El Cultural

Explorando 'webseries'

19 julio, 2012 02:00

Parece mentira, pero después de ochenta posts en "To be continued", aún no he hablado del fenómeno de las 'webseries'. Sé que llego tarde y además no estoy preparado para hablar de ellas con suficiente conocimiento de causa. Es uno más de mis debes con el universo serie, y prometo ponerme al día a lo largo del próximo mes, en el que haré descansar este blog.

Por otro lado, por lo que poco que he podido ver, explorando el tema superficialmente, el fenómeno 'webserie' en España tiene un especial interés desde que las pioneras Qué vida más triste -que dio el salto a la pequeña pantalla a través de La Sexta- y Cálico Electrónico demostraran que no hacen falta grandes presupuestos para hacer ficciones de calidad, que llevan el low cost impregnados a su discurso, y que sobre todo están mucho más cerca de los problemas de la calle y de la teleficción de los tiempos que las series mainstream de los canales de televisión. Ahora que TVE ha decidido reponer ¡en prime time! la serie de Ana Obregón (expresión de lo más carca, casposo, reaccionario y antediluviano de la teleficción española), creo que es buen momento para ponerme al día con la producción / distribución alternativa de series de ficción españolas.

La serie Malviviendo (David Sanz) me ha gustado bastante. Aparte de que es francamente divertida, creo que tiene varias ideas poderosas de puesta en escena y montaje, aparte de que la autenticidad caricaturesca de sus interpretaciones es capaz de volar por encima de ese costumbrismo ibérico mal entendido con el que nos solemos encontrar en las series convencionales. Ya tiene dos temopradas completas, con capítulos de 15-20 minutos protagonizados por cuatro chavales de Sevilla que realizan trabajos marginales -"gorrillas", camellos, ladronzuelos, etc.-, a partir de los que construyen personajes tan auténticos como a su modo paródicos. El aroma ‘amateur' -que se va sofisticando de capítulo en capítulo-, su frescura, su ‘humor chanante' y su audacia son verdaderos activos. Muy recomendable.

Me he propuesto ver otras tantas series: Tú antes molabas, con el colaborador de "Caiga quien Caiga" Antonio Castelo; Perestroika: la serie, de la que hablan maravillas, escrita por los guionistas de "El intermedio"; Vida universitaria, de varios jóvenes pacenses que prefieren divertirse a estudiar; Chica busca chisca, de contenido lésbico y con diversos premios, o Calabozos, supuestamente la más rara y fabuladora de todas ellas. El desarrollo y la exploración creativa de la tecnología flash, con la que empezaron muchas series, ha multiplicado el número de webseries de animación, siendo Cálico Electrónico (que ya va por su cuarta temporada) una de las más antiguas. Pero hay muchas más, como Happy Tree Friends (Rhode Montijo y Kenn Navarro), que ha alcanzado los 15 millones de seguidores, o Niña repelente, alumbrada en 1998.

Está claro que en la ventana on-line no sólo hay mucho por ver, también mucho por hacer. Aprovecharé el "descanso" canicular para ponerme manos a la obra.