Peter Godart: “Espero que lo positivo de este conflicto sea acabar con los combustibles fósiles”
El investigador del MIT participa este jueves en la Fundación Ramón Areces en un simposio sobre energía y cambio climático.
17 marzo, 2022 03:29“¿Cómo fuimos capaces de prosperar de manera equitativa y sostenible en el Antropoceno?”. Esta es la pregunta que intenta contestar Peter Godart (Ridgewood, Estados Unidos, 1992) en el departamento de Ingeniería Mecánica del prestigioso Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) además de desarrollar soluciones energéticas libres de carbono. Su especialización le llega a Godart de su trabajó en el laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, en las operaciones diarias del Curiosity Mars Rover y en el equipamiento del Perseverance. También de la dirección de un equipo para desarrollar un nuevo combustible a base de aluminio para un módulo de aterrizaje para Europa, una de las lunas heladas de Júpiter. El joven investigador estará, este jueves, 17, en la Fundación Ramón Areces para participar, junto a sus compañeros del MIT Sergei Paltsev, Dennis G. Whyte y Howard Herzgo, en el simposio El futuro de la energía: abordando el cambio climático.
Pregunta. ¿De qué forma está perturbando la actual guerra en Ucrania el panorama energético?
Respuesta. Ya estamos recibiendo indicios de mayores inversiones en tecnologías de energía sin combustibles fósiles, especialmente en toda Europa, que depende en gran medida del petróleo y el gas de Rusia. Espero que lo positivo que surja de este conflicto sea la motivación para acabar con los combustibles fósiles más temprano que tarde.
"Para combatir el cambio climático de manera efectiva debemos encontrar una manera de hacerlo sin liberar dióxido de carbono"
P. ¿Qué tipo de energía tiene más futuro en estos momentos?
R. Cualquier fuente de energía que no añada gases de efecto invernadero a la atmósfera o que de otro modo contamine el medio ambiente. Estoy particularmente entusiasmado con el uso de la energía térmica, ya sea del Sol o de pozos geotérmicos, para impulsar todo, desde la generación de electricidad hasta la calefacción y la refrigeración, de manera creativa. Por ejemplo, el enfriamiento se puede lograr eliminando la humedad del aire, enfriando el aire nuevamente a la temperatura ambiente y agregando esa humedad nuevamente. Este enfoque requiere un desecante que se puede generar usando solo energía térmica.
Aluminio libre de carbono
P. ¿Qué diría de la solar fotovoltaica y eólica?
R. Son emocionantes, pero en todos los casos necesitaremos aumentar significativamente la capacidad de almacenamiento de energía. Para esto, creo que almacenar energía como hidrógeno es prometedor. En relación con mi trabajo, espero ver la reducción de aluminio libre de carbono en línea en la próxima década, momento en el que podremos almacenar energía como aluminio a escala global y extraerla como hidrógeno. Todo ello sin emisiones de carbono en ninguna parte del circuito.
P. ¿Podrá el cambio climático cambiar las preferencias energéticas de las grandes potencias?
R. En muchos sentidos ya lo ha hecho, pero en mi opinión, no lo suficientemente rápido. Creo que los países también deberán invertir más en la adaptación al cambio climático, es decir, ¿cómo nos aseguramos de que las comunidades prosperen en un mundo donde incluso un calentamiento de +1,5 grados centígrados tiene repercusiones negativas significativas?
P. Según su experiencia, ¿considera que el cambio climático es reversible?
R. Desde una perspectiva termodinámica, es posible enfriar la Tierra artificialmente a través de los diversos enfoques de geoingeniería que se han propuesto a lo largo de los años, que en su mayoría implican bloquear la luz solar entrante de varias maneras. Sin embargo, a pesar de esto, se deben realizar más investigaciones para garantizar que estos enfoques no causen más daño que bien. Por ejemplo, ¿es aceptable reducir la intensidad de los huracanes en el Atlántico y al mismo tiempo causar sequías en otras áreas del mundo? Los problemas son de naturaleza global, por lo que las soluciones también deben serlo.
Producir y almacenar hidrógeno
P. En su trabajo para la NASA investigó un combustible a base de aluminio. ¿Se podría trasladar a usos más cotidianos como la electricidad, la desalinización...?
R. Si, absolutamente. Este fue el propósito de mi doctorado, que fue descubrir cómo aplicar esta tecnología a la chatarra de aluminio y los desechos de aluminio para desarrollar combustibles que pudieran usarse para generar recursos críticos como electricidad y agua potable después de un desastre natural. Fue mientras trabajaba en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA cuando me di cuenta de que quería pasar más tiempo resolviendo problemas directamente en este planeta, específicamente el cambio climático.
P. ¿Es el hidrógeno el futuro de las nuevas energías? ¿Qué usos específicos, qué aplicaciones podría tener ya?
R. El hidrógeno es un portador de energía ideal debido a su alta densidad de energía y a su capacidad para oxidarse para producir solo agua y calor, o electricidad directamente utilizando una celda de combustible. Por lo tanto, tiene sentido utilizar el exceso de electricidad generada a partir de fuentes renovables para producir y almacenar hidrógeno. Además, la producción de hidrógeno para la síntesis de amoníaco actualmente representa una fracción significativa de las emisiones globales de carbono, ya que se produce principalmente utilizando metano como materia prima. Para combatir el cambio climático de manera efectiva debemos encontrar una manera de hacerlo sin liberar dióxido de carbono en el proceso, ya sea a través de la electrólisis u otras tecnologías de división del agua (incluido mi trabajo con aluminio).
P. ¿Cuál es su opinión sobre la fusión nuclear? ¿A qué escenarios podría llevarnos?
R. La fusión nuclear es prometedora, pero probablemente solo sea parte de la solución global de energía libre de carbono, especialmente a corto plazo. Dada la rápida progresión de la crisis climática, también debemos invertir recursos en tecnologías que estén listas para escalar ahora. Lo que hagamos en los próximos 5 a 10 años va a ser fundamental.