Una de las actividades que pueden hacerse durante estos días de canícula es visitar la exposición Las manos mágicas en el Museo de la Evolución Humana (MEH) de Burgos, donde pueden verse algunas de las respuestas que Atapuerca ha dado al pasado del ser humano.

Así lo explica la arqueóloga Aurora Martín (Palencia, 1957), directora de esta institución —auspiciada por la Junta de Castilla y León— en la que pueden verse por primera vez, hasta 2025, “fósiles de manos y brazos de distintas especies, procedentes de los distintos yacimientos de la sierra de Atapuerca que abarcan una cronología de entre 1,4 millones y 400.000 años de antigüedad”.

Martín ha conseguido estar en lo más alto de la investigación nacional gracias a sus trabajos en los yacimientos de Atapuerca. Participó en el descubrimiento, hace ahora 30 años, de los primeros restos del Homo antecessor en la Gran Dolina y desde 2022 se encuentra al frente del MEH (aunque ya había sido su coordinadora general desde su inauguración en 2010).

Vista de la exposición 'Las manos mágicas' en el Museo de la Evolución Humana. Foto: MEH

Pregunta. ¿Qué importancia tienen las piezas que pueden verse estos días en la sala temporal del MEH?

Respuesta. Es la exposición que reúne más restos fósiles de mano realizada hasta la fecha. Nos habla de la adaptación de las extremidades superiores a los diferentes ecosistemas, de anatomía y de biomecánica y también de simbolismo. Estas piezas pasarán a incrementar la colección permanente del MEH como en años anteriores lo hicieron los fósiles de las extremidades inferiores de los individuos de la Sima de los Huesos y del Homo antecessor, completando cada vez más el esqueleto de estos homínidos.

"El ADN está facilitando una información sobre los neandertales que obliga a replantearse la historia de la evolución humana"

P. ¿Qué otras piezas importantes componen la colección del MEH?

R. Sin lugar a dudas, los fósiles humanos de los yacimientos de la sierra de Atapuerca. Tienen un valor único. Permiten al visitante enfrentarse con las características del Homo antecessor, en concreto con la chica de la Gran Dolina, o con los fósiles de la Sima de los Huesos, entre ellos el cráneo 5 (Miguelón), ahora con sus vértebras cervicales, o la pelvis (Elvis), actualmente con las vértebras lumbares, y entablar un diálogo con ellos. No hay restos humanos en el mundo tan completos y bien conservados.

P. ¿Cómo conecta el MEH con el arte actual? ¿Cuál es su objetivo?

R. Destacaría de forma especial las diez esculturas hiperrealistas de diversas especies de homínidos realizadas por la paleoartista Elisabeth Daynès, que conforman la Galería de los Homínidos, y El cerebro, de Daniel Canogar, que es una magnífica y didáctica interpretación del funcionamiento del cerebro humano.

P. ¿De qué forma la información que nos ha dado Atapuerca ha cambiado el conocimiento de nuestra prehistoria?

R. Atapuerca ha ocupado en varias ocasiones las portadas de revistas de prestigio internacional como Science o Nature. Gracias a los yacimientos de Atapuerca, España se ha elevado al nivel más alto en cuanto centro de la paleoantropología mundial. Han recibido premios como el Premio Príncipe de Asturias a la Investigación Científica y Técnica de 1997 y en 2000 fueron nombrados Patrimonio Mundial por la Unesco. Actualmente son los yacimientos donde se ha recuperado buena parte del registro fósil del Pleistoceno inferior y medio.

»El hallazgo del Homo antecessor, en el nivel TD6 de la Gran Dolina supuso un espaldarazo para el equipo y para el proyecto. Primero porque era la primera vez que un equipo español definía una especie y en segundo lugar porque al confirmar la antigüedad de los fósiles encontrados, ha cambiado el paradigma de la primera colonización de Europa. 

P. ¿Qué sorpresas se esperan aún de los yacimientos?

R. Nos queda mucho por saber. Por ejemplo, respecto a Homo antecessor. La campaña de excavación de este año en el nivel TD6 de la Gran Dolina revelará más hallazgos, de donde extraeremos información sobre cómo era esta especie, de dónde provenía, cómo y cuándo se extinguió, que relación tenía con otros homínidos, sus capacidades tecnológicas y sus estrategias de supervivencia.

También se podrían descubrir más fósiles humanos del periodo comprendido entre 1 millón y 1,4 millones de años que nos ayuden a comprender a qué especie pertenece la cara denominada Pink. Son todavía muchas las preguntas sin respuesta. 

Campaña de excavaciones de 2012 en la Gran Dolina. Foto: Mario Modesto Mata

 

P. ¿Cómo está viviendo las novedades en torno a los neandertales? ¿Cómo lo valora?

R. Las nuevas tecnologías aplicadas al estudio de los restos humanos están proporcionando información realmente sorprendente que hace unos años nos parecería increíble. El estudio del ADN está facilitando una información sobre las líneas de parentesco de estos homínidos que obliga, una vez más, a replantearse la historia de la evolución humana.

P. ¿Cree que hay en la sociedad una mayor sensibilidad hacia nuestro pasado, hacia los hallazgos arqueológicos?

R. Creo que se ha incrementado el interés social por estos hallazgos, por el patrimonio cultural y por los descubrimientos científicos. Paralelamente, se ha ido acrecentando la atención de los medios de comunicación. Realizan una importante labor de divulgación para dar voz a los investigadores y para dar a conocer los hallazgos a la sociedad que, en buena medida y la mayor parte de las veces, demanda su conservación al considerar este patrimonio como algo importante. La respuesta de las instituciones públicas es desigual, aunque cada vez es más habitual una respuesta clara y eficaz ante el reto de la conservación.