Image: De Amos Gitai a Woody Allen

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Cine

De Amos Gitai a Woody Allen

Seminci. Sección Oficial

23 octubre, 2003 02:00

Cristina Ricci y Jason Biggs en Anything else, de Woody Allen

Basándonos en la excelente inauguración (Dogville, de Lars von Trier) y la no menos notable clausura (lo último de Woody Allen, Anything else) que tiene programada la 48 Semana Internacional de Cine de Valladolid, es de esperar una interesante selección a concurso. Y no es para menos. Serán 19 películas a competición, procedentes de países tan desiguales como Israel, Holanda, Irán, Noruega, Australia, Dinamarca, Francia, Canadá, Libia, Argentina, Estados Unidos, Alemania y, por supuesto, España. A partir de mañana, convivirán en la capital vallisoletana cineastas consagrados con jóvenes promesas y autores que esperan confirmar el talento que les fue reconocido en su debut, si bien el cine joven y supuestamente autoral es la nota predominante.

Llama la atención que el director belga Lukas Belvaux participe con ¡tres largometrajes! (Después de la vida, Huida y Una pareja estupenda), ante la exigencia, quizá, de que uno no se entiende sin los otros, pues componen una trilogía en torno al género policíaco y criminal, con mismos actores y diferentes puntos de vista. Nos preguntamos: ¿si deciden conceder la Espiga de Oro a uno de ellos, las otras dos partes también se darán por aludidas? Sin embargo, presumiblemente los platos fuertes han sido cocinados por manos femeninas. Tanto la norteamericana Sofia Coppola como la danesa Lone Scherfig, que alcanzaron sendos éxitos con sus debuts (Las vírgenes suicidas e Italiano para principiantes), vienen dispuestas a repetir éxito con Lost in Translation y Wilbur se quiere suicidar, respectivamente. No menos interesante será el último trabajo de la australiana Jane Campion (El piano), quien se ha incorporado a última hora al certamen con el filme En carne viva.

Desde las antípodas australianas también viaja a la capital castellano-leonesa El proyecto de Alejandra, dirigida por Rolf de Heer; y de la zona austral del globo, el argentino Eduardo Mignogna, que ha reclutado a Norma Aleandro y Héctor Alterio para Cleopatra, su nueva comedia agridulce. Será el director a concurso con más cine a sus espaldas, privilegio que comparte con el israelí Amos Gitai, quien presenta Alila, retrato de una comunidad de vecinos en las afueras de Tel Aviv.

Participación española
En representación española, participarán tres directores. Salvador García Ruiz, que tras las estupendas Mensaka y El otro barrio acude con Las voces de la noche, donde convoca a Laia Marull y Tristán Ulloa. El director de El traje, Santo Amadeo, participa con la comedia Astronautas, mientras que ángeles González-Sinde (una de las guionistas con más oficio de nuestro cine) debuta con el drama La suerte dormida. Otro debut es el del afgano Siddiq Bermak, que aporta la nota política con Osama, la odisea de una madre y su hija para ganarse la vida bajo el opresivo régimen talibán. Procedente de Irán más cine social y político, el que trae Jafar Panahi bajo el título Sangre y oro, a partir de un guión de Abbas Kiarostami. Completa la presencia de cine político, el filme libanofrancés La cometa, de Randa Chahal Sabbag, donde el problema fronterizo con la vecina Israel no impide que surgan historias de amor entre bandos contrarios.

Con mucho terreno ganado compite por la Espiga la comedia alemana Good Bye, Lenin!, de Wolfgang Becker, que arrasa en las taquillas europeas avalada por el Premio ángel Azul a la Mejor Película Europea del año. La producción independiente The Cooler traerá una nueva voz norteamericana a nuestro país, la de Wayne Kramer, y sobre el país estadounidense lanza sus dardos el canadiense Denys Arcand con Las invasiones bárbaras. Completa esta interesante sección oficial una coproducción entre Noruega y Suecia, Kitchen Stories, de Bent Hamer. No habrá excesivo glamour ni huelgas inoportunas. Habrá buen cine, que es de lo que se trata.