David Ferrer: “Me parece una estafa para la gente”
Tras lo ocurrido el martes, los jugadores vuelven a cargar contra la organización de Roland Garros, que vive momentos complicados por la falta de pistas cubiertas y la obligación de jugar con lluvia.
1 junio, 2016 18:29Noticias relacionadas
A media tarde del miércoles, las derrotas de David Ferrer (3-6, 5-7 y 3-6 frente a Tomas Berdych), Roberto Bautista (6-3, 4-6, 1-6 y 5-7 ante Novak Djokovic), Albert Ramos (2-6, 1-6 y 6-7 contra Stan Wawrinka) y Marcel Granollers (2-6, 7-6, 1-6 y 4-6 frente a Dominic Thiem) dejaron Roland Garros huérfano de españoles en el cuadro masculino, con todos fuera de la competición entre los octavos y los cuartos de final. Antes de despedirse, sin embargo, los jugadores volvieron a reflexionar sobre el caos del martes, con la organización obligando a los tenistas a jugar bajo la lluvia. De forma unánime, las quejas cayeron en cascada.
“Era una manera de salvar el día para ganar dinero y no devolver las entradas”, aseguró el alicantino, más crítico que nadie con los organizadores. “Al final, los jugadores somos los que menos hemos importado en este torneo. Se jugaron dos horas y un minuto y luego pararon”, recordó sobre la jornada del martes, cancelada a media tarde. “Es lo que querían. Ganaron su dinero. ¿Qué voy a decir? Habrá opiniones de todo, gente que le parezca bien y otra gente a la que le parezca mal. A mi modo de ver, no me parece lo correcto. Me parece una estafa para la gente”, repitió el número 11 del mundo.
“Desde el primer momento nos dijeron que el día pintaba muy mal, pero que intentarían hacer cualquier cosa para sacar partidos adelante”, coincidió Bautista, que como Ferrer sufrió las consecuencias de la lluvia, llegando incluso a sentir dolor en el hombro por lo pesadas que estaban las pelotas y lo complicado que era moverlas. “Hoy estaba mucho más rápida que ayer. Las condiciones son lentas, porque la pista tiene mucha humedad. Ayer eran muy diferentes, la bola se mojaba cuando llegaba a la lona de atrás. Por eso, fue un partido muy lento, con muchos intercambios en los que había que trabajar todos los puntos”, apuntó el castellonense, que pese a la derrota le plantó cara al número uno del mundo.
¿Pistas cubiertas?
“Yo creo que en un torneo así tener un par de pistas cubiertas te soluciona un poco la jornada, porque te va quitando partidos”, apuntó Granollers. “No hubiera pasado lo de estos últimos días", continuó: "Estuve aquí desde las ocho de la mañana de ayer hasta que me cancelaron. Me fui muy tarde, eran más de las ocho y media cuando me marché”, aseguró. “Pero bueno, son muchas horas en el club y son situaciones a las que el jugador debe adaptarse”, se despidió el catalán, que no pudo con la pujanza del joven Thiem.
“¿Y qué haría usted si fuese un directivo?”, le preguntaron a Ferrer, colocándole en el lado de los organizadores. “Miraría por el bien del jugador”, respondió el español. “Es cuestión de sentido común, de lógica pura. Me parece increíble que en un torneo tan histórico no haya al menos dos pistas cubiertas, cuando aquí siempre llueve”, prosiguió. “De primeras, eso me parece algo tan ridículo… No han evolucionado en ese aspecto. Es increíble que en Australia, donde nunca llueve, tengan tres pistas techadas y aquí no se haya hecho todavía. No sé cuál es el adjetivo para definirlo. Un torneo de estas dimensiones se ha quedado muy atrás en ese aspecto. Tuvieron la suerte de que nadie se lesionó y no pasó nada, pero no es normal”.
Carla también cae
Además de las cuatro derrotas masculinas, Carla Suárez no pudo avanzar a cuartos de final tras decir adiós en un duro partido ante la Kazaja Putintseva (5-7 y 5-7), protagonista de un encuentro lleno de puños al aire, quejas y golpes indescifrables para la española.
“He tenido la sensación de ir a remolque”, dijo la canaria, que ahora se centrará en su temporada de hierba. “Me ha faltado paciencia en algunos momentos. Podía haber sido más fuerte mentalmente, aguantar un poco más. Al final, se ha decidido por detalles. Su esquema de juego ha sido claro”, añadió sobre su contraria, que aguantó todo lo que fue necesario. “Se ha demostrado que ha sabido jugarme. Cuando me juegan así, eso me molesta mucho”, insistió.
“Es una oportunidad perdida porque era alguien de ránking inferior a mí, pero tampoco hay que verlo así. Todos los partidos que pierdo no pueden ser oportunidades perdidas. Hay que mirar el lado positivo, aunque obviamente me habría gustado estar en cuartos, pero cada torneo tienes que saber aprovecharlo, incluso sacar el lado bueno”.