Image: Dolores Redondo

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El Cultural

Dolores Redondo

"Negar la importancia del contemporáneo obedece más al pudor"

8 mayo, 2015 02:00

Dolores Redondo (San Sebastián, 1969) sabe bien la magia que encierra que su Trilogía del Baztán (Destino) siga conquistando lectores. En lo más oculto del bosque o a la vuelta de la esquina, el mal acecha...

¿Qué libro tiene entre manos?
Dos, uno que leo, Blitz, de David Trueba, y otro que escribo, mi próxima novela.

¿Ha abandonado algún libro por imposible?
Prefiero decir que de algunos libros sólo me ha interesado parte.

¿Con qué personaje le gustaría tomarse un café mañana?
Con Norman Mailer, aunque creo que sería mejor un whisky y por la noche.

Cuéntenos alguna experiencia cultural que le cambió su manera de ver la vida.
La más importante fue descubrir el placer de la lectura.

¿Entiende, le emociona, el arte contemporáneo?
Por supuesto, creo que negar la importancia del contemporáneo obedece más al pudor que para la sociedad supone verse reflejados que a la incomprensión del estilo.

¿De qué artista le gustaría tener una obra en casa?
De Miquel Barceló.

¿Le importa la crítica? ¿Le sirve para algo?
Claro, teniendo en cuenta que mi crítica más feroz soy yo, no puede imaginar lo a menudo que estoy de acuerdo con los excesos y carencias que me señalan. Por otra parte, el apoyo de los lectores proporciona equilibrio y un par de alas para volar por encima de las inseguridades.

¿A qué debemos temer más a Tarttalo o a los excesos del nacionalismo y la intolerancia?
La bestia cegada por la ira que devora al hombre retratada en todas las culturas. Creo que si miramos más allá de la figura mitológica, hallamos la respuesta.

¿Y a usted qué le asusta más, lo que se oculta en los bosques del Baztán o la reacción del público ante su próxima novela?
Cuando los lectores te distinguen con su apoyo se convierten en aliados para respaldar la iniciativa creativa, una figura de respeto, pero nada a lo que temer.

¿A qué o a quién se encomienda ante su éxito?
A los fantasmas de los escaladores congelados que me recuerdan que cada paso es sólo un peldaño de una montaña en la que no hay cima...

¿Cuál es el secreto de su éxito en Japón o Noruega? ¿Entienden allí los mitos vascos que vertebran sus libros?
El modo en que retratamos el mal es universal. El miedo que ya probamos una vez es el que más nos atemoriza, conocemos su sabor y sabemos que es capaz de destruirnos. Lo ancestral forma parte de una memoria que es común a la humanidad.

¿Algún día se sabrá qué le pasó a Ainara, la niña que originó su trilogía?
Mi compromiso con esta víctima no puede, por desgracia, ir más allá que contar su historia y el terrible final de su corta vida a manos de quien debió amarla y protegerla, pero hay profesionales trabajando en la investigación real, y me consta que están comprometidos a procurarle justicia. El caso sigue abierto. Espero ver a sus asesinos entrando en prisión.

¿Qué música escucha en casa? ¿Es de iPod o de vinilo?
Soy de nuevas tecnologías y escucho de todo un poco, desde rock a ópera.

¿Es usted de las que recelan del cine español?
He de admitir que en los últimos tiempos he vivido gratas experiencias con nuestro cine.

¿Cuál es la película que más veces ha visto?
Rebeca, de Alfred Hitchcock.

¿Qué libro debe leer urgentemente el candidato a la presidencia del gobierno (de cualquiera)?
El Príncipe de Maquiavelo, o quizá El Señor de las Moscas de Golding. La cultura le vendrá bien, pero nada es sin un corazón bondadoso. Creo que lo justo sería que los dirigentes del mundo tuvieran que arrancar una espada de la roca viva para probar la nobleza de su corazón.

¿Le gusta España? Denos sus razones.
Me gusta la gente, su compromiso, el espíritu de justicia, la respuesta en caliente (tan nuestra). Otras veces me apena su indolencia, el conformismo que conduce a la inmovilidad y a la falta de orgullo, la respuesta en caliente (por desgracia, tan nuestra.)

¿La mejor Marca España?
La nueva, la que vendrá, la que evoluciona, la de la cultura, la ciencia y el aprendizaje.