Sergi Mingote viaja a Nepal para situarse a dos ochomiles de su gran reto
- El alpinista catalán buscará hacer cumbre en el Manaslu y el Dhaulagiri para continuar con su reto de ascender seis ochomiles durante un año.
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Después de que en el mes julio completara el Broad Peak y el K2, el alpinista catalán Sergi Mingote viajó este jueves a Nepal con el objetivo de hacer cumbre al Manaslu (8.163) y al Dhaulagiri (8.167) para continuar con su reto de ascender seis ochomiles en un año sin oxígeno artificial y lograr así el Record Guinness.
El atleta de Parets del Vallès (Barcelona) afronta la segunda de las tres etapas del 3x2x8000 Solidary Project un buen estado de forma después de prepararse a consciencia en el CAR de Sant Cugat, donde ha seguido un plan nutricional y de entrenamiento que, al mismo tiempo, pretende analizar científicamente cómo afecta la falta de oxígeno en altura al cuerpo humano.
"Desde que he llegado no he dejado de entrenar. El alto rendimiento en la montaña, hace que las expediciones se planteen de manera distinta. Ahora llego a unas condiciones óptimas, he recuperado algo de peso pero tampoco mucho", explica Mingote en una entrevista a EFE.
No obstante, reconoce que muscularmente ha notado el cansancio de la primera expedición al K2 y al Broad Peak, algo que ha podido mejorar con la planificación física diseñada en el Centro de Alto Rendimiento.
"La idea era mirar temas relacionados con las saturaciones de oxígeno, frecuencia cardíaca y nutrición. El retorno ha sido muy positivo y ha ayudado mucho para que ahora me puedan hacer un diagnóstico y una preparación mucho más exacta para los próximos dos ochomiles", celebra.
La evolución del alpinismo
En este sentido, Mingote, que en 2001 y 2003 hizo cumbre al Everest, destaca la evolución que ha vivido el alpinismo, especialmente en el ámbito de la nutrición y la dietética, algo que le permitirá consumir alimentos liofilizados que le permitirán adquirir los nutrientes necesarios para afrontar su reto con garantías.
La idea de Mingote es llegar al campo base del Manaslu a mediados de septiembre para intentar hacer cumbre durante la primera semana de octubre. De conseguir este primero objetivo, se desplazará en helicóptero hasta el campo base del Dhaulagiri para atacar el que sería su cuarto ochomil de su proyecto.
"Las dos montañas me inspiran mucho respeto porque tienen su complejidad. Hay años que en el Manaslu hay mucha nieve y se pone muy peligroso con las aludes. Creo que será una de las cuestiones que tocará salvar de esa montaña", alerta.
Para Mingote, el punto más complejo del Dhaulagiri se encuentra en el tramo final. Prueba de ello es que en 2018 nadie ha sido capaz de ascender esta cima.
Lo hará sin la ayuda de sherpas
A diferencia de la última expedición, Mingote intentará culminar ambas cumbres en solitario: "No me acompañará ningún sherpa, porque de esta manera encuentro el equilibrio. Con la experiencia del K2 y viendo mi condición física actual, merece la pena hacerlo solo. Este hecho también me permite intentarlo de una manera más ligera. A ver si la estrategia me funciona".
Un reto más para Mingote en su sueño de ascender seis ochomiles en un año. Si sus planes se cumplen, la próxima primavera espera culminar la hazaña con el Kanchenjunga (8.586 metros), la tercera cima más alta del mundo, y el Everest (8.848), el techo del mundo.
"Será un final de proyecto muy potente. La idea es viajar a principios de abril con la intención subir al Kanchenjunga, donde podré compartir permiso con una expedición india. A mediados de mayo intentaría hacer cumbre y, después, volaría al Everest lo antes posible porque me quedarán pocos días", reconoce.
Antes, sin embargo, le esperan el Manaslu y el Dhaulagiri, otros dos colosos que pondrán a prueba su innovadora preparación.