No hay medias tintas para Lars von Trier. Su cine provocativo, visceral y perturbador habla por sí mismo, pero por si no fuera suficiente, la "Edición para coleccionistas" de Dogville -que incluye tres discos- nos muestra de primera mano hasta qué punto son mito o leyenda los diversos rumores sobre los duros métodos de trabajo del director danés. Dirigido por Sami Saif, el documental creativo Dogville Confesiones -Disco 3- justifica por sí mismo la edición ampliada del DVD, que incluye los dos metrajes de la película (el de 171 y el de 143 minutos), así como la grabación íntegra de diversas conferencias de prensa, entre ellas la realizada en el Festival de Cannes. El valor de Dogville Confesiones -de casi una hora de duración- va más allá de mostrar el intenso drama del rodaje de Dogville. Comprobamos que detrás de la opción estética de rodar la película como si fuera teatro filmado, hubo también una opción antropológica, la voluntad de que el plató se convirtiera en el infernal pueblo de la película. Vemos las extremas condiciones en las que trabajó un grupo de reputados actores, bajo las órdenes de un director que no parece sentir ni aprecio ni compasión por ellos, y palpamos la tensión que se generó entre el cineasta y Lauren Bacall, Paul Bettany y Nicole Kidman. Nada como compartir desde casa la "inolvidable" experiencia de hacer una película con Lars von Trier.