espectáculo para los aficionados, todo ello en menos de dos horas de competición