Jorge Blass
El joven ilusionista es el director del Festival Internacional de Magia de Madrid que cumple cinco años
Pregunta.- Vuelve el Festival Internacional de Magia de Madrid. ¿Qué supone dirigir esta cita?
Respuesta.- Es una oportunidad estupenda de traer a Madrid a algunos de los mejores magos del mundo durante cinco semanas en un escenario como el del Price y poder presentar lo que está pasando en la magia mundial. Los mayores nombres de las disciplinas mágicas se dan cita con varios espectáculos. Magia de cerca son shows en el escenario y empieza este miércoles con magos de Estados Unidos, Alemania y Bélgica con su última creación. Además es un show efímero porque se representa aquí y no se vuelve a repetir.
P.- Es un punto de encuentro de magos de diferentes lugares. ¿Hay diferentes corrientes dentro de la magia que se diferencien por países?
R.- Desde luego, hay una tendencia desde hace unos años muy fuerte en Corea, donde hay una escuela maravillosa de donde están saliendo magos que mezclan la magia con la tecnología. Y hay magia de un mago alemán que es uno de los más creativos del mundo, crea juegos en los que mezcla música en directo o de repente vienen unos magos belgas que hacen magia cómica y lo mezclan con el arte contemporáneo. Ha estado Derek del Gaudio que hace cartomagia pero de una forma diferente. El festival tiene una variedad con la que el público va a poder ver cosas que no conocían. Intento traer a magos innovadores, a los que más me han sorprendido y que sean novedad en Madrid.
P.- Cartomagia, micromagia... son conceptos que, tal vez, a un público no muy conocedor de esta disciplina se les escape... ¿en qué consisten estas corrientes?
R.- A grandes rasgos hay dos tipos de magia. Está la magia de cerca, que la hemos hecho en la sala Parish que alberga a 100 personas. La magia sucede a pocos centímetros del espectador. La otra parte del festival es la Magia en escena, que se repetirá durante las próximas cuatro semanas. Hay distintos magos que hacen su acto y hacen algunas partes conjuntas, una especie de polifonía mágica.
P.- ¿Cuáles son las citas más destacables de esta edición?
R.- Llevamos una semana y está siendo un calentamiento muy bueno con especialistas de magia de cerca como Derek del Gaudio, Inés y Woody Aragón que se han enfrentado a cien personas por pase. Se ha colgado el cartel de localidades agotadas así que ha sido un éxito. Ahora, en la pista principal del Price con 1.200 butacas, empieza un espectáculo mucho más ambicioso durante cuatro semanas donde los grandes magos conjugan. Además hemos tenido el premio de la magia de cerca, que ya lleva dos años, y a la gente le gusta mucho, tal vez este sea un público más específico pero el escenario te permite crear cosas más espectaculares.
P.- Se mezcla teatro, música, humor y el circo... ¿Es una disciplina abierta a las fusiones?
R.- Sí, desde hace algunos años la magia se está fusionando con mucho éxito con otras artes, sobre todo circenses y teatrales. Por ejemplo, los holandeses Magus Utopia -han ganado el Premio Mundial de Grandes Ilusiones- crean ilusiones, apariciones y desapariciones de personas, levitaciones, etc. Hacen una mezcla de magia y teatro, magia dramatizada a la que llamamos dramagia. Recrean una pesadilla y es como una mezcla entre El circo del sol y Tim Burton, algo muy visual. Luego están los belgas Doble Mandoble que hacen un acto cómico donde mezclan el arte contemporáneo con la danza y las artes del nuevo circo.
P.- Además de dirigir el Festival también hace un número
R.- Sí, es una magia histórica. Se llama El Árbol de la vida de Robert Houdin. Es un acto que aparece en la película El ilusionista, salen del árbol frutos y es como un autómata del siglo XIX. La hemos resucitado 170 años después de que fuera creada y hacemos un homenaje a Robert Houdin, que es el padre de la magia moderna.
P.- También hay espectáculo de magia cómica
R.- Sí, pero no toda la magia es divertida. Este espectáculo teatral es una magia que a los niños incluso les asusta un poco, hay muchas emociones. Hay diferentes formatos, magia tecnológica muy avanzada, magia histórica, comicidad, piezas visuales, etc. Yo creo que la gente repite porque es algo que solo pasa este mes.
P.- ¿Cómo ha evolucionado el mundo del ilusionismo en los últimos años?
R.- Sobre todo se está reinventando, está en continua evolución. Hablaba de la escuela coreana porque se ve cómo se puede avanzar en este arte porque ellos están despuntando a nivel mundial con sus actos de magia en el escenario. En España, por ejemplo, somos extraordinarios en magia de cerca. Surgen actos también de escena que despuntan en congresos mundiales pero somos realmente fuertes en magia de cerca.
P.- Al fin y al cabo la magia no solo es para entretener a los niños
R.- Claro, es una creencia errónea que mucha gente ha tenido. Gracias al festival la gente va entendiendo que la magia no es solo para niños sino que es un espectáculo escénico que puede estar al nivel de la danza, del teatro, de la música, etc. Pero es verdad que durante unos años ha estado relegada a un segundo plano. El año pasado tuvimos 25.000 espectadores y este año hemos aumentado una semana más por lo que esperamos ampliar esa cifra. Es un arte que interesa a todo tipo de público. Por supuesto que la magia también es para niños pero este festival es para todos los públicos.
P.- ¿Cuál es el estado de salud de la magia? ¿Es un arte que nunca muere y está en constante desarrollo?
R.- Ahora mismo es un buen momento. La magia vende muchas entradas. En España es de los mejores sitios de Europa. Fuera hay teatros pero aquí hay muchos lugares, festivales, teatros donde se hace magia y se están llenando.
P.- Se ve un auge de esta disciplina con la presencia de magos como El mago pop o Dynamo en la televisión. ¿Hasta qué punto es real la magia de Dynamo?
R.- Es un tipo de magia que a mí no me gusta porque creo que es magia en playback. La magia es otra cosa, es un programa de televisión que está muy posproducido y que lo que hacen no es real. Es una pena porque la magia consiste en el ingenio, en que haya un secreto. Ellos hacen un truco de cámara pero a los magos no nos suele gustar mucho este tipo de programas porque no es el arte al que nos dedicamos, es un producto televisivo que engaña al espectador y rompe el pacto que hay entre el mago y el espectador. La magia es un engaño con algo muy ingenioso que no sabes lo que es pero si lo ves en directo tienes que ver lo mismo que ve esta gente, algo que ellos no lo pueden decir. Yo aprendí de Juan Tamariz, soy su alumno, y en la magia que hago yo como Luis Piedrahita, etc nunca hemos utilizado un truco de cámara, nunca hemos hecho posproducción, ni hemos utilizado compinches y esto no me gusta. Se está cruzando la línea. Deja de ser ingenioso y es una pena. Es como el fútbol, ¿no?, no es lo mismo el fútbol real o el de Oliver y Benji.