Salvador Dalí: El enigma de Hitler, 1939 (Museo Reina Sofía)

A finales de 2012 debía cumplirse la profecía apocalíptica maya. Pero aquí estamos, en otro año 1 (¿se acuerdan del "efecto 2000"?) en el que el arte nos ayudará a 'recomenzar' el calendario. Los museos y centros de arte españoles echan el resto para mantener programaciones dignas a pesar de los recortes. Faltan algunos datos y es posible que algunas de estas muestras se caigan si se aprietan aún más los tornillos, pero esto es lo que podrá verse en el primer semestre del año. Se lo adelantamos.

Comencemos por las exposiciones históricas. Incluso prehistóricas. De la caverna al aire libre. La Fundación Botín de Santander nos ofrecerá en junio una panorámica sobre la edad de oro, que es la del Hielo, la de la pintura cavernaria, con utensilios, grabados, esculturas y recreaciones del arte parietal, contrapuestos a obras modernas. Lo hará en colaboración en el British Museum, del que procederá también la selección de dibujos españoles, del Renacimiento a Goya, que mostrará el Museo del Prado en marzo.



En ese mes vendrá a CaixaForum Madrid Antes del diluvio. Mesopotamia, 3500-2100 A. C., que está ahora en Barcelona. La misma entidad organiza, con el Musée du Quai Branly (se vio allí en 2012), Maestros del caos, que buceará en las fuerzas del desorden y lo carnavalesco a través de importantes piezas etnográficas y de artistas contemporáneos. Saltaremos al siglo XVII para descubrir en el Museo del Prado (en marzo) a un artista excepcional: Juan Fernández "El Labrador", pionero del género del bodegón en España, cuyas obras están en su mayoría fuera del país y en colecciones particulares. Y Bice Curiger reflexionará sobre esa época en Deftig Barock. De Cattelan a Zurbarán, en el Guggenheim Bilbao en junio, haciendo también dialogar obras históricas y contemporáneas.



Van Gogh: Paisaje bajo un cielo agitado, 1889

CaixaForum Barcelona explorará las relaciones entre Japón y España desde el siglo XVI en Japonismo. La fascinación por el arte japonés a finales del siglo XIX (junio), celebrando el año dual España-Japón. La Fundación Mapfre de Madrid estudiará otro tipo de exotismo en Luces de bohemia (febrero), sobre la gestación del mito del artista bohemio y la imagen de los gitanos. Al tiempo, inaugurará un nuevo repaso a los Impresionistas, postimpresionistas y el nacimiento del arte moderno, con obras del Musée d'Orsay; le hará competencia el Museo Thyssen de Madrid con Impresionismo y aire libre. De Corot a Van Gogh (también en febrero), que desvelará los ancestros del plenairismo desde 1780 y durante el siglo XIX. Poco después, en junio, profundizará en la obra de unos de los maestros del Impresionsmo, Camille Pissarro, recorriendo los lugares donde vivió y trabajó.



El espectador activo

Vayamos ahora a por las colectivas. De Picasso a Dubuffet. El arte en guerra. Francia 1938-1947, será la muestra magna del Guggenheim Bilbao en marzo, con más de 400 obras de 120 artistas. El Thyssen dará cuenta del hiperrealismo en abril, apoyándose en las obras del galerista Louis K. Meisel, y CaixaForum en Seducidos por el arte. Presente y pasado de la fotografía, estudiará las relaciones entre ambos medios creativos desde el siglo XIX hasta hoy. Será en febrero en Barcelona y en junio en Madrid. Tenemos pocos detalles sobre la próxima edición de PhotoEspaña pero girará, orquestada por Gerardo Mosquera, sobre el tema Cuerpo. Eros y políticas. Veremos obras de Shirin Neshat, Edward Weston y Harry Callahan, entre otros.



El CAAM de Las Palmas se volcará en marzo en la pintura con On Painting, que ocupará todos los espacios interiores y exteriores del centro, con 70 artistas... y una docena de intervenciones site-specific, que encontraremos, asimismo, en Arqueológica, comisariada por Virginia Torrente para Matadero Madrid: un ejercicio de antropología actual. En otra línea pero coincidiendo en el título, tendremos en el MEIAC de Badajoz en febrero (Ready) Media. Hacia una arqueología de los medios y la invención en México, sobre los vínculos entre arte y tecnología, en forma de serie audiovisual de casi 24 horas de duración, con 200 obras y 7 programas.



