Miguel A. Gómez Martínez
"No sé por qué tengo más nombre en el repertorio sinfónico"
22 julio, 2010 02:00Miguel Ángel Gómez Martínez. Foto: J. F. Ferrer
Dirige la nueva producción de ‘Tosca' de Puccini en el Teatro Auditorio de El Escorial.
PREGUNTA.- Mucha gente se preguntará por qué otra Tosca en El Escorial. ¿Qué les diría usted?
RESPUESTA.- Les diría que Tosca es siempre extraordinaria. Puccini no cansa, y menos esta joya del repertorio. Probablemente no haya habido mucha coordinación a la hora de programarla en El Escorial. Pero eso no constituye más que otra gran oportunidad para disfrutar de la buena música.
P.- Será en una de sus escasas, casi raras, apariciones en fosos nacionales. ¿A qué se debe tanta ausencia?
R- Pues, sencillamente, porque no me han llamado. (Risas) Por lo que se ve, y no sé a qué se debe, tengo más nombre en España en el repertorio sinfónico. Porque, siempre que mi agenda me lo permita, estaré encantado de participar en este tipo de propuesta. De hecho, se da la circunstancia ahora de que llevaré esta misma producción de Tosca al Festival Castell de Peralada. Luego acudiré a La Coruña con un Otello. Y en Bilbao me esperan para un Eugene Onegin. Ya se sabe con estas cosas. Basta que abras la boca para que te venga todo de golpe.
P.- Ya se dice que John Dew es el enfant terrible que viene a llenar el hueco que dejó Calixto Bieto con su polémica visión de Carmen. ¿Cuánto hay de cierto en esto?
R.- No tanto (risas), no tanto. De hecho, podría decirse que en algunos aspectos es un montaje tradicional. Su aproximación al libreto, los movimientos de escena, el vestuario, todo eso es bastante respetuoso. Pero, sí, existen algunos elementos, detalles, que resultarán un poco chocantes, pero sin llegar a alterar el contexto de la historia o el desarrollo del argumento.
P.- ¿Cómo cuáles?
R.- No puedo adelantar nada. Sólo diré que si me hubiera parecido que alguna de estas licencias pudieran llegar a desvirtuar la ópera no me habría prestado para esta aventura. Creo que gustará.
P.- Hace años le vimos frecuentar el podio de la Filarmónica del Teatro Colón de Buenos. Ahora que se reabre el mítico teatro, ¿volverá a Argentina?
R.- No lo sé. No me paso por ahí desde antes de que cerrara por obras. En este tiempo, ha cambiado varias veces de dirección... Es decir que no tengo una relación fluida con sus intendentes. Pero, por supuesto, me gustaría volver allí, y comprobar que su acústica sigue igual que siempre...
P.- ¿Qué hay de cierto en eso que dicen, que ofició su primer concierto con 7 años?
R.- Me temo que sí (risas). En realidad, fue medio concierto, al frente de la Banda Municipal de Granada. Ocurrió que un día fui a recoger a mi padre, músico de la orquesta, para que luego me llevara al parque. Ni entonces, ni ahora, era yo precisamente tímido, así que al entrar en el recinto, medio grité: "Buenas tardes". Los músicos se hartaron a reír, y el director me dijo: "Miguel Ángel, tú que sabes mucho de música, ¿no te gustaría dirigir algo?". Y allí mismo me planté por primera vez delante de una orquesta.
P.- ¿Y qué dirigió?
R.- Lo de aquel ensayo improvisado no me acuerdo. Pero en el concierto oficial dirigí el intermedio de La leyenda del beso, la obertura de El barbero de Sevilla y el pasodoble Pepita Greus. Dirigí el mismo programa recientemente, durante la celebración del 50 aniversario de la Banda Municipal de Granada.
P.- Tengo entendido que también tiene alguna composición entre manos...
R.- Lo cierto es que tengo varios frentes abiertos. He escrito algunas cosas para el programa Sueños de Antena 3 Televisión, he estrenado mi Tercera Sinfonía y el pasado enero terminé la mi primera ópera, La niña de Kiev, que ahora estoy pasando a limpio, y de la que no puedo decir nada más que hay algunas entidades, nacionales e internacionales, interesadas en ella.