Ulises Carrión en su librería Other Books and So
El Reina Sofía acoge la mayor retrospectiva del artista mexicano desde su prematura muerte. Querido lector. No leas recorre a través de 350 piezas todas las etapas de su producción que se puede resumir en una sola pieza: El archivo OBASA.
El nombre que se le da a la exposición revela mucho de lo que el espectador se puede encontrar en las salas de las que cuelgan hasta 350 piezas. En su obra hay mucho archivo, mucho panfleto, mucho folleto que forman parte de esa investigación que llevó a cabo porque lo que le interesaba era eso, la forma. Querido lector. No lea hace alusión, además, a la estructura y al lenguaje, dos de los pilares que configuran su obra. Por eso se podría afirmar que su obra es una única pieza que lo engloba todo: El archivo OBASA. "Trabajar con Carrión era complicado y tuvimos discusiones hasta el amanecer", comenta Guy Schraenen, comisario y amigo del artista. Pero lo que le hacía especial es que "siempre fue independiente del mercado del arte tanto institucional como financieramente", apunta.
Libelo, una publicación sobre arte correo
Carrión escapó a los formatos y a las disciplinas artísticas tradicionales gestando una trayectoria ajena a lo lineal, "un tanto anárquica en su procedimiento", apunta Manuel Borja-Villel, director del Museo. Su revolución pasó por cuestionarse el arte conceptual, considerado de académico, y partir de la literatura. Evolucionó de la poesía a los "bookworks, una disciplina en la que lo importante es la materia del libro, el material con el que está hecho, el diseño, la manera de leerse, sus modos de distribución", dice el director, y no el contenido de los mismos.En un momento en el que los medios de comunicación comienzan a hacerse con el espectro y a tener el dominio, Ulises Carrión usa el libro, un objeto anacrónico, para hacerse entender. "Sus libros fueron importantes por dos razones. Primero porque examinan las estructuras sociales con las que nos comunicamos y, en segundo lugar, porque buscan espacios que se relacionan, espacios autogestionados como su librería Other Books and So".
Esta librería-galería fue, de hecho, la precursora de este tipo de proyectos, un lugar especializado en publicaciones de artistas. Pero no solo eso. Libros que eran arte a los que Carrión bautizó como "pseudolibros, cuasilibros, libros concretos, libros visuales, conceptuales, libros instrucción". También, en alusión a And So, contaba con una selección de discos, periódicos, postales, carteles, partituras y revistas. De ahí que el archivo OBASA sea considerada su única pieza.
Vista de la sección dedicada a su amiga la actriz Lilia Prado
Para este último, el artista underground estableció correspondencia con diferentes artistas de todo el mundo para participar en proyectos de arte correo iniciados por otros colegas. Así, a través de las postales, cartas y folletos de intervenciones se percibe la implicación personal y compromiso con las nuevas estrategias culturales para el control de la producción y distribución del arte. Porque, como bromea el comisario: "la obra de Ulises Carrión es como la cocina de un restaurante, no ves el trabajo que hay detrás de cada plato".
@scamarzana