A pesar de que su título coincida con el de la obra universal de Velázquez, Las Meninas no es un cómic sobre pinturas y cuadros sino sobre el artista sevillano, sus fuentes de inspiración y el acto creativo.
A través de escenas, como si fuera una pieza de microteatro, descubrimos el contexto y los personajes que rodearon el momento histórico que dio lugar a la famosa obra que retrata a la familia de Felipe IV. El lector compondrá su particular interpretación de qué supuso pintar en aquel periodo del Barroco Español con los comentarios y reflexiones de los protagonistas. Guión y dibujo se integran con gran eficacia para captar la atención desde el inicio y proponer una visión novedosa y memorable de los hechos que aquí se narran y que, como se verá, tanto han influido en el arte del siglo XX. Advertencia: una vez que el relato comienza resulta difícil que éste caiga de las manos.
La propuesta visual aporta el dramatismo y la determinación que acompañaron a Diego Velázquez en su viaje al panteón de los artistas elegidos para la memoria. Y mientras pasamos las páginas de este cómic inolvidable entendemos un poco mejor lo que significa ser un creador.