A tirones, Pospisil gana a Bautista en el US Open
El canadiense, físicamente fundido durante un buen tramo del partido, resiste 7-5, 2-6, 4-6, 6-3, 6-2 al español y llega a octavos de final.
5 septiembre, 2020 22:10Para eliminar a Roberto Bautista del US Open, Vasek Pospisil pasó por mil situaciones distintas. Durante la tercera ronda del grande estadounidense, el canadiense vivió de todo: soñó con la victoria tras ganar el primer parcial, salvó siete bolas de break en el arranque del segundo (¡siete!) para terminar perdiéndolo, se desfondó durante el tercero, totalmente roto parecía, renació en el cuarto pese a ser atendido por problemas en su muslo derecho y acabó haciéndose con la victoria en el quinto. En 3h40m, Pospisil venció 7-5, 2-6, 4-6, 6-3, 6-2 al número 11 para citarse con Álex de Miñaur, que también necesitó cinco sets para tumbar 6-4, 0-6, 4-6, 6-3, 6-1 a Karen Khachanov.
“Creía que tenía el partido controlado, y en un momento ha cambiado, de blanco a negro, radicalmente”, reconoció Bautista tras la derrota. “Contra este rival las cosas pasan muy rápidas, tanto para bien como para mal. He tenido un juego desafortunado en el cuarto set, en el que me ha hecho el break prácticamente sin darme cuenta”, añadió el español. “Él es un jugador incómodo, que va a tirones. Ha estado afortunado al final del partido, y por desgracia no he podido ganar”.
Pospisil jugó un primer set de manera inteligente. Apoyándose en su poderoso saque, el canadiense se movió enérgicamente después de cada buen servicio para atacar cada bola a la primera, rehuyendo de los peloteos y evitando discutir el partido bajo las reglas de Bautista, más cómodo en un cruce peleado en intercambios largos, cocinado a fuego lento, sin tanto riesgo en cada tiro, sin buscar permanente las líneas de la pista.
Tras perder un primer parcial que podría haber ganado, Bautista tuvo siete pelotas para romper el saque de Pospisil en el juego inicial del segundo. No aprovechó ninguna, y el canadiense salió aparentemente reforzado de esa situación de peligro. Fue un espejismo: el español le arrebató el saque a la siguiente ocasión que tuvo (2-1) y disfrutó de una hora muy buena que le sirvió para ganar la segunda y tercera manga, acercándose a una victoria que llegados a ese momento parecía pan comido, cuestión de tiempo, poco más que un mero trámite.
Pospisil arrancó el cuarto set cargando con 50 errores no forzados y dolorido en el muslo derecho, que el fisioterapeuta le vendó con 1-1. De resoplido en resoplido, el canadiense se abrió un hueco para volver al encuentro cuando nadie lo esperaba, quizás ni él mismo. Recuperando el tono al saque, Pospisil fue manteniendo sin mucho esfuerzo sus turnos de servicio y volvió a creer en la victoria, que por un rato había abandonado, cuando se fabricó un break (5-3) que le abrió las puertas de la remontada. 45 minutos más tarde, Pospisil había logrado lo impensable: acabar con el español en cinco mangas.
“Hoy no ha podido ser”, lamentó Bautista, que llegaba al torneo impulsado por haber llevado al límite a Novak Djokovic en las semifinales de Cincinnati la semana anterior. “Llevo muchas semanas trabajando bien, haciendo las cosas de la manera decuada. El tenis es así. A veces, no salen las cosas como uno quiere. Pero me voy tranquilo. Como siempre, he dado todo lo que tenía en la pista”.