Particular interés tiene el proyecto de Artium de Vitoria No tocar, por favor, comisariado por Jorge Luis Marzo, que vigilará en mayo, con ayuda de un equipo de artistas españoles, los mecanismos de autoridad y disciplina de los museos y la relación del público con las obras de arte. En una dirección similar, Javier Hontoria provocará al espectador con Out of the Blue, en el CA2M (Móstoles) en mayo para que desarrolle sus propias estrategias de interpretación de las obras, al margen de las imposiciones de artistas y comisarios.



Eulàlia Grau: Interior de un avión (etnografía), 1973, 1889

La Fundació Joan Miró de Barcelona investigará de la mano de Neus Miró, en Insomnia (marzo), qué aspectos del cine se han convertido en motivos experimentales para artistas que trabajan, en su mayoría, con vídeo y cine; se prestará atención a las relaciones entre espectador y proyección, y entre imagen fija y en movimiento. LABoral de Gijón, en Realidades elásticas en abril, se interesará por los cambios en los hábitos culturales, y en particular en el acceso interactivo a la obra de arte producidos por la revolución digital.



En Da2 de Salamanca, Paco Barragán se propone en De madonna a Madonna abordar la construcción de la identidad femenina a través de diferentes esferas, desde la maternidad a la religión. Y devoto se pone el IVAM con Arte y religiosidad, en enero, con obras del museo y de otras colecciones valencianas.



El Museo Reina Sofía, en Madrid, invitará a Patricia Phelps de Cisneros, patrona en la nueva Fundación del museo, para que dé a conocer su colección en enero, y poco después, coincidiendo con ARCO, se inaugurará en la Fundación Banco Santander, en Madrid, una selección de la Colección Cranford, propiedad de Muriel y Freddy Salem basada en escena artística londinense.



¿Más artistas españoles?

Me parece encontrar en estas previsiones más exposiciones individuales de artistas españoles que otros años. Aunque sin ser muchas, lo celebro. Quizá sea efecto de la crisis. Se revisará la trayectoria de algunos artistas que dejaron huella en nuestra contemporaneidad. Los dibujos de José Gutiérrez Solana se expondrán en la Fundación Botín en abril, y las fotografías que realizó Ortiz Echagüe en el Norte de África entre 1906 y 1916 se conocerán al completo en el Museu Nacional d'Art de Catalunya en Barcelona. Y, como siempre, Picasso. Su museo en Barcelona hará una revisión de sus autorretratos en mayo, y el de Málaga evocará los orígenes malagueños del artista en febrero. Pero, este año, también está Dalí, que batirá records de visitantes con la gran antológica de 200 obras que llegará en abril desde el Centro Pompidou al Reina Sofía. El IVAM de Valencia, por su parte, exhibirá los dibujos eróticos de Jorge Oteiza, en junio, en su mayoría inéditos.



Antoni Tàpies será doblemente homenajeado en Barcelona: en su Fundación se arbitrará un proyecto agonístico, Contra Tàpies, que confrontará su obra con los contextos artísticos en los que se inscribió en su larga trayectoria, incluyendo la actualidad; el MNAC y la Fundación compartirán Tàpies, desde el interior, que incluirá obras pertenecientes a sus herederos, algunas desconocidas.



Pero quizá la exposición más esperada sea la de Cristina Iglesias en el Museo Reina Sofía en febrero, que nos permitirá repasar los logros de una de nuestras artistas más internacionales. Algunos veteranos regresarán al ruedo: Eduardo Arroyo, en el CAC (donde expondrá también Rosa Brun), con sus pinturas de la última década, Rafael Canogar (una retrostectiva) en el IVAM y Eulália Grau en el MACBA en febrero. En el Museo Lázaro Galdiano de Madrid, Bernardí Roig toma el relevo en la línea de exposiciones que dialogan con la colección del museo; un ejercicio que él ya realizó en Ca'Pesaro en 2009. Blanca Muñoz instalará sus esculturas en la Sala Alcalá 31; la Comunidad de Madrid mostrará, también, las últimas fotografías de Aitor Ortiz y una retrospectiva de Laura Torrado en el Canal de Isabel II. Cristina Lucas ocupará la sala frigorífica de Matadero, en Abierto x Obras en junio, y además expondrá en el CAB Burgos en enero. Este centro dedica su primer ciclo de exposiciones a artistas españoles: con Lucas, Charris + Lejarraga, y Eduardo Gruber.



