Image: La Fundación BBVA premia al creador de la lógica difusa

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Ciencia

La Fundación BBVA premia al creador de la lógica difusa

El ingeniero Lotfi Zadeh recibe el Premio BBVA Fronteras del Conocimiento por plantear una alternativa revolucionaria a la lógica clásica que ha tenido aplicaciones sociales y económicas

15 enero, 2013 01:00

Lotfi A. Zadeh

"Invención y desarrollo de la lógica difusa". Por este motivo al ingeniero electrónico Lotfi A. Zadeh (Bakú, Azerbaiyán, 1921) ha sido reconocido con el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en su quinta edición. Esta contribución revolucionaria ha hecho posible que las máquinas trabajen con conceptos imprecisos, como hacen los humanos, y logren resultados más eficientes y adecuados a la realidad. En los últimos 50 años, esta metodología ha generado más de 50.000 patentes sólo en Japón y Estados Unidos. La lógica difusa salva la distancia entre la lógica clásica y la realidad.

Al conocer la noticia del galardón, Zadeh ha explicado que el premio es un reconocimiento a la lógica difusa, que generó cierta controversia en el momento en el que fue planteada: "Hubo quien lo recibió con entusiasmo pero otros lo hicieron con escepticismo". La lógica clásica se basa en conjuntos claramente delimitados, definidos por el criterio de pertenencia inequívoca de sus elementos, como por ejemplo el conjunto de los números pares o el conjunto formado por los países miembros de Naciones Unidas.

Zadeh ha explicado el origen de la investigación que le llevó hasta la lógica difusa: "Siendo ingeniero, siempre tuve la convicción de que en las matemáticas estaban las respuestas a casi todos los problemas, pero me di cuenta de que la matemática clásica tenía limitaciones porque no sabía cómo abordar la imprecisión". Y para salvar esa distancia Zadeh tomó el modelo humano: "Los humanos tenemos una sorprendente capacidad de razonar y tomar decisiones basadas en información imprecisa y en un conocimiento parcial. El principal objetivo de la lógica difusa es formalizar esta capacidad".

Los seres humanos aplican de forma natural la lógica difusa a la toma de decisiones manejando datos imprecisos y ponderando el valor de cada elemento. La contribución de Zadeh ha consistido en establecer las bases de esta lógica y trasladarla a la toma de decisiones por parte de ordenadores y sistemas. Dejan así de ser meras máquinas de calcular para incorporar la capacidad de evaluar grados y matices de la realidad, adecuando a ellos la toma de decisiones autónoma o semiautónoma (sin intervención o con intervención mínima de los humanos).

La contribución de Zadeh ha tenido consecuencias también para los procesos industriales: ha simplificado el diseño, logrando productos más eficientes, más fáciles de utilizar y más flexibles a los cambios a la vez que ha reducido los costes de producción. Esto ha provocado el éxito y la implantación industrial de la lógica difusa.

En 1965 Lotfi Zadeh describió por primera vez los "conjuntos difusos" en una publicación que se convertiría en una de las más citadas del siglo XX, con más de 35.000 menciones. A partir de ahí se desarrolló la lógica difusa, desplazando de manera genial las fronteras del conocimiento. El acta del jurado subraya que Zadeh es "el creador de un nuevo campo de investigación que ha resultado de una gran utilidad en numerosas áreas de aplicación".

La controversia en torno a la lógica difusa comienza en su denominación: "Utilizar el calificativo difusa, que en inglés tiene una connotación negativa, era un hándicap de partida para que fuera bien recibido en la comunidad científica, pero era la palabra que mejor describía lo que yo tenía en mente. Esto resultó ser una rémora para que la teoría fuese aceptada. En Asia, sin embargo, difuso no es peyorativo, así que acogieron mejor mi trabajo, porque ellos no tienen la visión occidental -cartesiana- que limita todo a blanco o negro".

La lógica difusa abrió la puerta a la comprensión, por parte de los ordenadores y las máquinas y sistemas que se basan en ellos, de instrucciones imprecisas como 'frena suavemente' o 'refrigera hasta que el aire esté fresco'; algo fácil de entender para cualquier ser humano entrenado en la correspondiente tarea, pero imposible para las máquinas y programas de ordenador convencionales. El cambio de concepto era tan brusco que inicialmente Zadeh tuvo que afrontar el escepticismo de muchos de sus colegas, pero el éxito de las aplicaciones prácticas de esta teoría ayudaron a vencer las resistencias de la comunidad científica.

El ingeniero electrónico estadounidense Carver Mead fue reconocido en la pasada edición del Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de Tecnologías de la Información y la Comunicación.