Exposiciones

Autorretrato de M. Hugonnier

16 marzo, 2006 01:00

Folles Pensees 3, 2005

Travelling Amazonia. Nogueras Blanchard. Xuclà, 7. Barcelona. Hasta el 25 de marzo. De 5.000 a 18.000 e.

Marine Hugonnier (París, 1969) realizó su primera exposición en España en el CGAC, en 2001. Aquélla ya fue una completa aproximación a una joven artista cuya proyección ha ido confirmando el paso del tiempo. Ahora presenta en Barcelona su último proyecto, Travelling Amazonia, una película y tres fotografías. Aunque no se muestre al completo, este trabajo forma parte de una trilogía, con Ariana (2003) y The last tour (2004), una serie que se ha calificado de reflexión personal o subjetiva sobre el paisaje y la historia.

Travelling Amazonia es un trabajo que versa sobre Brasil. Tres fotografías preceden a la sala de proyección. Marine Hugonnier explicaba que representan los enclaves concretos -la costa y la playa- y el momento del día exacto en que supuestamente los marinos portugueses descubrieron Brasil. Este preámbulo que abre Travelling Amazonia connota una idea de aventura, exploración, descubrimiento. Nos indican que el filme que se proyecta es también un buscar o un descubrir un espacio, como aquellos exploradores del s. XVI.

La película tiene como telón de fondo una autopista abandonada que cruza la selva amazónica. Un proyecto faraónico, iniciado por el gobierno brasileño en los años 70, que pretendía atravesar el país de costa a costa y que finalmente quedó inconcluso. Este fracaso tuvo, sin embargo, muchísimas consecuencias políticas, económicas y ecológicas. En la película de Hugonnier aparece esta pista de tierra en medio de la selva, así como los personajes que la pueblan, como una especie de ruina moderna, con una dimensión romántica y una suerte de melancólica belleza.

Frente lo que cabría esperar -un documental informativo sobre la selva amazónica y su degradación, un tema mediáticamente caliente- Hugonnier realiza un filme poético, abierto, contemplativo… Brasil y la autopista parecen más bien un escenario, se diría incluso que la presencia de Marine Hugonnier es ajena al entorno. Su mirada es la del extranjero y buena parte de la cinta es autorreferencial. En aquel contexto exótico, la película consiste -en parte- en la construcción por artesanos locales de un artilugio para filmar un travelling. éste tampoco se concluirá y el artefacto queda abandonado en medio de la autopista fantasma.

Aunque una obra así está abierta a muchas interpretaciones, yo observo un paralelismo entre este proyecto fracasado de autopista y el trabajo de Marine Hugonnier. El territorio que explora el filme no es tanto el Brasil como una especie de autorretrato del artista contemporáneo. El absurdo de la autopista abandonada se relaciona con la dificultad o imposibilidad del creador contemporáneo para proporcionar una imagen del mundo. Como en la película de Herzog, Fitzkarraldo, o en El corazón de las tinieblas, de Conrad, hay un duelo prometeico entre el creador y la naturaleza, la "civilización" y la selva, que está siempre abocado al fracaso.