El Da2 expondrán Ester Partegàs, Silvia Bermejo y Félix Fernández. En la Fundació Joan Miró, Julia Montilla en febrero, que desplegará en Espai 13 su estupendo proyecto sobre las apariciones marianas; a continuación, Usue Arrieta y Vicente Vázquez explorarán, entre el documental y la ficción, el mundo del deporte y su relación con el progreso. En el CAAC de Sevilla, Jesús Palomino intervendrá en el Espacio 2 en abril, y en el Nivell Zero de la Fundació Suñol de Barcelona se sucederán exposiciones de Luz Broto (a partir de una acción realizada en el Canòdrom) y Carmen Díaz. En el Museo Patio Herreriano, además de las muestras de Ignacio Llamas y Marina Núñez, que se acaban de inaugurar, se abrirá un nuevo programa, El lienzo MPH, con intervenciones de artistas sobre una pared del museo; la primera será Françoise Vanneraud. En Artium, Iñaki Larrimbe ironizará sobre el turismo cultural en mayo. Pero la protagonista del año artístico será Lara Almarcegui, que representará a España en la Bienal de Venecia y que presentará en el MUSAC en enero un nuevo proyecto sobre un Parque fluvial abandonado en León.



Vuelta al mundo en 180 días

El celebérrimo Ai Weiwei tomará en enero con sus obras en cerámica y porcelana la antigua fábrica de loza que es el CAAC, donde expondrá, seguidamente, Lotty Rosenfeld, artista chilena del grupo CADA. Por su parte, ARCO traerá a Madrid una pequeña avanzada de la armada turca. Además de las diez galerías invitadas a la feria, tendremos la colectiva Aquí juntos ahora en Matadero, y las individuales de Halil Altindere en CA2M y Ali Kazma en La Casa Encendida. La atención a lo internacional se centra más en lo actual que en lo histórico, que sólo frecuenta Mapfre, con Giacometti en junio y el magnífico fotógrafo mexicano Manuel Álvarez Bravo en febrero. El EACC de Castellón pondrá en valor el trabajo fotográfico que el suizo Beat Streuli hizo recientemente en la ciudad. En Barcelona, Fabra i Coats revisará por extenso los libros del minimalista estadounidense Peter Downsbrough. En el CAAM, ya en marzo, se verán las pinturas del argentino Fabián Marcaccio y en el CAC malagueño los dibujos del belga Rinus Van de Velde y las instalaciones del indio Subodh Gupta. Conoceremos la evolución de la pintura del alemán Albert Oehlen en La Casa Encendida y los dibujos de Lawrence Wiener en el MACBA en marzo, que también revisará la trayectoria de la palestina Ahlam Shibli.



Gran expectación por el proyecto de la italiana Rosa Barba, que extenderá sus sutiles instalaciones fílmicas a los patios del MUSAC en enero, y espectáculo asegurado en la invitación a Los Carpinteros, cubanos, a Abierto x Obras. Muchas ganas también de ver la exposición del británico Darren Almond en la Sala Alcalá 31, que traerá no sólo sus fascinantes fotografías de naturaleza. Y la del actor-artista Dennis Hopper, En el camino a Málaga, donde mostrará sus fotografías, en el Museo Picasso. Y la de Robert Adams, uno de los New Topographers estadounidenses, en el Reina Sofía en enero.



El CGAC de Santiago dedica todo el semestre a monográficas de artistas extranjeros: el bricoleur portugués Miguel Palma, el fotógrafo experimental canadiense James Welling, el británico Graham Gussin, el brasileño Ricardo Bausbaum y una retrospectiva del conceptualista argentino Víctor Grippo.



Vayan haciendo planes para viajar.