Es la muerte, pero no la muerte del corto, la protagonista de esta nueva edición de la Semana de Cine de Medina del Campo, la llamada "meca" de un género que cada día tiene mayor trascendencia en el descubrimiento y consolidación de los nuevos valores. Gustavo Salmerón (Desaliñada), Antonia San Juan (V.O.), Antonio Molero (Post-coitum), Miguel Álvarez (Antes de oscurecer), Guido Jiménez (Heart of Gold), Vicente Seva (Un dulce despertar), y Víctor Fuentes (Bienvenido a Disneylandia) son los principales nombres de la cita de este año.

Medina del Campo se ha convertido ya en uno de los mejores festivales de cortometrajes de nuestra península. Con trece ediciones a sus espaldas es uno de los certámenes que más cintas recibe y uno de los pocos que trata al vídeo como un soporte independiente y con entidad propia dentro del cine. Si Alcalá de Henares marca el inicio de la temporada otoñal del corto, con esta 14 Semana de Cine se inaugura la segunda parte de la temporada festivalera que mantendrá ocupados a los amantes del cortometraje hasta los albores del verano.
Es por lo tanto un buen momento para tomar el pulso de un sector en auge que ha dejado de ser experimental y "de jóvenes" para madurar y mejorar técnica y estéticamente. Así lo asegura Emiliano Allende, director del festival, que este año ha visionado106 cortos en 35 mm y algunos más en vídeo para poder seleccionar a los participantes: "Afortunadamente, aunque con dificultades, los cortos se van abriendo camino. El lenguaje cinematográfico ha mejorado sustancialmente. La fotografía, el sonido, son, en muchos de los trabajos aquí elegidos, muy profesionales"

Además, gracias a televisiones públicas (La 2) y privadas (Canal +) el corto ha logrado, en los últimos dos años, entrar en los hogares españoles y ha acostumbrado al público a saber apreciar las historias en envase pequeño. "La obra es más lo que perdura en la memoria que lo que dura el tiempo de metraje", dice Allende en defensa de estas breves películas que han sido su vida desde que dirige el festival.

Sobre la muerte

La temática urbana, historias de barrio o de jóvenes que tenían como fondo la calle, han ido desapareciendo de los festivales para dar paso a unas películas más maduras. Y eso se ve claro en Medina del Campo. Abundan todavía las historias que meten el dedo en la llaga de las relaciones de pareja (Paraguas, de Sergio Barrejón, Post-coitum, de Antonio Molero, In crescendo, de Jesús Ramos y Joan Marimón, V.O., de Antonia San Juan) y en las relaciones humanas en general (Garbanzos, de Manu Fernández). "El año pasado hubo un pequeño boom de películas con temática homosexual -dice Allende-, mientras que este año son las películas que reflexionan sobre la muerte las que hemos encontrado en mayor número". En todas ellas se aborda el complejo mundo de las sensaciones que rodean al hecho de enfrentarse a la muerte propia o ajena. Se trata de Antes de oscurecer, de Miguel álvarez, Heart of Gold, de Guido Jiménez Cruz, Un dulce despertar, de Vicente Seva, 4, de Joan Marimón, Bienvenido a Disneylandia, de José Víctor Fuentes o El aparecido, de Diego Agudo. éste último es uno de los tres únicos cortos de animación (junto con El padrino, parte IV, de José y Manuel Lagares, y Un matrimonio bien avenido, de Inma Rodríguez) en la sección oficial.

Pero es el actor Gustavo Salmerón el protagonista absoluto de esta gran semana de cine: su primera película, Desaliñada, abre el festival después de haber ganado el año pasado los 3 millones del premio al mejor proyecto corto que otorga la organización de Medina de Campo. Salmerón ha realizado una original y arriesgada fantasía de amor entre una ensalada (interpretada por Candela Peña) y un pescado (Ernesto Alterio) poco antes de ser conducidos a la mesa en el mismo plato.

Una mujer peligrosa

Y no es el único actor que se ha pasado a la dirección y que presenta corto en el festival. Antonia San Juan ha rodado en V.O. las aventuras y desventuras que corre un hombre al acudir a una cita a ciegas. San Juan dirige e interpreta a la peligrosa mujer de este corto. Y Antonio Molero, que también habla del amor y otros demonios en Post-coitum, se estrena detrás de la cámara con una pareja que habla de lo divino y lo humano en la cama de un hotel.

En la sección de vídeos, las 25 películas a concurso muestran prácticamente todo lo que se puede hacer en cine: hay documentales (como Cuarto mundo, de David Lara y Manu Herrera), animación (como El extraño viaje de Mr. Hopper, de Patxi Aranjo), y muchos experimentos (como Deriva, de Mayda Zabala, que une vídeo y danza en la industrial ría de Bilbao). En fin, de todo, para pasar una Semana de Pascua ideal en Medina del Campo.