Vista de Gabinete en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando

Se inaugura la segunda edición de Gabinete, Feria del dibujo y la estampa, en la Real Academia de Bellas Artes. Durante tres días dibujos, libros de arte y estampas que abarcan desde el siglo XVII hasta la actualidad, se mostrarán en la feria.

Decía Miguel Ángel que el dibujo es "la raíz del arte". Esa es la premisa con la que Gabinete presenta su segunda edición, que podrá visitarse desde el viernes 26 al domingo 28 de junio en Madrid. El objetivo de esta feria, es difundir el mundo del papel entre el gran público y fomentar el coleccionismo del arte del dibujo, un soporte que poco a poco se va haciendo hueco también en las grandes ferias. "Intentamos incidir en la importancia del dibujo y la estampa, ya que no ha gozado del predicamento en España que sí ha tenido en otros países", comenta durante la presentación, el comisario y director de la feria, Víctor de Campo. "Queremos crear una plataforma que en poco tiempo sea competitiva con otras ferias del mismo sector", recalca.



Los veinticinco expositores de esta segunda edición están divididos en cuatro espacios. Nada más entrar a Real Academia de San Fernando, a la izquierda, el bloque de contemporáneo -Arte Contemporáneo y siglo XX-. Allí galerías como La Caja Negra, N2 Galería o Benveniste Contemporary. A la derecha, las áreas destinadas a Antiguo y siglo XIX y Libro de Arte y Bibliografía, donde las galerías como Caylus, Frame y Ana Chiclana, convivirán con librerías especializadas en ediciones especiales o incunables como Astartola, Bardón o Guillermo Vázquez. Todas ellas presentarán una selección de obras de artistas que van desde Richard Serra, Luis Gordillo, Pablo Picasso, Salvador Dalí hasta Benjamín Palencia, Alonso Cano o Francisco de Goya.



Entre las piezas más destacadas hay un pequeño retrato de Francisco de Pisa de El Greco, que hasta hace tres años estaba atribuido a su hijo o a un seguidor. Fue gracias a la exposición realizada en 2014, con motivo del 400 aniversario de la muerte del pintor, El Griego de Toledo, comisariada por Fernando Marías, cuando esta pieza, junto con otras tres de la misma serie, se atribuyeron al griego. Esta pequeña pieza se puede ver en la galería Caylus y su precio es de 350.000 euros. Además, y de forma inédita, la galería Artur Ramon, saca a la venta 66 dibujos de Unamuno (con un precio de 15.000 euros). Fueron realizados a partir de 1892 y en ellos, el escritor muestra su vida cotidiana con un retrato de su hijo Fernando, junto con bocetos de animales o una vista de Salamanca.



Otra importante pieza, que sale a la venta de forma conjunta entre Artur Ramon Antiquats y Palau Antiquats, ambas de Barcelona. Es el dibujo a lápiz en piedra negra de San Antonio, de Murillo. El boceto, uno de los más reproducidos del pintor sevillano, fue un estudio para el cuadro que realizó para la Capilla del Santo en la Catedral de Sevilla en 1656. Con un precio de 300.000 euros, no se mostraba al público desde hace más de setenta años, lo que, unido a que ningún dibujo de Murillo ha sido puesto a la venta desde el siglo XIX, da cuenta de su valor.



Bartolomé Esteban Murillo: Dibujo de San Antonio, 1656

Entre los artistas actuales está Juan Zamora, recientemente galardonado con el Premio Fundación Princesa de Girona de Artes y Letras 2017. En Wop Cabinet, presenta su serie Emerge, realizada específicamente en la ciudad de Roma. De la artista Tacita Dean la galería Niels Borch Jensen Editions, a única galería extranjera de la feria, presenta sus característicos fotograbados de frágiles narrativas visuales. El Taller del Prado pone una nota de color y fantasía con las fotolitografías de la artista madrileña Ouka Leele, de quien encontramos sus características fotografías en blanco y negro pintadas a mano con acuarela.



Dividida en dos salas de la Real Academia, el formato de salón-boutique ha sido diseñado por el estudio del arquitecto Juan Herreros quien ha realizado un proyecto buscando "la superposición de espacios que rompe con las ferias tradicionales que son como mercados, con pasillos y puestos de fruta", comenta el Herreros. "Hemos querido romper con la idea de stand donde el visitante no está invitado y donde el problema de 'pasar de largo' frente al galerista no exista". Se trata de una arquitectura efímera, sin espacios cerrados y con un aire industrial, donde el visitante pasea por todos los espacios haciendo un recorrido en zig-zag, por el que se "entra" en cada espacio. La idea es hacer la feria más accesible.



De forma paralela, se organiza la Primera Jornada de Puertas Abiertas de los Gabinetes de Dibujos y Estampas de Colecciones y Museos de Madrid. Trece instituciones como el Museo del Prado, el Palacio Real, el Museo Cerralbo, el Museo del Romanticismo, la Biblioteca Lázaro Galdiano o la Calcografía Nacional, participan en esta iniciativa para mostrar diferentes obras de arte que dada su fragilidad y su conservación especial, pocas veces son expuestas. Así mismo, una mesa redonda, liderada por el director de la feria, Víctor de Campo, quiere profundizar en la labor de las instituciones en relación a este tipo de piezas.