Philippe Chatrier, pista central de Roland Garros

Philippe Chatrier, pista central de Roland Garros Reuters

Tenis

Roland Garros 2024, una completa incógnita: sin favoritos claros y con el tenis español cuestionado

Novak Djokovic, Carlos Alcaraz o Sinner llegan con muchas dudas al torneo ante el buen momento de jugadores como Ruud, Tsitsipas o Zverev.

21 mayo, 2024 11:01

Roland Garros ya está en marcha. El segundo Grand Slam de la temporada ha arrancado su fase previa y está dispuesto a dejar huella en una temporada con más sorpresas de las esperadas. Poco se esperaban un guion de estas características a pocos días del mes de junio, pero la tierra batida de París quiere dejar su impronta en el calendario.

Uno de los ingredientes principales de este Roland Garros es la duda. Muchos jugadores llegan a la capital francesa con muchas incógnitas en su rendimiento y tratarán de revertir un curso que no ha empezado muy bien para muchos de ellos. Es el caso de grandes figuras como Carlos Alcaraz o Novak Djokovic.

Es decir, los dos principales favoritos a imponer su ley en París llegan en su peor momento en mucho tiempo. Uno por lesión y el otro por falta de sensaciones, pero lo único cierto es que ninguno ha sido capaz de cumplir con los pronósticos en los primeros meses del año. Mucho tienen que demostrar en la arcilla de Roland Garros y la presión aparece sobre sus hombres a tan apenas unos días de que arranque el cuadro final.

[El mar de dudas de Djokovic: sin ritmo y sin confianza con Roland Garros en el horizonte]

Por otro lado, hay jugadores como Rafa Nadal o Jannik Sinner que apuran las horas para saber si estarán presentes en el Grand Slam. Para ellos cada minuto cuenta y se encuentra deshojando la margarita para estar presentes en el cuadro final. Ante eso, el creciente nivel de tenistas como Zverev, Tsitsipas o Ruud hace que las apuestas no estén claras.

También hay un aspecto que preocupa más allá de los nombres propios y que está relacionado con nuestro país. Esto está referido al nivel del tenis español en esta temporada, que también está viviendo un bache enorme. Por lo tanto, Roland Garros llega con muchas más dudas que certezas y con una cantidad reseñable de incógnitas que resolver.

Djokovic, durante el Masters 1.000 de Roma 2024

Djokovic, durante el Masters 1.000 de Roma 2024 EFE

Alcaraz, Djokovic y Sinner

Si había una terna de favoritos a principios de temporada para Roland Garros esa la podrían conformar fácilmente Carlos Alcaraz, Novak Djokovic y Jannik Sinner. Los tres se habían destapado como los tenistas más en forma del pasado curso y llegaban pletóricos a 2024. Ahora todo es incertidumbre para ello.

Cinco meses después, solo Jannik Sinner ha brillado en el circuito. Ha ganado el Open de Australia, el Masters 1000 de Miami y el ATP de Rotterdam. Ha amenazado el reinado de Novak Djokovic y ha superado a Carlos Alcaraz en la segunda posición del ranking. Sin embargo, un problema en su cadera ha provocado que su participación penda de un hilo en Roland Garros.

Mientras tanto, la situación de Djokovic y Alcaraz no es nada halagüeña. Ambos han estado muy por debajo de lo esperado en este 2024. El español solo ha conseguido un título, el Masters 1000 de Indian Wells, y su curso ha estado marcado por las lesiones. De hecho, se ha perdido los tres últimos torneos, por lo que llega sin ritmo competitivo.

Carlos Alcaraz se lleva la mano a la cara durante un partido en el Mutua Madrid Open.

Carlos Alcaraz se lleva la mano a la cara durante un partido en el Mutua Madrid Open. REUTERS

Novak Djokovic llega casi peor que Alcaraz. El serbio está completando un curso cargado de decepciones y aspira a levantar el vuelo en Roland Garros. No ha ganado ningún título y apenas ha estado en las rondas avanzadas de los torneos que ha disputado. Fiasco tras fiasco llega al Grand Slam sin sensaciones y con muchísima presión.

Todo esto, unido al buen momento de jugadores como Casper Ruud, Stefanos Tsitsipas o Alexander Zverev, campeones de los últimos torneos sobre tierra batida, hace que las quinielas se disparen en esta edición de Roland Garros. Un futuro, sin duda, muy incierto.

El tenis español

Otro de los puntos candentes es el tenis español. Históricamente siempre ha sido un Grand Slam que se le ha dado muy bien a los jugadores de nuestro país. De hecho, han vencido hasta en 22 ocasiones en París a lo largo de la historia. Sin embargo, este curso las expectativas están más bajas que nunca.

El tenis patrio apenas ha brillado esta temporada y solo acumula un título en el cuadro masculino. La victoria de Carlos Alcaraz en Indian Wells es el registro más destacado del 2024 y solo otros dos tenistas, Roberto Carballés (Marrakech) y Pedro Martínez (Estoril), han tenido opciones reales de levantar un trofeo.

Con solo tres tenistas en el top 50 (Carlos Alcaraz, Alejandro Davidovich y Pedro Martínez), España solo tendrá un cabeza de serie en el Grand Slam. 'Carlitos' será el tercero y únicamente Davidovich aspira a serlo si hay bajas de última hora. Todo esto hace indicar que la participación no será muy notable.

Más allá de Rafa Nadal, que entrará con ranking protegido si finalmente decide participar, habrá otros tres como mínimo luchando por avanzar rondas. Roberto Carballés, Jaume Munar y Roberto Bautista tienen asegurada su presencia por puesto de la ATP. 

[Rafa Nadal vuelve a la tierra de Roland Garros: la prueba definitiva para jugar o no en París]

Además, también hay otro puñado de tenistas que buscan estar presentes en Roland Garros a través de la fase previa. Oriol Roca, Pedro Llamas, Alejandro Moro, Albert Ramos, Dani Rincón, Bernabé Zapata intentarán que la representación de la Armada aumente, pero para ello deberán de salir triunfadores de sus duras batallas.

La duda de Nadal

Por otro lado, Rafa Nadal es una figura que causa expectación por sí misma. El 14 veces campeón de Roland Garros todavía no ha confirmado su presencia en el cuadro final, pero ya se ha desplazado hasta París para completar unos entrenamientos que le hagan tomar una decisión final.

Nadal vuelve a la tierra de Roland Garros con la ilusión de poder jugar su torneo favorito. A priori, sería la última vez que lo haga y no quiere no estar a la altura de lo que significa su figura para la Philippe Chatrier y todo el entorno tenístico parisino. Estos días pasará la prueba definitiva para saber a ciencia cierta si está preparado.