El Museo Reina Sofía acaba de incorporar dos obras más de Antonio López a su colección. Se trata de un retrato de sus abuelos y otro de sus padres, fechados en 1955 y 1956, respectivamente, poco después de que el destacado pintor realista finalizase su formación en la Academia de Bellas Artes de San Fernando. Cuando pintó el primero, el artista nacido en Tomelloso (Ciudad Real) tenía solo 19 años.

Aunque se trata de una de las primeras adquisiciones del Reina Sofía con Manuel Segade en la dirección del museo, la decisión fue tomada mucho antes de que él llegara. El Ministerio de Cultura, a través de su Dirección General de Bellas Artes, ha comprado ambas obras a una colección particular por 350.000 euros (175.000 cada una), en virtud de un informe positivo que emitió la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes el 19 de octubre de 2021. Posteriormente, el Patronato del Museo Reina Sofía dio el visto bueno a la compra el 25 de octubre de 2022, dos meses antes de la marcha del anterior director, Manuel Borja-Villel, según adelantó eldiario.es.

El cuadro en el que López retrató a sus abuelos lleva por título sus nombres, Sinforoso y Josefa. También es conocido como Matrimonio y tiene unas dimensiones de 62,5 x 88,5 cm. De igual modo, la obra en la que aparecen retratados sus padres se titula Antonio y Carmen o Matrimonio joven y tiene una superficie similar al anterior: 60,5 x 83,5 cm. 

"En estas obras pictóricas aparecen de modo recurrente sus allegados y los escenarios familiares de su vida. Se trata de una obra figurativa, de larga tradición en el siglo XX, e intimista, detenida en los aspectos más humildes y nimios de la cotidianidad", explicó el conservador Salvador Nadales en su valoración de las obras para el Reina Sofía. "En efecto, los temas de esos años centrales de la década de los cincuenta están aún muy vinculados al Tomelloso natal de López quien retrata a esas parejas abstraídas, de aire enigmático, que nos remiten a un mundo conocido".

Las dos obras ya se habían expuesto anteriormente en el Museo Reina Sofía, y una de ellas, Antonio y Carmen, ya se encontraba en depósito temporal en el principal museo estatal de arte contemporáneo desde 2013.

El Museo Reina Sofía tiene en su colección varias obras de Antonio López, aunque actualmente no exhibe al público ninguna de ellas. De la etapa de formación de Antonio López, el museo solo tenía una obra hasta ahora: Los novios, de 1955. El museo afirma que esta adquisición contribuye a mejorar la representación de la colección pictórica española de corte realista de los años cincuenta del siglo XX en la colección del museo.

Aunque el Reina Sofía dedicó una exposición monográfica a Antonio López hace tres décadas, actualmente ninguna obra de Antonio López puede verse en la exposición permanente del Reina Sofía. En la última reordenación del recorrido expositivo por la colección del museo, realizada por Borja-Villel en 2021, la de López fue una de las ausencias más importantes.

Por el momento, el museo no ha indicado si esta compra significa el regreso de uno de los pintores contemporáneos más populares de España a las salas del Reina Sofía. La decisión corresponde al nuevo director del museo, Manuel Segade, que aún no ha presentado su proyecto para el museo ante los medios de comunicación.

La última gran exposición monográfica dedicada a Antonio López tuvo lugar en 2011 en el Museo Thyssen-Bornemisza, y tuvo un gran éxito de visitantes.

En una entrevista con Europa Press el pasado 23 de febrero, Antonio López mostró su desacuerdo sobre la ausencia de sus obras y, en general, la poca representación de la figuración pictórica en las salas del Museo Reina Sofía. "A mí eso no me gusta", declaró, y aseguró que estaba "harto" de intentar "demostrar el valor" de ese arte en la historia del arte contemporáneo español.