Fotografía de Joan Colom
No es la primera vez que Colom colabora con el MNAC, que ya en 1999 el museo organizó la exposición El carrer. Joan Colom a la sala Aixelà, 1961, que recuperaba las obras originales de una muestra que realizó en 1961, las cuales quedaron en el depósito del museo.
Este fotógrafo pertenece a la corriente que el crítico Josep Maria Casademont calificó como "nueva vanguardia" de 1950-60, que también integran Francesc Català-Roca, Oriol Masons o Xavier Miserachs, y fue un gran renovador de la fotografía de posguerra española. Su trabajo más conocido resulta de sus callejeos por el Barrio Chino de Barcelona, lugar en el que nació en 1921 y que conocía bien. Toma los retratos en un ambiente hostil, empapado del negocio de la prostitución, escondiendo la cámara y disparando sin encuadrar, una tarea que reserva a la cámara oscura, donde sí tiene tiempo de cuidar la forma. Sus imágenes cargadas de modernidad le valen los elogios de Casademont, que no duda en calificarle como "el mejor reportero gráfico del país".
Colom dejó voluntariamente la fotografía en 1964, después de que una de las mujeres que aparecían en sus retratos le denunciara a él, al escritor y al editor del libro en el que se publicó la imagen. No retomaría su actividad hasta la década de los 90, siguiendo prácticamente las mismas pautas que le habían caracterizado.