El IPCC llega a España
Valencia cerrará el debate sobre las bases científicas del cambio climático
8 noviembre, 2007 01:00El Museo de las Ciencias de Valencia será testigo, a partir del lunes, de la presentación del IV informe del Panel Intergubernamental del Cambio Climático, reconocido recientemente, junto a Al Gore, con el Premio Nobel de la Paz. El catedrático de Física de la UAH Antonio Ruiz de Elvira analiza el contenido que abordarán los cuatro grupos de estudio que lo integran. Además, recorremos las exposiciones del V Encuentro Hispano Francés que sobre el cambio climático ha organizado la Fundación Santander.
El IPCC es un grupo de científicos que, bajo el mandato de Naciones Unida, se reúnen cada 4 ó 5 años para revisar las publicaciones científicas con aval (peer reviewed publications) que contienen teorías, datos y resultados de experimentos de la ciencia del clima, con el objetivo de generar cuatro informes resumen o de síntesis sobre lo que en cada momento se sabe con alta probabilidad de certeza sobre el problema del cambio climático.La ciencia no es dogmática y en la misma hay siempre voces que sugieren volver a estudiar ciertas cuestiones. Sus afirmaciones deben pasar siempre por el filtro constante del experimento, y el consenso de resultados representa una medida del ajuste de aquellas a éste. Así la segunda ley de Newton la comprobamos todos los días en nuestros coches, por ejemplo, de manera que el consenso sobre su validez es universal.
Las leyes del clima, que vamos descubriendo y mejorando día a día, son aún conocidas sólo por una pequeña parte de la humanidad, y por ello es importante destacar el consenso o disenso entre los que las conocen, mientras se va ampliando el número de estos últimos. El clima es un sistema complejo, en el cual no vale hablar de cada uno de sus componentes aislados entre sí. Sólo se entiende el sistema climático si se considera en su totalidad, atmósfera, océanos, hielo, suelos, biosfera, seres humanos, sol; antes, ahora, después; aquí y en todo el planeta. En este sentido, las principales conclusiones de este cuarto informe del IPCC podrían resumirse en los cinco puntos siguientes:
1. Aumento de la concentración de CO2 en la atmósfera
Existe la seguridad completa de que la concentración de CO2 en la atmósfera ha aumentado un 36% sobre el valor de 1880, 280 ppm, el mas alto del último millón de años, de manera que estamos hoy, con 380 ppm, en niveles no alcanzados en los últimos 20 millones de años. Este es un hecho medido por tres observatorios base en el mundo, uno de ellos en Izaña, en las Canarias, y por otros muchos laboratorios repartidos por el planeta.
El CO2, con otros gases, como el metano y los óxidos nitrosos, menos los efectos de los aerosoles, suponen hoy un forzamiento radiativo neto de 1.6 w/m². Esto quiere decir que atrapan estos watios por metro cuadrado de superficie del planeta de la radiación infrarroja que éste emite hacia el espacio, y por lo tanto lo calientan. El incremento del forzamiento radiativo del CO2 ha sido del 20% en los once años entre 1995 y 2005, el mayor de los últimos 200 años. Esto quiere decir, y así se comprueba en otros estudios, que el calentamiento se está acelerando. En los últimos 200 años la única fuente de CO2 distinta de las que han venido funcionando desde hace millones de años, incendios de bosques y emisiones volcánicas incluidas, es la quema de combustibles fósiles, que generan gas que no entra en el ciclo continuo de emisión/absorción.
2. Subida de la temperatura media global (TMG) del planeta y del nivel del mar
La diferencia entre la TMG media del periodo 1850-1899, y la del periodo 2000-2005 es de 0.76 ºC, pero la tendencia de subida en los últimos 50 años (0.13 ºC/década) es esencialmente el triple de la de los años 1905-1944. Observamos de nuevo aquí una aceleración del fenómeno, como corresponde a la aceleración del aumento de la concentración de CO2 en la atmósfera producido por la entrada de los países asiáticos en la economía de consumo.
