Las ganas se empiezan a notar entre los galeristas. Tras la apertura de las librerías es el turno del arte, de encender las luces, abrir las puertas y retomar, poco a poco, el ritmo. El cierre pilló a algunas con las exposiciones recién inauguradas y otras con la apertura al caer. Todas ellas quieren recuperar el aliento y poder mostrar las novedades que nos tenían preparadas. Por ahora, en Madrid y en Barcelona se reanuda la actividad a partir del próximo lunes 11 de mayo mientras que Baleares y la Comunidad Valenciana mantendrán la actividad a puerta cerrada.
El Consorcio de galerías de arte contemporáneo de Madrid asegura que durante estos días las galerías, “conscientes de la importancia histórica de este momento”, no se han quedado de brazos cruzados, al contrario, han seguido presentes a través de las redes sociales con nueva programación digital. “Hemos mantenido nuestra labor de apoyo y de estímulo a la creación. Sabemos que ese es nuestro papel, junto con el de servir de escaparate para que todo el mundo pueda disfrutar de los resultados”, dice la misiva.
Además, no solo las galerías han estado nutriendo nuestro espíritu sino que los artistas son también agentes protagonistas que “se han reseteado, replanteándose muchas certezas que afectaban hasta ahora a su trabajo. Han reflexionado sobre la nueva realidad, sobre el arte como camino para plasmarla y sobre su propia obra y su lenguaje personal como vehículo para trasmitir su visión de este nuevo mundo al que nos vamos a enfrentar”.
¿Cómo se realizará la vuelta a esta nueva normalidad?
Idoia Fernández, presidenta del Consorcio de galerías de arte contemporáneo de Madrid, prevé que en torno al 90% de galerías de la capital abrirá a principios de la semana que viene. “Hay galerías que tenían pendiente de montar alguna exposición, nosotros la teníamos inaugurada así que el lunes encenderemos la luz”, comenta la también directora de la galería NF. Abrirán, acorde a la normativa, con un 30 % de su aforo aunque avanza que estas medidas afectarán a las inauguraciones, charlas o talleres que acompañan a las exposiciones. “Un día normal no tenemos problemas de aforo, aunque sí los habrá de cara a Apertura Madrid o con los encuentros con artistas”. En este sentido, no sufrirán estas restricciones tanto como los cines o los teatros y, por lo tanto, “los debates y charlas los pospondremos”.
En la capital, García Galería volverá el 11 con la obra de Francesc Ruiz, exposición que había inaugurado antes de la expansión de la pandemia, Juan Silió lo hará el 12 con la muestra de Miguel Ángel Tornero y ese día es también el escogido por Puxa Gallery, que reanuda la temporal En passant de Thomas Nölle que se podrá visitar hasta el día 16. Para la última semana del mes podremos ver De lo tangible a lo etéreo, una temporal con obra reciente de artistas como Irma Álvarez-Laviada, Ramón Isidoro, Rafael Jiménez Reyes, Silvia Lerín, Santiago Serrano, Mar Solís, Paula Valdeón y Tadanori Yamaguchi.
Un día más tarde, el 13, F2 encenderá las luces con Dea Roma, exposición del artista Álvaro Negro que se prolongará hasta el 23 de mayo y tan solo cuatro días más tarde, el 27, veremos Umbra, la nueva individual de Xisco Mensua. Sin embargo, los chicos de Espacio Mínimo y Blanca Berlín atenderán a visitantes y posibles compradores bajo cita previa mientras que el 26 de mayo será el regreso de Jaime Davidovich al espacio que Mira 1 tiene en la calle Argumosa de Madrid. Otras como Max Estrella esperará hasta junio para poner en marcha la actividad y la veterana Juana de Aizpuru se muestra prudente y no comenzará su nueva temporada hasta que el Ministerio indique si las galerías entran en la categoría de pequeño comercio o de sala de exposiciones.
La situación fuera de la capital es similar y en Gijón la galería Gema Llamazares empezará su desconfinamiento bajo cita previa con De dentro a fuera, de Guillermo Peñalver, que estará abierta hasta el próximo 10 de junio. Y los murcianos T20 también han anunciado que, por el momento, la visita a su espacio será con cita.
La vuelta a la nueva normalidad en Barcelona
El gremio de galerías de arte de Barcelona también ha anunciado que el próximo día 11 podrán retomar la actividad siguiendo las medidas higiénico-sanitarias necesarias. “Es el momento de hacer una reflexión de aquello que el público encuentra en nuestros espacios y el esfuerzo que implica como galeristas”, aseguran en un comunicado. “Sabemos -continúa el escrito- que no somos un producto de primera necesidad, a pesar de que esta crisis, con el confinamiento, nos ha ofrecido un nuevo paradigma que tenemos que ser hábiles y aprovechar”.
En su caso la Generalitat ha considerado al gremio como pequeño comercio y las reuniones las han compartido con los libreros. “Éramos los fáciles”, asegura Àlex Nogueras, presidente de Art Barcelona y codirector de la galería Nogueras Blanchard, que en Madrid reactivará la muestra de Ana Mendieta y en Hospitalet lo hará con Daniel Chust Peters. Se refiere a que en una librería se tocan los libros mientras que en una galería no se puede hacer lo mismo. “Como no se pueden tocar las obras no son susceptibles de contagio, a no ser que alguien estornude sobre ella. Tampoco tenemos una caja registradora para vender, la venta se hace mediante el diálogo y se puede mantener la distancia. Nuestros problemas son más logísticos, de transporte y entrega de piezas, no tanto funcionales”, subraya. Al igual que en el caso de Madrid las inauguraciones con público tendrán que esperar y seguirán las indicaciones de aforo y horarios para el público más vulnerable.
Hasta ahora hemos podido ver cómo el sector se ha volcado en las redes sociales pero, tal y como indican en el escrito, el mundo virtual es importante “pero no suficiente, sirve para seducir al espectador, pero queda corto para nuestras expectativas, tal como sabemos que una exposición virtual nunca ofrece a los sentidos la riqueza de contemplar las obras originales en una galería”.
De momento, otros puntos geográficos como Baleares o la Comunidad Valenciana esperarán unos días para tomar decisiones según vaya avanzando el virus. Respecto a la supervivencia de las galerías tanto Nogueras como Fernández aseguran que es pronto para saberlo. “Depende de la capacidad de mantenerse de cada galería. No vamos a abrir y vender inmediatamente porque hay miedo y el mercado internacional también está parado. Prevemos una temporada difícil así que abriremos y esperaremos a ver si finalmente hay ayudas”, comenta Idoia Fernández. Algo que confirma también Àlex Nogueras y el gremio de galeristas de Barcelona afirmando que necesitan el apoyo, “tanto de las administraciones públicas como de los ciudadanos”.