Madrid, de estreno
La Orquesta de la CAM apuesta por el nuevo repertorio
23 septiembre, 2004 02:00José Ramón Encinar, titular de la ORCAM
El 28 de septiembre se inicia la temporada de la Orquesta de la Comunidad de Madrid en el Auditorio Nacional. Bajo la responsabilidad musical de José Ramón Encinar, la formación madrileña ofrece uno de los ciclos más consistentes, variados e imaginativos, que se destaca por su apuesta por los estrenos.
Atendamos primero a los estrenos. Una llamada de interés, en primer término, para la Sinfonía nº 3, El viaje múltiple, de Jesús Rueda, sólido creador, que posee una insólita sabiduría orquestal y unas dotes constructivas de primera magnitud. El siempre sugerente Carlos Cruz de Castro, amigo del ostinato y de las tintas fuertes, presenta su suite La sombra del inquisidor, mientras el cálido y sensual melodista Claudio Prieto ofrece su visión de Vicente Aleixandre en Al poeta, al fuego, a la palabra. Otro músico capaz de entretejer las más variadas texturas es Jesús Torres, que estrena un Concierto para acordeón. Agustín González Acilu, por su parte, siempre sorprendente en sus rompedoras ideas, presenta un Triple concierto. Queda la incógnita de Cuevas, ganador, con Airi’s, del Concurso de composición "Joaquín Rodrigo".
Al lado de estas obras aparecen la orquestación que el veterano Manuel Angulo ha hecho de los Seis poemas líricos de Juana de Ibarbourou de Julio Gómez, su maestro, y Vendaval, una de las últimas partituras sinfónicas de Luis de Pablo. Por la serie corre el refrescante aire de la música de Félix Mendelssohn, con sus cinco sinfonías, servidas por Salvador Mas, Edmon Colomer, Alberto Zedda, Miguel Groba y Helmut Rilling. Otras composiciones importantes del repertorio, no siempre muy tocadas, son, por ejemplo, la Sinfonía nº 1 de Shostakovich, Das knaben Wunderhorn de Mahler (con dos cantantes muy respetables, como Marjana Lipovsek y Andreas Schmidt), Aparebit repentina dies de Hindemith y Ritratto di Don Chisciote de Petrassi (estreno en España).
Atractiva combinación
Merecería la pena reproducir, por su lógica y novedad, muchos programas. Citemos solamente dos: Offrandes (sobre textos de Huidobro y Tablada) de Varèse, Seis poemas (sobre textos de Juana Ibarbourou) de Gómez/Angulo, antes citados, Canción desesperada (sobre textos de Neruda) de Francisco Otero Serenata op. 42 (sobre textos de Neruda) de Ginastera; y esta atractiva combinación de la Orquesta de Lorraine dirigida por Jacques Mercier: La Péri de Dukas, Poémes pour Mi de Messiaen y La tragédie de Salomé de Schmitt.
El Coro -que estará el próximo 25 y 29 de octubre en Pekín y Shangai, en una breve gira con obras españolas-, protagoniza a las órdenes de su director Jordi Casas algunas interesantes sesiones: Schötz, Purcell, Rodolfo Halffter y Hindemith; Pasión según San Juan de Bach; Cinco canciones de Haydn, Miriam"s Siegestgesang de Schubert y las Vísperas de Confesor de Mozart. Mencionemos asimismo El Mesías dirigido por Fabio Biondi.
El 15 y el 16 de octubre la Orquesta de la Comunidad hace un viaje a la importante Bienal de Venecia (donde se estrenó, por ejemplo, en 1951, La carrera de un libertino de Stravinski). Presenta obras lógicamente de estos tiempos. Por parte española programa Taqsin de Sánchez Verdú, áfrika (Concierto para marimba) de Erkoreka y Vendaval de Luis de Pablo (que aparece,según se ha visto, en la programación de abono), ápeiron de Posadas y una de las piezas sinfónicas más apabullantes de Paco Guerrero, Coma Berenices. Dirigen Encinar y Luca Pfaff.