Es un hecho que el nivel medio del mar ha subido 1.8 mm por año entre 1961 y 2003, pero de nuevo, entre 1993 y 2003 la subida ha sido de 3.1 mm/año. La aceleración del aumento del valor numérico de los indicadores climáticos es evidente empíricamente, y muy clara si consideramos que lo que hacen el CO2 y los demás gases traza es retener energía (calor) en la troposfera. Si aislamos cada vez mejor las paredes de una casa con calefacción suave pero constante, si impedimos que salga calor hacia afuera, la casa va aumentando su temperatura, y escuchamos los ruidos de las viguetas y de las escaleras al ir dilatándose con ese aumento.
3. Probabilidad elevada de la sensibilidad radiativa de la duplicación de CO2
Una mejora del informe actual sobre los anteriores es la asignación de una probabilidad superior al 90% a que la subida de temperaturas correspondiente a una concentración de 560 ppm (doble de la 1880) sea 3ºC mayor que la de los años en los que la concentración se mantuvo alrededor de 280 ppm. La subida de la TMG en las próximas dos décadas será de 0.4ºC, en cualquier escenario socioeconómico realista. El IPCC trabaja con 30 de estos escenarios. Podemos considerar dos de ellos: el A1FI, que implica un fuerte desarrollo basado en una intensificación del consumo de combustibles fósiles (FI), y el B1 que implica una estabilización de la población, una economía de servicios altamente eficiente en el uso de la energía y los materiales, y con energías renovables. En el escenario A1FI la subida de la TMG a finales del presente siglo sería de 4ºC, mientras que en B1 sería de 1.6 ºC. En el primer caso la subida de las temperaturas medias en España sería de 5 ºC mientras que en el segundo caso sería de 3ºC. Puesto que hablamos de medias, se entiende fácilmente que los extremos esperados en España en el primer caso serían de unos 7/8 ºC, mientras que en el segundo ascenderían a unos 5/6ºC. En el primer caso la temperatura media del Polo norte aumentaría entre 7.5 y 8ºC, mientras que en el primer caso lo haría entre 5 y 6ºC. Las subidas de temperatura en los trópicos serían la mitad que en el Polo Norte en cada caso. Estas subidas continuarían de cualquier manera a lo largo del siglo XXII.
4. Asimetría de temperaturas
El segundo grupo de trabajo del IPCC se ocupa de los impactos de los fenómenos encontrados por el primer grupo, el que acabamos describir. El tercer grupo se ocupa de las medidas para contener la subida de la TMG. Sobre impactos y medidas el IPCC no ofrece cuantificaciones, pero habla de probabilidades, que son casi obvias. Estas subidas de la TMG, y la asimetría de temperaturas entre trópicos y Polo Norte producirían un desplazamiento hacia el norte del sistema de corrientes atmosféricas y oceánicas de las latitudes medias, y un cambio en las lluvias estacionales en el áfrica al norte del ecuador. Se prevee una disminución notable (del 50%) de las lluvias en la región del Sahel y al sur del Sáhara. El desplazamiento hacia el norte del sistema de frentes de lluvias implicaría, si se mantiene la subida de la TMG, una disminución de un 75% de las lluvias suaves sobre España, y un aumento de las lluvias torrenciales y puntuales en el tiempo.
5. Derroche energético
Las medidas propuestas son también casi obvias. Se trata de mantener el nivel y calidad de vida en los países ricos y permitir que los países pobres accedan a esos niveles. Para ello el tercer grupo del IPCC recomienda medidas de eliminación del derroche energético (calefacciones con ventanas abiertas en invierno sería un buen ejemplo de esto), optimización de los recursos energéticos y una sustitución al ritmo más rápido posible de las fuentes fósiles de energía por fuentes renovables, esencialmente el Sol. Los cálculos del IPCC, y otros, indican que eliminación de derroche y sustitución de fuentes puede realizarse sin merma alguna de la calidad de vida de cada grupo social.