Luis Racionero: "La política española sigue contaminada de guerracivilismo"
Pregunta: ¿De verdad le dan igual derechas e izquierdas?
Respuesta: Como son hoy en día sí, porque son casi lo mismo. Yo soy partidario de las bodas gay, y del AVE, y no creo que ni unas ni otro sean de derechas o izquierdas. Los políticos se esfuerzan en buscar diferencias para ganar votos, pero cada día les resulta más difícil.
P: ¿Cómo se volvió progre en 1958, en Estados Unidos?
R: Estudié en Milwakee, y allí la educación era muy distinta. Además, me acogió un profesor que me llevaba a reuniones sindicales, me explicó lo que era la democracia...
P: ¿Y cómo volvió a “ver la luz” en el 93, apoyando públicamente a Aznar?
R: Porque a mí, que había votado a los socialistas, no me gustaba nada lo que habían hecho (la corrupción, los GAL), y pensé que había que cambiar. Un intelectual debe ver la realidad, analizarla, criticarla y actuar. Y yo actué...
P: ... a pesar de afirmar que la democracia española “está contaminada de guerracivilismo”...
R: Totalmente, lo ves cada dos por tres. Aún necesitamos una generación para que desaparezcan los rencores.
P: ¿De qué se avergüenza la derecha?
R: De haber colaborado con la Dictadura (aunque, como señala Anson, parte tuvo que exiliarse), y luego, de perder la cultura.
P: ¿Y cómo fue?
R: Desde Pericles, la derecha siempre fue mecenas de la cultura, pero en el siglo XX se la han quedado las izquierdas a través del Estado y las subvenciones.
P: ¿Y por qué cuando la derecha alcanza el poder no recupera ese protagonismo cultural?
R: Porque es más imparcial y objetiva. El PP apoyó a Almodóvar y a Boadella como ningún gobierno del PSOE había hecho antes, porque no mira el carnet. La izquierda sí, pero tiene mejores formas.
P: ¿A qué se refiere?
R: A que a la derecha le fallan eso, las formas, sobre todo ahora, con esa crispación y ese echarse al monte que les hace perder la razón... Necesitan mejores asesores de imagen, que hoy son más importantes que los programas.
P: ¿Coincide con Savater, cuando dice que nadie está dispuesto a pagar por lo que cree?
R: Totalmente, somos una generación de niños mimados que sólo tenemos derechos, que todo lo esperamos del Estado y que no estamos dispuestos a asumir ninguna obligación.
P: ¿Ha sufrido en sus carnes que ser del PP en Cataluña es como ser de la casta de los intocables, según Piqué?
R: Yo no, aunque el PP, que usó electoralmente el tema de Estatut a costa de Cataluña, ha salido malparado, y tardará tiempo en recuperarse. Pero la gente es educada y no lo hace notar.
P: ¿Es la izquierda (dice Sánchez Dragó) la mayor impostura de la historia?
R: No, como dicen los mexicanos, “bájele, bájele”, que casi todas las afirmaciones de Dragó suelen ser algo extremistas. Lo que es una impostura es hacerse pasar como de izquierdas y vivir como un burgués.
P: ¿El antiamericanismo nace del complejo de inferioridad de Europa?
R: Sí, y de la manía y la rabia y la envidia de Francia, que no perdona a Estados Unidos que le haya desbancado hasta en lo cultural.
P: ¿Qué está pasando en Cataluña para que Boadella y Arcadi Espada hayan tenido que crear un partido no nacionalista?
R: Que estaban hasta el gorro del nacionalismo. Los catalanes somos catalanistas por definición, y no nos crea problema: yo soy de la Seu d’Urgell, y la amo, pero mi identidad consiste en largarme de vez en cuando a Cambridge, o a Brasil... Porque si te están dando la lata constantemente con el nacionalismo, pues eso, acabas hasta el gorro.