Talant Dujshebaev, con el KIelce.

Talant Dujshebaev, con el KIelce. KIELCE

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El episodio que abochorna al balonmano entre amenazas de muerte, escupitajos y racismo: "Puto chino estúpido"

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Lamentable incidente el que se vivió este pasado fin de semana en el clásico del balonmano polaco entre el Wisla Plock y el Kielce. Los españoles Talant Dujshebaev y Xavier Sabaté fueron además los protagonistas de este episodio que abochorna al deporte y que deja acusaciones muy graves.

El partido estuvo cargado de momentos de muchísima tensión dentro de la cancha, y esta fogosidad terminó trasladándose también a la banda. Tanto, que los dos técnicos españoles, uno de cada equipo, se enzarzaron hasta el punto de cruzarse insultos racistas y escupitajos.

Las acusaciones son realmente graves. En esta disputa entre los técnicos del Wisla y del Kielce, Sabaté afirmó que Talant Dujshebaev le escupió en la cara, mientras que Dujshebaev reclamó que había recibido insultos de "puto chino estúpido".

Tras el partido, se produjo un intercambio de comunicados entre ambos clubes, cada uno defendiendo su versión. El Wisla Plock, entrenado por Sabaté, relató su punto de vista de los hechos: "Sabaté escuchó inesperadamente a Talant Dujshebaev hablar en español: 'Hijo de puta, te voy a matar'. Estas palabras sorprendieron absolutamente a Xavi, que preguntó sorprendido a Dujshebaev: '¿Qué estás diciendo?'. Entonces, Talant Dujshebaev agarró a Xavi Sabaté por el cuello y le escupió en la cara. La situación fue vista por televisión y por un testigo".

Por otra parte, el otro bando también ofreció su versión de los hechos: "Este tipo de comportamientos y ataques racistas o étnicos son inaceptables en el deporte profesional al más alto nivel. El deporte debe unir, no ampliar las diferencias. Solicitaremos a las autoridades competentes de la liga una explicación detallada de la situación que nunca tendría que haber tenido lugar".

El partido vivió momentos muy tensos a lo largo de los sesenta minutos de juego. De hecho, los colegiados llegaron a cobrar más de 20 exclusiones, y hasta tuvieron que mostrar una tarjeta roja y otra azul. El partido cayó del lado del Wisla, que venció por 29-25.