Uno de los momentos más emocionantes del deporte mundial ocurrió en Montpellier, Francia. Allí se ha disputado el Campeonato Mundial de Patinaje Artístico, en una competición en la que los deportistas rusos estaban excluidos y había varios ucranianos. Entre ellos se encontraban Oleksandra Nazarova y Maksym Nikitin, la pareja que no ganó, pero sí emocionó a todo el mundo que estaba en el recinto. Solo necesitaron su pasión, una canción que evoca a Crimea y el recuerdo de lo vivido.

Ambos no han podido preparar la cita como hubiera sucedido sin la invasión de Rusia sobre Ucrania. Todavía tienen a sus familias en el país, ellos tuvieron que huir de Járkov a Polonia recorriendo en ocho días 600 kilómetros. Vestidos de amarillo y azul en honor a su país, completaron el programa corto y el largo y recibieron una ovación de tres minutos con el público en pie. Una imagen que ha pasado a la historia de los campeonatos por su trascendencia.

Estaban vestidos de chándal, con la ropa de entrenamiento, porque tampoco tuvieron otra opción. Los trajes de la competencia se quedaron en su tierra natal porque no había tiempo para llevárselos. Nazarova tuvo que esconderse algunas semanas de las bombas, mientras que Nikitin cogió lo primero que tenía encima para poder salir del país. Maksym le tuvo que coger sus patines para que pudiera competir. Todo el viaje acabó este fin de semana cuando las lágrimas rompieron su rostro al acabar su actuación.

Obtuvieron 67,70 puntos en el programa corto, terminando en el puesto 16 en el programa libre. Eso era lo de menos. Los atletas dedicaron su actuación a los ucranianos que luchan contra la invasión de Rusia. Habían mandado un mensaje al país agresor. "Queremos que todo el mundo tenga cuidado, porque los fascistas rusos también pueden llegar a otros países", avisan los protagonistas de la imagen del fin de semana. Lo hicieron con una música que tenía ese objetivo.

1944

En 2016 hubo una agria polémica por la victoria de Jamala, una cantante ucraniana, en Eurovisión. Lo hizo con la canción '1944'. Este tema lo escribió después de que Rusia se anexionase Crimea en 2014 y que relata la deportación de los tártaros de esta zona por parte de la Unión Soviética en la década de 1940. Nazarova y Nikitin comenzaban el ejercicio bajo la letra que puso a los rusos de uñas, los mismos que denunciaron la politización del concurso.

Pero la pareja introdujo matices nuevos y una remasterización con una canción folclórica nacional de Ucrania que interpretó Andriy Khlyvnyuk, el cantante principal de Boombox que está en el frente de guerra. La Federación Internacional no permitió el cambio que también incluía frases del presidente Volodymyr Zelensky. En cualquier caso, Nazarova colgó en su perfil de Instagram un vídeo de cuando la usaron en los entrenamientos.

Tenían otro programa largo. "En su forma original, consideramos inapropiado bailarlo mientras la gente se muere y se esconde en los sótanos de nuestro país", explicó Nazarova en su cuenta de Instagram. Su retirada de la competición tiene sentido teniendo en cuenta estas restricciones que tuvieron que aguantar, aunque también aludieron a que no habían tenido tiempo de sobra para preparar la otra coreografía que sí aceptaban en el campeonato.

Rusia, por su cuenta

En otra parte del mundo, concretamente Rusia, estas imágenes nunca han llegado. Es más, toda la atención se centró en la Copa Channel One. Esta competición fue reprogramada por la Federación Rusa de Patinaje para que coincidiera en fechas con el Mundial de Montpellier. Allí se enfrentaron las mejores patinadoras rusas y bielorrusas, las que se ven afectadas por el veto internacional, para demostrar sus habilidades.

Había dos puntos de atracción en esta competencia. La primera era Kamila Valieva. La joven prodigio del patinaje que vio su figura ensuciada por la mancha del dopaje en los últimos Juegos Olímpicos de Invierno regresaba a la actividad aquí. Aunque se mostró "muy contenta de regresar a la pista de hielo", solo pudo ser segunda en el programa libre del domingo. Eso sí, ganó el programa corto el sábado. No pudo hacerse con la competencia para su equipo.

En su lugar, ganó el otro gran aliciente. La campeona olímpica en Pekín 2022, Anna Shcherbakova, se llevó el triunfo en el programa largo y ganó la competición para su equipo, el Red Machine. Tras ese éxito, dejó la bomba de una posible retirada por todo lo que está pasando: "De momento quiero descansar, no pienso en la próxima temporada". El hecho de que no pueda competir a nivel internacional le ha afectado y, si no cambia la situación, podría tomar la decisión definitiva de dejarlo con solo 18 años.

[Más información: Vladimir Putin desafía al COI con sus propios Juegos Olímpicos: 5 países y 106 medallas para Rusia]

Noticias relacionadas