Manuel Martín Cuenca, por Gusi Bejer.
El director de 'La flaqueza del bolchevique' también ha sido "seleccionado" en Cannes. Participará en su ‘Atelier' para desarrollar el proyecto de largometraje 'Caníbal', que rodará en Granada y cuyo guión, avalado por la carrera del cineasta, ya ha recibido el espaldarazo del mejor festival del mundo.
Respuesta: Una oportunidad y, por supuesto, una gran alegría.
P: ¿En qué consistirá su participación en el Atelier?
R: Son encuentros con productores internacionales, distribuidores, agentes de ventas... pero lo más importante es que el proyecto vaya avalado y apadrinado por la Cinefundación. Ayuda mucho.
P: ¿Por qué cree que Cannes se ha fijado en su proyecto?
R: Uff, esa pregunta no es para mí. Yo estoy feliz de que se hayan fijado en Caníbal y puedo tener intuiciones. Los criterios para la selección son el guión y los trabajos anteriores del director.
P: Explíqueme por favor de qué trata Caníbal. R: Es una historia de amor diferente. En el relato convencional estamos acostumbrados a encontrar el amor como fuerza liberadora. Pero el amor no puede cambiar la realidad.
P: Si todo sale bien, ¿cuándo comenzará el rodaje?
R: A finales de año o principios del que viene. En invierno, en Granada y Sierra Nevada. En la época de nieve.
P: Rodará en español, rumano, polaco y ruso. ¿Busca coproducción con el este europeo?
R: Rodaremos íntegramente en español, pero la actriz principal proviene de Rumania. Estamos negociando una coproducción con varios países.
P: Con su última película, La mitad de Óscar, dio un giro hacia un tipo de cine más pequeño pero también más libre. ¿Sigue en esa senda?
R: Creo que La mitad de Óscar fue una evolución lógica. Quizás Caníbal es una película más abierta, que al tener una historia de suspense puede enganchar más. Ya veremos. En cualquier caso nunca me gusta hacer lo que se espera que haga, ni por parte de la industria ni por parte de la crítica. Me gusta explorar.
P: El presupuesto de Caníbal no llega a los dos millones. ¿La creatividad también es esclava de la crisis económica?
R: El tamaño industrial no importa, siempre que mantengas la escala de la película. Se puede hacer una buena película por un millón o veinte millones... Lo importante es hacerla dignamente. Estamos llegando a un punto en el que se cuestiona hasta que la gente cobre por trabajar.
P: Cannes confía en Caníbal, ¿y el Ministerio de Cultura?
R: Nos apoyó en el desarrollo del proyecto y ojalá nos apoye ahora en la producción de la película.
P: Hablando de "canibalismos", ¿qué piensa del hachazo al Fondo de Protección de la Cinematografía?
R: En la línea de todo lo demás. No creo que haya habido un especial ensañamiento contra el cine. Me preocupan los "hachazos" contra lo social. Algunos recortes, además, no son éticos. La retirada de la tarjeta sanitaria a los inmigrantes irregulares me parece una medida inmoral.
P: ¿Qué efectos puede tener el nuevo modelo de financiación para el cine español?
R: Cuando sepa realmente en qué consisten las declaraciones más o menos "generalistas" sobre el nuevo modelo, podré tener una opinión. Pero, por ahora, juzgar la nueva política cinematográfica es como juzgar un eslogan.
¿Como aquello del "final de la cultura de la subvención"?
R: Si el cine no es apoyado por el Estado, desaparecerá. Como en la mayoría de los países europeos. Igual que pasará con muchos otros sectores. Lo que ocurre es que el cine es el más publicitado como subvencionado, pero las cifras que manejamos son ridículas comparadas con otros sectores.
P: Con una cuota de espectadores de menos del 15% y con la que está cayendo, ¿cree que la industria del cine está en condiciones de exigir ayudas?
R: Sólo con dinero de mercado es imposible hacer cine en ningún país europeo. Pregúntele a los alemanes por qué meten tanto dinero en su industria del cine. Quien lo niegue es que, sencillamente, no sabe nada de este sector o quiere que el cine español desaparezca. Así de simple.
P: Ante panorama tan negro, ¿qué aconseja al cineasta incipiente? (¿Quizá que piense en dedicarse a otra cosa?)
R: No, ¡por favor! Que tenga fuerza y deseo de seguir luchando. Lo necesitamos. Un país necesita su cultura. Ellos son el futuro. Por favor, que no se rindan.