Segundos trenes: finalistas

Y los veinte poemas finalistas son:

Segun2
En el nido de mis entrañas
hay un albatros
hambriento de cielos

MJR
Pasajes caducos
Se evaporan bajo suelas fugitivas.
El desaliento sobrevive al otro lado de la alambrada.

Eliseo
Casi alcanzo la costura de tu herida;
Mi bolsa de huesos tiembla
Como hambre de tigre vacío.

Komodo
Enterré mis mariposas en tu ruta de la seda,
Y se ahorcó el revisor al llegar la madrugada,
Ahora las serpientes bailarán un lento réquiem.

FerS
Paciente flor en sombra
que acabas alumbrando
el osario del olvido.

Náufrago
Ocasos sin rescate en las nieves perpetuas
escorpiones rugen en mi estómago
y sucumbo al tren caníbal.

Vecino
Monte derrochador de nubes:
tú crees que murió el sol
y que mañana se apagarán las grietas.

Aún
Y aún nos crecen bajo los pies las serpientes
y aún duele cuando este tren de sombras crujientes
atraviesa a corazón abierto mis entrañas.

Braulio Dahuabe
¿Porque el fuego mojó los aullidos
y se rompió en gritos degollados al alba,
debo trotar sobre estos lodazales?

Huracanblue
Desprendiendo el candado de seda
De la mirada inocente nacida del barro
La lluvia nos libera de ser piedra

Pablo Cavero
El chamán destila pócimas
para que el guerrero resucite
al amanecer en tiempo de fortuna.

Carlos Rutilo
Aunque sigan en marcha los dientes de la bestia
no volveré a soltar los besos
que se aferran a mis manos.

Wonderland
Nada ciega tus sueños.
Las palabras se adormecen
en su infinito.

Mosca verde
Con humo esculpo
la piel de tu tristeza
éxodo fósil.

Team Bloo
Música de catenaria y ámbar
el hollín que lloraron nuestras madres
guardado en su cuaderno de viajes.

José Becerra Motriz
Como una bala rebotada en el poste
vuelvo a patear la gloria
y ahora rueda directo al arco de sombras.

Soledad Cortesana
Estaciones ruidosas, estériles llanuras.
Hay una selva aquí, en el vagón. Los simios
cultivan en los túneles las palabras cruzadas.

María José Viz Blanco
Tiempo de trenes perdidos,
de oportunidades diluidas
en copas vacías.

Rosario Campos
No volveré a soltar las ruedas de la bestia
y mañana escucharé la bienvenida
de los pájaros alegres en mi ventana.

Marta
Destino que se rindió al horizonte
sendero que transité entre las líneas
vuelo entre los raíles sin billete

Tema de la semana que viene: “El calor de la noche”.