La artista multidisciplinar Rebecca Horn ha fallecido este sábado en Alemania a los 80 años. La galería Pelaires de la isla de Palma ha comunicado en redes sociales el fallecimiento de la artista, que forma parte de su colección y ha calificado la pérdida como "insustituible". 

"Artista de la galería Pelaires, en sus películas, esculturas e instalaciones abordó principalmente la obsesión por el cuerpo y su relación con la máquina", rezaba la publicación. Pionera del arte performativo y poeta, tuvo una relación muy especial con Mallorca, donde residió durante años.

Su obra forma parte de las colecciones de destacados museos como el Solomon R. Guggenheim Museum de Nueva York, el Irish Museum of Modern Art de Dublín o TATE Londres. También está presente en la Colección de Es Baluard Museu con las obras La Ferdinanda X-Ray y Three Graces in Blue expuesta de manera permanente en uno de los patios del Museo.

'Three Graces in Blue', 1993 (Colección Es Baluard Museu), de la artista Rebecca Horn

Nacida en Michelstadt (Alemania), Horn estudió en la Academia de Bellas Artes de Hamburgo, pero tuvo que marcharse un año más tarde por un problema pulmonar. En 1964, mientras vivía en Barcelona aislada y débil por la enfermedad, practicó el dibujo sobre papel debido a sus limitaciones físicas. Solo trabajaba con materiales suaves y con pintura de madera que utilizaba para pintar en la cama.

Cuando salió de su traumático aislamiento, comenzó a crear esculturas y extensiones con madera de balsa y tela. Eran sus primeras esculturas corporales, la gran obsesión de su obra.

Sus últimos trabajos representaban instalaciones cinéticas que proponen juegos a través de reflejos producidos por espejos, lentes, luz, música y la interacción con el espectador. Exploraba diversas formas de expresión referidas a las emociones, las fobias y la sensibilidad.

Su arte discurrió en clave metafórica, con alusiones al sueño y la leyenda. La relación del cuerpo con la máquina era uno de los puntos clave de reflexión y siempre fue reivindicativa, con una fuerte carga social y política.

Horn fue reconocida con premios como el Documenta Preis, Kassel (1986), el Carnegie Prize, el Carnegie International, el Pittsburgh (1988), el Barnett and Annalee Newman Foundation Award, Nueva York (2004), el Praemium Imperiale Prize de escultura, Japan Art Association, Japón (2010) y el Grande Médaille des Arts Plastiques de la Académie d'Architecture de Paris (2011).