Elena Anaya
"Estoy hasta en la sopa"
15 enero, 2010 01:00La actriz Elena Anaya protagoniza Hierro. Foto: EFE
La actriz protagoniza Hierro, la ópera prima de Gabe Ibáñez que se estrena hoy
Tiene uno de los rostros más bellos e imprescindibles del cine español. El magnetismo de Elena Anaya, basado en su talento e inteligencia, regresa con fuerza a las pantallas a partir de hoy mismo con Hierro, debut en la dirección de Gabe Ibáñez que sitúa a la actriz en la piel de una madre que va perdiendo el control sobre su vida por momentos. En este intenso thriller psicológico, ambientada en la peculiar isla de Hierro, Anaya da un paso más en su extraordinaria carrera como actriz al alcanzar profundidades ya adivinadas en títulos importantes del cine español que ya contaron con su talento: Familia (1996), Lucía y el sexo (2001) o Sólo quiero caminar (2008) dan buena fe de ello. La actriz, además, tiene pendiente de estreno su reencuentro con Julio Medem en Room in Rome y dos películas internacionales en los que tiene un pequeño papel: Cairo Time y L'instinct de mort.
Pregunta: Es increíble la cantidad de atención que ha suscitado su trabajo en Hierro...
Respuesta: La verdad es que estoy hasta en la sopa, pero todo sea por la película. De todos modos, cuando estás en un proceso de promoción tan agotador no tienes tiempo a ver nada. Después te encuentras algo por ahí y te acuerdas de que lo hiciste. Pero no estoy para nada pendiente sobre lo que se publica sobre mí.
P.: Con Hierro se adentra por primera vez en el terreno del thriller...
R.: No es una película de género, aunque hay thriller va de otra cosa. Interpreto a una madre soltera que pierde a su hijo en un ferry yendo a la isla de Hierro. Al cabo de unos meses tiene que volver porque encuentran un cadáver y debe reconocer si es el de su hijo. A partir de aquí, le van pasando cosas. Es una película con una trama muy sencilla, nada retorcida, en la que lo importante es lo que le va pasando al personaje por dentro.
P.: En ese personaje femenino atormentado puede haber ecos de Repulsión, de Polanski.
R.: Hace poco alguien me hablaba de otra película de Polanski, La semilla del diablo. Creo, de todos modos, guardando las distancias, que el principal referente ha sido Hitchcock. Gabe utiliza muchos elementos de la simbología del cine clásico: los pájaros, el agua...
P.: ¿Cómo le convenció Ibáñez para embarcarse en esta aventura?
R.: Me mandó un guión muy bien hecho y me atrajo mucho todo el material que incorporaba. Había una serie de referencias estéticas que me llevaban a un universo muy personal que me interesaba muchísimo. Desde el principio supe que iba a ser una película visualmente muy potente.
P.: Usted es la protagonista absoluta.
R.: La película realmente gira en torno a ella, a lo que le sucede por dentro. Como actriz, he tenido que llegar hasta lugares donde no había estado antes. Es una persona con un gran sentido de culpabilidad por haber perdido a su hijo y a partir de aquí inicia un proceso interior brutal en el que salen todos sus monstruos. Ha sido un rodaje muy divertido y apasionante, pero también muy exigente en el que he tenido que estar muy concentrada.
P.: ¿Qué distingue a un buen director de uno malo?
R.: La pasión. Notas inmediatamente cuando alguien es bueno o malo por su nivel de implicación. Los que enseguida están contentos y no se lo piensan dos veces, malo.