El Cultural

Juan Pedro Aparicio

“El español hoy por hoy es, como el Barça, imparable”

25 mayo, 2006 02:00

Juan Pedro Aparicio, por Gusi Bejer

(León, 1941), actual director del Cervantes de Londres, que de provocador tiene lo que un notario, que lo suyo es escribir "y a veces ni eso", pero acaba de publicar La mitad del diablo (Páginas de Espuma), un libro de relatos hiperbreves que derrochan humor negro, poesía... cada vez en menos palabras y con más sentimiento y más belleza. ¿Cabe mayor provocación?

Pregunta: El título del libro iba a ser Ejercicios de literatura cuántica... ¿el cuento hiperbreve es la cuadratura del círculo literario?
Respuesta: Me gusta definir el cuento como aquella narración que empieza pronto y termina enseguida. Así que el cuántico, por su condición de hiperbreve, ha de empezar todavía antes y terminar también antes, lo que tiene tanto misterio como la cuadratura del círculo, y de ahí deriva su atractivo.
P: ¿Hay muchos agujeros negros en nuestras letras?
R: El agujero negro tiene tanta fuerza de atracción que ni siquiera deja salir la luz. Y lo que yo veo son muchas estrellas mediáticas.
P: ¿Quién, por ejemplo?
R: ¡Qué feo está señalar!
P: Dice que la extensión del cuento es clave para conservar al lector: ¿es una especie en vías de extinción?
R: En el Metro por lo menos no, que siempre hay alguien leyendo.
P: El primer relato de La mitad del diablo es "El cielo". ¿Pura provocación?
R: Ya me gustaría. Tengo de provocador lo que un notario o un agente de aduanas. Me falta talento para ello. Lo mío es escribir. Y a veces ni eso, pues las más de las veces me conformo con leer.
P: ¿El escritor es un ángel caído?
R: Caído y muchas veces arrastrado por el suelo, con su poquito de mala leche y una santa indignación.
P: ¿Cuál es su mayor tentación (literaria)?
R: La siguiente, siempre la siguiente, la que está por conquistar, o sea por escribir. En eso sí soy un Don Juan.
P: ¿Cuál es la traición imperdonable en un escritor?
R: Hace tiempo que lo perdono casi todo. Pero lo que menos me gusta de cierta literatura es su tendencia a la prolijidad. De ahí que me encanten los cuánticos.
P: ¿Y en un lector?
R: A los lectores se lo perdono todo. Soy capaz hasta de devolverles el dinero si no les ha gustado el libro.
P: "Cuando despertó, el crítico todavía estaba ahí". En su caso sería ¿un cuento de terror, una historia de amor?
R: ¿Qué decir? Yo tuve una novia crítica que me dejo por otro escritor más alto que yo.
P:¿Qué le dirían sus personajes si le saliesen al encuentro?
R: Habría de todo. Algunos querrían hasta matarme por haber mostrado lo que tan celosamente querían ocultar. Otros no me reconocerían. Pero con alguna de mis heroínas me iría, por lo menos, de viaje.
P: ¿A qué autor le juraría amor eterno?
R: Hace tiempo que no practico esas declaraciones. Pero hoy por hoy siento todavía devoción por la literatura de Conrad.
P: En La mitad del diablo unos demonios vuelven a la tierra convertidos en políticos... ¿se fueron alguna vez?
R: Esto de los políticos es como una noria, lo que es malo y bueno a la vez. Malo, porque siempre están ahí. Bueno, porque unas veces están arriba y otras abajo.
P: Hablando de política, ¿qué hace un narrador en el Cervantes de Londres, rodeado de burócratas?
R: ¡Qué va! Aquí no hay burócratas. La gente que ha elegido vivir lejos de su país es por naturaleza inquieta y dinámica, lo mejor de cada casa.
P: ¿Qué ha sido, que será lo mejor que ha hecho allí?
R: Profundizar en el interés de la sociedad inglesa por nuestra cultura y recuperar la tendencia creciente del número de alumnos de español que se había perdido. Y vamos en camino cierto de lograrlo. No tardando mucho el español será la primera lengua extranjera en este país.
P: Algún momento malo habrá sufrido...
R: Uno muy dramático. El 7 de julio pasado, mientras esperaba a que todo el personal del Instituto acudiera al trabajo sano y salvo.
P:¿Se defiende bien la lengua de Cervantes en la tierra de Shakespeare?
R: El español hoy por hoy es, como el Barça, imparable.
P: ¿Sabe que su "Luis XIV" puede ser el cuento más breve del mundo?
R: Sí, claro. ése es el juego que propongo en el libro a través de su cadencia menguante. Y me parece además que sólo sería posible hacer uno más breve traduciéndolo al inglés.
P :¿Qué papel desempeñan en la "familia literaria leonesa" Merino, Luis Mateo y Antonio Pereira?
R: Buenos amigos los tres. Los dos primeros además dilectos sobrinos de mi querido y admirado "tío" Sabino Ordás. él, Sabino Ordás, ha sido verdaderamente quien más ha hecho por nosotros. ¡Qué hombre y qué escritor!
P: Volviendo al libro, otros demonios regresan como mujeres de poetas... ¿tan insufribles son?
R: Todas ellas son encantadoras . Es el Diablo quien las hace aparecer de otra manera. Por eso es el Diablo.
P. En otro relato, un terrorista del 11-S se enfrenta a los fantasmas de sus víctimas...
R: Ese cuento me gusta mucho, mientras lo escribía sentí una emoción especial. Me pareció que tales circunstancias podían haberse dado en ese fugaz tránsito que va de la vida a la muerte .
P: ¿Pone a menudo "demasiada carne en sus personajes", le sangran los libros?
R: Iba a decir que, por si acaso, escribo rodeado de vendas, pero eso es ya otro cuento cuántico.